Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de la Casa de la Loma tiene un Fantasma y como informamos en el capítulo anterior; Gamaniel quien fue enviado por Aurelio "mata ricos" como un guía hacia la hacienda de los hermanos Valladares Ontaneda; para que limpie el camino o en todo caso explore el terreno para identificar obstáculos o el cruce con otros bandoleros para lograr el éxito de la incursión que este viernes se hará contra la hacienda; pero lamentablemente Gamaniel, se introdujo demasiado llegando hasta casi la Casa Hacienda y como estaba escondido detrás de unos chopes(matorrales) fue descubierto por los perros que alertaron a Imelda, quien al descubrir al desconocido no reaccionó en atrapar al individuo; Julián, quien era el jefe del grupo de guardianes llegó después de esos instantes y se enteró de la novedad; Gamaniel logra huir pero con su desatino rompió el "elemento sorpresa" que lo considera tan necesario para las incursiones.
Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú;
es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas,
sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás,
seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al
misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra
literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA"
, esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en
creación, impresión y distribución literaria. Con reconocimiento de
derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con
fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI. Fuente de imagen: Archivos del blog .
Julián, que aún sentía "los humos de la borrachera", logró superar ese estado de ánimo casi como "arte de magia" por que rápidamente le funcionaron los "reflejos de la supervivencia" y sus pensamiento y con mucha preocupación lo condujeron a tiempos atrás, sobre la presencia de personas desconocidas que anduvieron y lo siguen haciendo como un azote maligno dentro de la hacienda.
Julián, dedujo que probablemente el mismo hombre quien desarmó a Sixto y su grupo, sea el que acaba de huir y ha demostrado una vez más lo atrevido que es, como llegar a Casa Hacienda sin que nadie lo haya visto; fue descubierto gracias al olfato de los perros y los sometió a los tres canes con facilidad que causó asombro.
Julián, mientras caminaba en dirección a la choza de Gabriel, seguía concentrado en sus pensamientos tratando de buscar la solución para defenderse de un eminente ataque de asaltantes; se tenía que armar a los guardianes, pero probablemente estos aún estaban afectados por la jarana de amanecida, pero no había otra alternativa; la resaca se aliviará dando arengas a los guardianes.
El Blandir de las Armas anima a enfrentar al enemigo.
Julián, al llegar a la choza, casi se desmaya al ver a sus hombres tirados sobre el piso aún roncando, ante semejante cuadro deprimente, no tuvo mejor idea que coger un balde (cubo de madera) lleno de agua y echar con fuerza sobre la cabeza de cada borracho, quienes al sentir un tremendo baldazo de agua fría, reaccionaron despertándose de inmediato y algo asustados se levantaron con ánimos furibundos contra el improvisado aguatero; pero, Julián que conocía muy bien a sus hombres, les dijo:
--- Muchachos, por favor no se encolericen, por que estamos en grave peligro, por esa razón los desperté con agua, narrando el hecho.. sucede que hace un rato atrás, ha "visitado" la Casa Hacienda un individuo desconocido y gracias al olfato de los perros, fue descubierto por Imelda, quien huyó ante el temor que tuvo ella, dejándolo sólo sobre el árbol que lo habían encaramado los perros; el Patrón Elmer, sigue durmiendo, no pude informarle lo sucedido, así que vamos almorzar y de inmediato ensillamos los caballos y rondaremos toda la hacienda.
Julián se tomó una pausa y agregó:
--- Ya tuvimos mucha diversión, por lo que nos toca defender la Hacienda, cada uno de ustedes irá armado con su carabina, machete, puñal y la puñeleta; asimismo llevarán un poncho de lana y un hule de caucho por si llueva en la noche, por que de ninguna manera se abandonará la vigilancia.
Julián, nuevamente hizo otra pausa y finalizó:
--- Amigos, de nosotros depende la seguridad de la hacienda y nunca hemos sido atacados, pero los bandoleros están por allí, merodeando y buscando nuestros puntos débiles para atacarnos; se han puesto a pensar, si los facinerosos hubiesen atacado anoche; pues, se llevaban la Casa Hacienda en hombros y sin que nadie la defendiese; entonces, no les demos otra oportunidad, por que si regresan nos encontrarán esperándolos con toda nuestra energía para vencerlos.
Empero, en otro lugar, siendo aproximadamente las 13 horas del día viernes, nos ubicamos al otro lado del Cerro Usaime, en una choza cercana al Río Calvas; encuentran en plenos preparativos los bandoleros al mando de Aurelio "mata ricos" junto a Cristóbal "cristo matón" y su grupo de hombres; habían hecho un alto para almorzar, a la vez había desaparecido de sus rostros las sonrisas, todos estaban con gestos adustos, no era para menos si en la noche harán la incursión contra la hacienda de los hermanos Valladares Ontaneda. Según los planes de Aurelio, será un asalto de completa sorpresa y con la ayuda del guía Gamaniel, quien los llevará directo a la Casa Hacienda que es el objetivo de la incursión.
