viernes, 2 de junio de 2017

MEDIO AMBIENTE : Política Norteamericana .-Donald Trump anuncia que Estados Unidos abandonará el Acuerdo de París sobre cambio climático

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., como se temía el presidente de los Estado Unidos Presidente Donald John Trump, anunció el retiro de Los Estados Unidos del acuerdo de París: Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, un acuerdo que costó tanto trabajo y tuvo la aprobación del ex presidente : Barack Obama, semejante decisión es un grave retroceso contra el  calentamiento global, cambio climático  y el medio ambiente, si sabemos que Estados y Unidos y China son los países mas contaminantes, les invito a leer amplia información de la Agencia de Noticias BBC Mundo Noticias.........

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Donald Trump hace el anuncio en la Casa BlancaDerechos de autor de la imagen AFP
Image caption Trump afirmó que su país pedirá renegociar el tratado "en términos justos para Estados Unidos".

Después de meses de mantener el suspenso, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cumplió su promesa electoral.
Este jueves, el mandatario anunció que EE.UU. se retirará del Acuerdo de París sobre cambio climático aprobado por 195 países en diciembre de 2015.
 
"Para cumplir mi solemne deber de proteger a EE.UU. y sus ciudadanos, Estados Unidos se retirará del acuerdo climático de París", señaló Trump desde los jardines de la Casa Blanca.
De esta manera, Estados Unidos se suma a Nicaragua y Siria como los únicos países de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que no respaldan el tratado ambiental.
El Acuerdo de París es considerado por muchos como el logro ambiental más importante de la historia por su alcance global y sus objetivos a largo plazo.
La decisión del presidente estadounidense fue recibida como un jarro de agua fría por la comunidad internacional, con la mayoría de líderes mundiales mostrando su decepción con el mandatario.
Donald Trump hace el anuncio en la Casa Blanca frente a sus asesoresDerechos de autor de la imagen Getty Images
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                                    Trump hizo el anuncio después de mantener el tema en suspenso durante meses.

Trump afirmó que su país pedirá renegociar el tratado "en términos justos para Estados Unidos" como condición para retornar al mismo.
"Trabajaré para garantizar que Estados Unidos se mantenga como el líder mundial en temas ambientales, pero bajo un marco que sea justo", indicó Trump.
Después de China, EE.UU. es el mayor emisor de gases de efecto invernadero en el mundo.

Las razones

Trump dijo que abandonar el Acuerdo de París ayudará a las industrias de petróleo y carbón de su país y a la generación de empleos.
"No queremos que otros países se rían de nosotros. No lo harán. Fui elegido para representar a los ciudadanos de Pittsburg, no de París", afirmó el mandatario.
Trump añadió que "es hora de poner Youngstown, Ohio, Detroit, Michigan, Pittsburgh, Pennsylvania antes de París".

Calentamiento promedio proyectado


Para el mandatario, el acuerdo aprobado en la capital francesa es una "redistribución masiva de la riqueza estadounidense a otros países".
Además condenó lo que llamó "draconianas" cargas financieras y económicas impuestas por el pacto a su país.
"No queremos que nada se interponga en nuestro camino", concluyó el presidente de EE.UU.
En 2012, Donald Trump calificó al cambio climático como un "engaño chino" para perjudicar a las manufacturas estadounidenses.

"El acuerdo no puede ser renegociado"

Poco después del discurso de Trump, en un comunicado conjunto, Alemania, Francia e Italia señalaron que el Acuerdo de París no puede ser renegociado.
El Acuerdo de París es una "piedra angular de la cooperación entre países" asegura el comunicado suscrito por el presidente francés, Emmanuel Macron, la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni.
"Estamos completamente convencidos de que el Acuerdo de París no se puede volver a negociar, ya que es un instrumento vital para nuestro planeta, nuestras sociedades y nuestras economías", indica el texto.
Emmanuel MacronDerechos de autor de la imagen AFP
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                                    El presidente francés Emmanuel Macron fue el encargado de decirle a Trump que el Acuerdo de París no puede ser renegociado.

