Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel entre Iarma y Olzagon y como informamos en el capítulo anterior, Olzagon salió a trabajar como vendedor en el segmento de Supermercados en representación de la Fábrica de Productos Plásticos "El Dorado"; él, al iniciar su primer día tuvo como "punto de mira" a el gran Supermercado "Mercado Gigante"; fue bien recibido por el funcionario de compras Señor Alipio Cardoza, quien aseguró a Olzagon, que estaba relacionandolo con un estudio de factibilidad para la ampliación de ofertas a su clientela; sólo que si compraba toda la gama de productos que ofrecía la Fábrica de los plásticos sería a consignación y se cancelaría las facturas a medida que se vendan los productos; esta exigencia escapaba a las concesiones que Olzagon podía ofrecer al cliente y ofreció consultarlo con su superior y en la misma tarde respondería a la solicitud o planteamiento del supermercado
Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen la consistencia del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices. Fuente: Archivos del blog. Obra Literaria reconocida con Derecho de Autor, según Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI
Olzagon, se despidió del señor Alipio Cardoza, salió y regresó directo a la Fábrica, al llegar pasó a la Supervisión de Ventas, allí estaba la Supervisor Don Antonio, quien al verlo regresar tan temprano, le preguntó:
--- Olzagon, ¡¡¡ Que pasó o te asustó el trabajo de la calle !!! en todo caso cuéntamelo que hay de novedades.
Olzagon, le pareció un poco despistado a su jefe, pero no le hizo caso y fue al grano, diciendo:
--- Señor, he tenido que retornar por que tenemos que dar una repuesta lo más rápidamente al Supermercado "Mercado Gigante"; acabo de entrevistarme con el Jefe de Compras y gustosamente quiere nuestros productos; es más ofrece colocarlos en "Cabecera de Góndola", pero los pagos serán a consignación, por que según ellos, nuestros productos son desconocidos en el mercado y no se sabe la reacción de los clientes por los nuestros.
Don Antonio, casi da un salto para topar hasta el cielo al escuchar que los productos dorados, eran desconocidos y además dejar mercadería en consignación era una aberración para la solvencia de la Fábrica, aún así tenía que contestar y dijo:
--- Muy bien Olzagon, haz hecho bien en visitar al mayor de los supermercados de la Gran Capital y tal vez me estás dando la razón; a mis plateamientos que nuestros productos no son para ventas directas; pues jamás aceptaré regalar los productos a consignación, por que no habrá un compromiso formal, lo que si me parece interesante ser "Cabeza de Góndola", en todo caso voy a plantear ante la Gerencia General tu pedido, pero el jefe está de viaje y retorna la próxima semana.
Olzagon, quien creía haber hecho un excelente contacto comercial, sufrió terrible decepción escuchar la respuesta de su jefe inmediato y lo que más le llamó la atención fue que él, no tenía ninguna intención en enviar mercadería al supermercado, de todas maneras, cortésmente le replicó:
--- Disculpe señor, que discrepe de su posición sobre el planteamiento del supermercado, por que nosotros no tendremos gastos de comercialización, creo que bien vale la pena, atender el pedido con productos de línea y otros que ya no tengan aceptación por los mayoristas y así bajamos el stock, ya se hizo el contacto, nada perdemos con intentarlo...
Don Antonio, quien era un testarudo en sus planteamientos, le pareció interesante la sugerencia de Olzagon y en efecto había un fuerte stock de mercadería que no se vendió la temporada navideña pasada y si se mezcla con los últimos producidos, podrán ser aceptados ofreciéndolos a precios reducidos que busca el cliente y contestó:
--- Olzagon, debo felicitarte por tus ideas brillantes, nunca me imaginé, como venderíamos unas mercaderías "huesos" y si las mezclamos con los nuevos productos creo que "pegarán" (aceptación del público) como gangas para el cliente y dime:
¿Cuándo ofreciste regresar con la respuesta?
Olzagon, sintió que su alma regresó a su cuerpo, ante el cambio de parecer de su jefe y contestó:
--- Señor, ofrecí consultar con usted y de inmediato notificarle si estábamos de acuerdo.
Don Antonio, llamó al Jefe de Almacén, pidiendo información detallada del stock y continuó conversando con Olzagon y le dijo:
--- Caramba, debo reconocer que tienes "pasta para vender" (ser un buen vendedor) y lo que más me gustó, es ver tu ánimo para encontrar la solución ante los inconvenientes, pues me ganaste, y voy a disponer que enviaremos un buen lote de mercadería de juguetes, útiles de cocina, repostería, etc, a precios muy reducidos....
Don Antonio hace una pausa y agregó:
--- Ya haré cálculos con el Departamento de Producción para conocer los costos y dispondré que las señoritas impulsadoras que están por los centros mayoristas, sean trasladadas al supermercado, luego que se exhiba nuestra mercadería; puedes regresar al supermercado e informa que aceptamos sus condiciones,con la única salvedad que serán nuestras impulsadoras, las encargadas de promocionar el uso de los productos en las "cabeceras de góndolas" y te alcancen la información, a quién va dirigida la mercadería, dirección y el nombre del representante que recepcionará nuestros productos.
Olzagon que estuvo sudando frío, por el temor que se iba a perder al primer cliente de los supermercados, no estaba muy de acuerdo con el envío de mercaderías pasadas de temporada, pero no había otra alternativa y con su ánimo por las nubes, salió de la Fábrica y regresó de nuevo al Supermercado, al llegar de inmediato lo hicieron pasar al despacho del Jefe de Compras y le informó la aceptación de la Fábrica para venderles a consignación, a la vez solicitó los datos adicionales administrativos comerciales.
Don Alipio Cardoza, como un buen negociante, se sentía muy feliz, por que por fin lograba que una fábrica grande aceptaba sus condiciones de ventas en consignación y con el apoyo de las impulsadoras, quienes agrandarían a sugerencia la oferta de nuevos productos para los clientes.
Olzagon, pidió al señor Cardoza, un par de días para arreglar y empacar la mercadería que se ofrecerá en el autoservicio y con toda esa información regresó a la Fábrica y pasó directo a la Supervisión de Ventas, allí estaba Don Antonio muy atareado revisando y chequeando costos de producción de los productos que se ofrecerán ser vendidos en el supermercado.
Olzagon alcanzó toda la información solicitada, para los tramites administrativos y en aquellos instantes apareció Ofelia radiante de belleza y sorprendió a los presentes..... continuaremos......
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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