La realidad era completamente diferente, pues, Gamaniel fue descubierto y los guardianes de la hacienda estarán rondando los rincones y puntos vulnerables; claro que es un grupo reducido como para cubrir con la vigilancia de la inmensidad de pampas, lomas y potreros de la hacienda y eso lo saben los asaltantes; pero el "elemento sorpresa" se perdió por que las fuerzas leales y las agresoras estarán en igualdad de condiciones; justamente era la situación que Aurelio desconocía, ya que esta vez serán ellos los sorprendidos por los defensores; aún así, él, será prevenido por Gamaniel, quien delató sin proponérselo su presencia en la hacienda y teme que Aurelio lo regañe.
Terminado el almuerzo de los asaltantes y como un alto de relajamiento, Aurelio, sugirió a Cristóbal ir hasta la pulpería de Melesio para comprar algunas municiones más y despedirse de las enamoradas; las "chinas" como se les llama en el Perú, o las "huambras" como les dicen en el Ecuador: Luzmila e Iralda los esperaban ansiosas por saber algo de ellos; al llegar a la pulpería, fue Luzmila quien los recibió dándole un fuerte abrazo a Aurelio, luego apareció Iralda e hizo lo mismo con Cristóbal; después de los amorosos saludos, fue Luzmila, quien les dijo:
--- Que gusto ver a estos ingratos pájaros, parecen que sus alas tienen mucha fuerza y vuelan muy lejos, pero nunca en dirección a esta casa, de todas maneras sean bienvenidos y pasen adelante en la pulpería está mi Papá despachando a un cliente.
Aurelio, sabía de los peligros de la incursión y muchas veces se pierde la vida y el cuerpo del muerto es desbarrancado en profundas hoyadas, que era como el máximo castigo para un bandolero, por su puesto las "huambras" desconocían las actividades de sus cortejantes y como esta visita era un pretexto para despedirse, le contestó:
--- Luzmila, eres el amor que cautiva mi corazón y todo mi ser está dirigido a tu persona y si no hemos venido antes. es por que estamos preparando un viaje que nos demanda mucha dedicación para lograr el éxito y justamente hemos venido a despedirnos y si todo sale bien como nosotros lo deseamos, tal vez en tres días estaremos de nuevo en esta casa para beber unos tragos macerados con tu Papá y por su puesto disfrutar de tus cariñosos abrazos.
Iralda, viendo a los dos visitantes estaba muy preocupada y tenía presentimientos que algo malo iba a suceder, pero mantuvo su voluntad firme y también, dijo:
--- Como bien lo dice mi hermana, ustedes se hacen extrañar y si no es pedir mucho en el próximo viaje ya estaremos unidos; esperamos que todo salga bien en su viaje y podamos compartir su regreso con mucha felicidad.
En seguida las parejas ingresaron a la pulpería, se saludaron con Don Melesio y compraron las municiones que les faltaba; entonces, Luzmila muy inquieta por esas compras, preguntó:
--- Por favor, díganme que clase viaje van a realizar por que están comprando balas.
Aurelio, se apuró a contestar con cierto cinismo ya que él era uno de ellos, diciendo:
--- Es que últimamente han aparecido transeúntes desconocidos que atacan a los viajeros, por lo que debemos estar armados para defendernos.
Don Melesio, que si conocía las "actividades" de sus futuros yernos, trató de afirmar ante sus hijas lo dicho por Aurelio y dijo:
--- Si hijas, si viajas tienes que estar preparado para cruzar los larguisimos caminos; recuerdo que en mi juventud las caminatas que hacíamos a Cuenca, Loja, Machala y otros lugares y es divertido viajar, por lo que no teman y hagan sus plegarias al Altísimo para que sus novios tengan un buen viaje.
Don Melesio, como anfitrión, tenía siempre una botella abierta de licor macerado y de inmediato la sacó y sirvió una copa y dijo:
--- Brindo por el buen viaje de mis amigos.. salud, salud salud !!!
Bebió todo el contenido de una sola vez y pasó la botella y la copa a Aurelio, quien hizo lo mismo brindando y bebiendo y la pasó a Cristóbal, quien brindó con Iralda y ella con Luzmila y ella lo repitió con su novio Aurelio; allí terminó la libación del licor, los visitantes se despidieron con muchos abrazos y suspiros y retornaron a su choza.
El tiempo, había transcurrido sin demora y estamos llegando a las 5:00 p.m. (17 horas) los bandoleros daban sus últimos toques revisando sus armas...... continuaremos.....
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
ayabaca@gmail.com
ayabaca@hotmail.com
ayabaca@yahoo.com
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Julián, nuevamente hizo otra pausa y finalizó:
--- Amigos, de nosotros depende la seguridad de la hacienda y nunca hemos sido atacados, pero los bandoleros están por allí, merodeando y buscando nuestros puntos débiles para atacarnos; se han puesto a pensar, si los facinerosos hubiesen atacado anoche; pues, se llevaban la Casa Hacienda en hombros y sin que nadie la defendiese; entonces, no les demos otra oportunidad, por que si regresan nos encontrarán esperándolos con toda nuestra energía para vencerlos.