"Nada puede ser renegociado", le dijo Macron a Trump en una conversación telefónica, señaló una fuente del gobierno francés a la agencia Reuters.
Por su parte, la alemana Angela Merkel afirmó que su país se mantendrá comprometido en salvar a "nuestro planeta".
La otra opción planteada por el presidente estadounidense, además de renegociar el tratado, fue la elaboración de un nuevo acuerdo climático.

Más reacciones

El expresidente estadounidense Barack Obama afirmó que la decisión de su sucesor coloca a EE.UU. en "un puñado de países que rechazan el futuro".
"Aunque este Gobierno se une a un puñado de países que rechazan el futuro, confío en que nuestros estados, empresas y ciudades darán un paso al frente", indicó Obama en un comunicado minutos después de que Trump anunciara el abandono del Acuerdo de París.
Barack ObamaDerechos de autor de la imagen AFP
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                                    El exmandatario estadounidense lamentó la decisión de Trump.

El exmandatario añadió que "hace un año y medio, el mundo se unió en París en torno al primer acuerdo global para situarnos en el camino de las bajas emisiones de carbono y proteger al planetaque dejamos a nuestros hijos".
A pesar de la decisión de Trump, la ONU, la Unión Europea y países como China, India y Rusia reiteraron en las últimas horas que mantendrán su compromiso con el tratado.
Naciones Unidas calificó como una "gran decepción" la decisión de Estados Unidos.
"Es fundamental que EE.UU. siga siendo un líder en temas medioambientales", afirmó a nombre del secretario general de la ONU, António Guterres, su portavoz Stéphane Dujarric.
El vocero de la ONU indicó que el anuncio de Trump "supone una gran decepción para los esfuerzos mundiales conel fin de reducir las emisiones de gases que generan el efectoinvernadero y promover la seguridad global".
En Latinoamérica también se manifestaron sobre la decisión del mandatario estadounidense.
El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, publicó en su cuenta de Twitter que su país "exige el cumplimiento del Acuerdo de París como compromiso con el futuro de nuestra especie".
"Ratifico nuestra voluntad inquebrantable en la acción mundial contra cambio climático", señaló el costarricense.

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CONSECUENCIAS DE TAN LAMENTABLE DECISIÓN:
Estados Unidos: por qué las grandes compañías petroleras, como ExxonMobil y Shell, no apoyan la salida del Acuerdo de París contra el cambio climático anunciada por Donald Trump :
 
Estación de servicio de ExxonMobilDerechos de autor de la imagen AFP
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                                    ExxonMobil es una de las compañías que tomó partido por el Acuerdo de París.

¿Es posible que el negocio petrolero esté del lado del Acuerdo de París contra el cambio climático que Donald Trump acaba anunciar que su país abandonará?
Suena contradictorio. Mucho más después de que el presidente de Estados Unidos afirmara que uno de los motivos para retirar a su país del tratado era precisamente favorecer a la industria del petróleo y el carbón.
Sin embargo, es así.
Antes y después del anuncio de Trump de este jueves, grandes consorcios del rubro de los combustibles fósiles tomaron partido a favor del acuerdo global firmado por 195 países en la capital francesa en diciembre de 2015.
GasolinaDerechos de autor de la imagen Getty Images
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                                     ¿Por qué algunos de los gigantes de la industria tomaron esta postura en apariencia contradictoria?

Empresas vinculadas con el negocio energético como ExxonMobil, Chevron, Shell Oil Company, ConocoPhillips e incluso General Electric, expresaron su respaldo al Acuerdo de París en mayor o menor medida.
"El cambio climático es real. La industria debe ahora dirigir (las iniciativas para enfrentarlo) y no depender del gobierno", dijo Jeffrey Immelt, director ejecutivo de General Electric, una compañía que trabaja con energía nuclear, solar y fósil.
Darren Woods, máximo ejecutivo de la petrolera ExxonMobil, la mayor del mundo, escribió personalmente una carta a Trump a principios de mayo instándole a suscribir el acuerdo.
"EE.UU. está bien posicionado para competir con el acuerdo y contar con un sitio en la negociación para establecer las reglas de juego", se leía en la misiva.
Donald Trump en la Casa Blanca después de anunciar el retiro de Estados Unidos.Derechos de autor de la imagen Reuters
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                                     Trump hizo el anuncio desde los jardines de la Casa Blanca.

¿Por qué algunos de los gigantes de la industria tomaron esta postura en apariencia contradictoria?
Aquí algunas razones.

El negocio de las "energías limpias"

Los combustibles fósiles como el petróleo, el gas y el carbón han sido tradicionalmente la forma más barata de energía.
Juntos representan el 86% de la potencia utilizada en todo el mundo.
Sin embargo, el costo de aprovechar las fuentes de energía renovables como la energía solar, la hidroeléctrica y el viento disminuyó drásticamente en la última década.
De hecho, algunas investigaciones señalan que estas alternativas pueden resultar más baratas que la electricidad convencional distribuida en red y que pueden generar ahorros, por lo que las empresas ven este sector cada vez más atractivo.
Centro de tecnología de ConocoPhillipsDerechos de autor de la imagen Reuters
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                                    ConocoPhillips expresó que ser parte del Acuerdo de París permite a Estados Unidos mantener un papel importante en los esfuerzos para reducir las emisiones de carbono.

Además, este tipo de energías a menudo reciben grandes subsidios de los gobiernos.
Walmart, por ejemplo, afirma que ahorra US$1.000 millones al año al obtener una cuarta parte de la energía que consume de fuentes renovables.
ExxonMobil gastó más de US$3 millones en esfuerzos de cabildeo involucrando temas climáticos y ambientales, incluyendo "discusiones relacionadas con el Acuerdo de París" sólo en el primer trimestre de 2017.
Activistas ambientales en la Casa Blanca.Derechos de autor de la imagen AFP
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                                    Se trata de una de las decisiones más cuestionadas de Donald Trump desde que es presidente de Estados Unidos.

Al igual que ExxonMobil y otras grandes compañías estadounidenses, muchos de los mayores actores energéticos del mundo, como BP, Total y Royal Dutch Shell, también han invertido miles de millones de dólares en la investigación y el desarrollo de fuentes de energía limpias y sostenibles, alentadas en parte por el colapso de los precios del crudo desde 2014.
El paso que acaba de dar Trump resulta contraproducente para los recientes esfuerzos de todas estas compañías, fundamentalmente para las estadounidenses.

El cambio climático es real

ConocoPhillips, otra de las gigantes petroleras estadounidenses, expresó que ser parte del Acuerdo de París permite a Estados Unidos mantener un papel importante en los esfuerzos para reducir las emisiones de carbono.
"(Permanecer en el tratado) otorga a Estados Unidos la capacidad de participar en futuras discusiones sobre el clima para salvaguardar sus mejores intereses económicos y ambientales", señaló el portavoz de la compañía, Daren Beaudo, este jueves al portal Bloomberg.
Emmanuel Macron en televisión criticando la decisión de TrumpDerechos de autor de la imagen Reuters
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                                    Presidentes de varios países, entre ellos el francés Emmanuel Macron, cuestionaron la decisión de Trump.

Después del anuncio de Trump, Chevron también señaló que apoyaba el tratado global.
"La reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero es una cuestión mundial que requiere un compromiso y una acción mundiales", dijo la compañía.
Pero no sólo se trata de liderazgo en la toma de políticas, también hay que "cuidar el negocio".
Empresas como Kellogg y General Mills, que dependen del clima para producir sus cereales, tomaron partido por el Acuerdo de París como una forma de proteger sus cadenas de suministros.
Estas compañías saben que el rubro de la agricultura se verá cada vez más comprometido si el calentamiento global sigue en aumento.
Además, son conscientes de que sus nuevos y futuros clientes tienen mayor afinidad por temas sociales y ambientales.

Otros rubros

Elon Musk, el director ejecutivo de Tesla, una compañía dedicada a la producción de autos eléctricos, confirmó este jueves que abandona su puesto como asesor de la Casa Blanca después del anuncio de Trump.
El emprendedor publicó en Twitter un mensaje en el que anunciaba que se retiraba del grupo de consejeros señalando que "el cambio climático es real".
"Dejar (el Acuerdo de) París no es bueno ni para Estados Unidos ni para el mundo".
Auto eléctrico de TeslaDerechos de autor de la imagen Reuters
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                                    El director ejecutivo de Tesla abandonará su puesto como consejero de la Casa Blanca después de la decisión de Trump.