Empero, en otro lugar, siendo aproximadamente las 13 horas del día viernes, nos ubicamos al otro lado del Cerro Usaime, en una choza cercana al Río Calvas; encuentran en plenos preparativos los bandoleros al mando de Aurelio "mata ricos" junto a Cristóbal "cristo matón" y su grupo de hombres; habían hecho un alto para almorzar, a la vez había desaparecido de sus rostros las sonrisas, todos estaban con gestos adustos, no era para menos si en la noche harán la incursión contra la hacienda de los hermanos Valladares Ontaneda. Según los planes de Aurelio, será un asalto de completa sorpresa y con la ayuda del guía Gamaniel, quien los llevará directo a la Casa Hacienda que es el objetivo de la incursión.
La realidad era completamente diferente, pues, Gamaniel fue descubierto y los guardianes de la hacienda estarán rondando los rincones y puntos vulnerables; claro que es un grupo reducido como para cubrir con la vigilancia de la inmensidad de pampas, lomas y potreros de la hacienda y eso lo saben los asaltantes; pero el "elemento sorpresa" se perdió por que las fuerzas leales y las agresoras estarán en igualdad de condiciones; justamente era la situación que Aurelio desconocía, ya que esta vez serán ellos los sorprendidos por los defensores; aún así, él, será prevenido por Gamaniel, quien delató sin proponérselo su presencia en la hacienda y teme que Aurelio lo regañe.
Terminado el almuerzo de los asaltantes y como un alto de relajamiento, Aurelio, sugirió a Cristóbal ir hasta la pulpería de Melesio para comprar algunas municiones más y despedirse de las enamoradas; las "chinas" como se les llama en el Perú, o las "huambras" como les dicen en el Ecuador: Luzmila e Iralda los esperaban ansiosas por saber algo de ellos; al llegar a la pulpería, fue Luzmila quien los recibió dándole un fuerte abrazo a Aurelio, luego apareció Iralda e hizo lo mismo con Cristóbal; después de los amorosos saludos, fue Luzmila, quien les dijo:
--- Que gusto ver a estos ingratos pájaros, parecen que sus alas tienen mucha fuerza y vuelan muy lejos, pero nunca en dirección a esta casa, de todas maneras sean bienvenidos y pasen adelante en la pulpería está mi Papá despachando a un cliente.
Aurelio, sabía de los peligros de la incursión y muchas veces se pierde la vida y el cuerpo del muerto es desbarrancado en profundas hoyadas, que era como el máximo castigo para un bandolero, por su puesto las "huambras" desconocían las actividades de sus cortejantes y como esta visita era un pretexto para despedirse, le contestó:
--- Luzmila, eres el amor que cautiva mi corazón y todo mi ser está dirigido a tu persona y si no hemos venido antes. es por que estamos preparando un viaje que nos demanda mucha dedicación para lograr el éxito y justamente hemos venido a despedirnos y si todo sale bien como nosotros lo deseamos, tal vez en tres días estaremos de nuevo en esta casa para beber unos tragos macerados con tu Papá y por su puesto disfrutar de tus cariñosos abrazos.
Iralda, viendo a los dos visitantes estaba muy preocupada y tenía presentimientos que algo malo iba a suceder, pero mantuvo su voluntad firme y también, dijo:
--- Como bien lo dice mi hermana, ustedes se hacen extrañar y si no es pedir mucho en el próximo viaje ya estaremos unidos; esperamos que todo salga bien en su viaje y podamos compartir su regreso con mucha felicidad.
En seguida las parejas ingresaron a la pulpería, se saludaron con Don Melesio y compraron las municiones que les faltaba; entonces, Luzmila muy inquieta por esas compras, preguntó:
--- Por favor, díganme que clase viaje van a realizar por que están comprando balas.
Aurelio, se apuró a contestar con cierto cinismo ya que él era uno de ellos, diciendo:
--- Es que últimamente han aparecido transeúntes desconocidos que atacan a los viajeros, por lo que debemos estar armados para defendernos.
Don Melesio, que si conocía las "actividades" de sus futuros yernos, trató de afirmar ante sus hijas lo dicho por Aurelio y dijo:
--- Si hijas, si viajas tienes que estar preparado para cruzar los larguisimos caminos; recuerdo que en mi juventud las caminatas que hacíamos a Cuenca, Loja, Machala y otros lugares y es divertido viajar, por lo que no teman y hagan sus plegarias al Altísimo para que sus novios tengan un buen viaje.
Don Melesio, como anfitrión, tenía siempre una botella abierta de licor macerado y de inmediato la sacó y sirvió una copa y dijo:
--- Brindo por el buen viaje de mis amigos.. salud, salud salud !!!
Bebió todo el contenido de una sola vez y pasó la botella y la copa a Aurelio, quien hizo lo mismo brindando y bebiendo y la pasó a Cristóbal, quien brindó con Iralda y ella con Luzmila y ella lo repitió con su novio Aurelio; allí terminó la libación del licor, los visitantes se despidieron con muchos abrazos y suspiros y retornaron a su choza.
El tiempo, había transcurrido sin demora y estamos llegando a las 5:00 p.m. (17 horas) los bandoleros daban sus últimos toques revisando sus armas...... continuaremos.....
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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