Grandes compañías, como Morgan Stanley, Unilever, Intel y empresas tecnológicas como Apple también anticiparon que se oponían a la retirada.
En un esfuerzo de último momento, un día antes del anuncio definitivo, 16 compañías estadounidenses firmaron una carta instando a Trump a mantenerse en el tratado global.
Entre los firmantes aparecen Adobe, Apple, Facebook, Gap Inc., Google, Hewlett Packard, Levi Strauss, Microsoft, Salesforce y otros.
Al respecto, Anant Sundaram, profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad de Dartmouth, en Nuevo Hampshire, señaló al medio International Business Times que este respaldo corporativo al Acuerdo de París es "más que positivo".
"La conclusión es que la mayoría de estas compañías han avanzado", indicó en experto al destacar que muchas empresas invierten grandes sumas de dinero en investigación y tecnología para reducir sus huellas de carbono.

Los que celebran

Desde luego que la decisión anunciada este jueves también fue celebrada.
Para buena parte del rubro estadounidense del carbón, la decisión del presidente estadounidense de retirarse del acuerdo global de París sobre el cambio climático fue una victoria.
Activistas ambientales en la Casa Blanca.Derechos de autor de la imagen AFP
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                                    Inmediatamente después del anuncio, activistas ambientales se reunieron frente a la Casa Blanca.

Murray Energy, una compañía de minería de carbón con sede en Ohio, aplaudió la medida, describiéndola como "una parte importante de la agenda ambiental más amplia" del gobierno de Trump.
"Al cumplir su promesa, el presidente está apoyando los valores irrenunciables de Estados Unidos, rescatando los empleos del carbón y promoviendo electricidad confiable y de bajo costo para los estadounidenses y el resto del mundo", dijo en un comunicado el presidente ejecutivo de la compañía, Robert Murray.
Por su parte, Paul Bailey, presidente de la Coalición Estadounidense por una Energía de Carbón Limpia, señaló que los estándares establecidos bajo el gobierno de Barack Obama eran demasiado estrictos.
"Apoyamos la decisión del presidente Trump de retirarse del Acuerdo de París. Cumplir con el objetivo del Presidente Obama habría llevado a más regulaciones, mayores precios de la energía y dependencia de fuentes de energía menos confiables", añadió Bailey.

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¿Efecto dominó?: qué consecuencias puede tener la decisión de Donald Trump de retirar a Estados Unidos del acuerdo climático de París :
        
Donald TrumpDerechos de autor de la imagen Reuters
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                                    El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este jueves que el país abandona el Acuerdo de París sobre cambio climático.

La decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de retirar a su país del acuerdo de París sobre cambio climático tendrá una serie de efectos importantes en el mundo e incluso puede crear un efecto dominó.
El anuncio que Trump realizó este jueves -que causó consternación en buena parte de la comunidad internacional y en los sectores progresistas de EE.UU.- significa de hecho que el acuerdo para controlar el aumento de la temperatura en el planeta se quedará pronto sin el segundo país que emite más gases de efecto invernadero.
"Estados Unidos se retirará del acuerdo de clima de París", dijo Trump desde la Casa Blanca, aplaudido por simpatizantes presentes y seguido con atención alrededor del mundo.
 
Argumentó que la medida busca proteger los intereses de EE.UU., principalmente su economía, calificando al pacto global de 2015 como "muy injusto" con Estados Unidos.
El proceso de retirada del acuerdo por parte de la mayor economía mundial podría durar cerca de cuatro años y Trump señaló que está dispuesto a negociar un pacto diferente.
Una mujer sostiene un cartel con el planeta tierra diciendo SOS.Derechos de autor de la imagen AFP
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                                    Numerosas protestas se desarrollaron en Estados Unidos este jueves tras el anuncio de Donald Trump.

Pero la posibilidad de renegociar un acuerdo que tardó años en cerrarse fue descartada de inmediato por países como Francia, Alemania e Italia, que emitieron un comunicado conjunto tras el anuncio de Trump, así como por expertos.
"No creo que vayamos a lograr concesiones de otros", dijo a BBC Mundo Donald Wuebbles, profesor de ciencias atmosféricas en la Universidad de Illinois y uno de los autores líderes de los informes del Panel Intergubernamental en Cambio Climático de la ONU.
En la práctica, la decisión Trump no solo podría impactar globalmente en el medioambiente sino también en la economía y las relaciones internacionales, según especialistas.

¿Efecto dominó?

El objetivo del acuerdo de París, que fue firmado por más de 190 países y entró en vigor el año pasado cuando EE.UU. era presidido por Barack Obama, es mantener el aumento de la temperatura global debajo de los 2 grados respecto a los niveles pre-industriales.
Así se evitaría pasar un umbral que, según científicos, puede tener consecuencias irreversibles para las capas de hielo, los mares y otras partes de la Tierra.
EE.UU. es considerado el mayor generador histórico de dióxido carbono (responsable de cerca de 15% de las emisiones globales), pero hace una década China lo pasó como el país que es fuente principal de gases de efecto invernadero.
John Sterman, un profesor de la escuela Sloan de negocios del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y experto en políticas sobre calentamiento global, sostuvo que ahora podría haber "una cascada de erosión de las metas (del acuerdo), que podrían socavarlo y desintegrarlo".
"Y esto francamente plantea el riesgo de una catástrofe global, lo digo con toda la deliberación necesaria", indicó Sterman, que asistió al acuerdo de París, a BBC Mundo.
Sin embargo, otros, como Brian Dees, de la Escuela de Gobierno de Harvard y antiguo alto consejero de Barack Obama, indicó que el retiro de Estados Unidos no podrá reversar el ímpetu global que ha adquirido la lucha contra el cambio climático, así como los grandes adelantos logrados en los últimos años en la creación de energía limpia barata.
En un artículo en el sitio web de la revista Foreign Affairs, Dees reconoce que "aunque la administración Trump no puede detener el progreso global en cambio climático, sí puede hacer daño a la economía y a la importancia y liderazgo diplomático de Estados Unidos".
La alcaldía de París iluminada de verde.Derechos de autor de la imagen AFP
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                                    La alcaldía de la capital francesa se iluminó de verde luego de la decisión de Estados Unidos de salir del Acuerdo de París.

John Stearman, por su parte, teme que tras la retirada de EE.UU. puede aumentar la presión de populistas y nacionalistas en otros países para hacer lo mismo, librándose de los compromisos de emisiones asumidos.
"Algunas de las naciones en desarrollo pueden decir: 'Esto es otro esfuerzo hegemónico neocolonial de EE.UU. para enlentecer nuestro desarrollo económico y no lo permitiremos, así que no cumpliremos nuestros compromisos de París'", señaló.
Además, probablemente menguarán los recursos financieros y técnicos para que las naciones en desarrollo superen el sistema de energía fósil, ya que EE.UU. evitará también contribuir al fondo global prometido por los países desarrollados para estimular ese cambio.
Trump dijo que EE.UU. debería aportar decenas de miles de millones de dólares a ese fondo, que surgió de una conferencia de la ONU celebrada en 2010 en México, pero "nadie ni siquiera sabe a dónde está yendo el dinero".
Los expertos creen que la decisión de Trump genera además incertidumbre en el mundo de los negocios y las inversiones en energía renovable limpia, que fueron un elemento clave detrás del acuerdo de París.
"Esa incertidumbre es probable que debilite y haga más lento el despliegue de tecnologías", anticipó Sterman. "Vamos a ver menos turbinas eólicas instaladas, no solo en EE.UU. sino en todos lados, menos paneles solares, menos inversiones en la electrificación de la flota vehicular y otras tecnologías que necesitamos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero"

"De Pittsburgh, no de París"

Mensaje de televisión de Emmanuel MacronDerechos de autor de la imagen Reuters
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                                    "Esta noche, Estados Unidos le dio la espalda al mundo. Pero Francia no le dará la espalda a los estadounidenses", dijo el presidente francés, Emmanuel Macron, en un mensaje por televisión.

El anuncio de Trump puede verse como un ejemplo práctico de la idea de poner en sus decisiones a "América primero", una expresión suya que reiteró en su discurso de este jueves.
Al retirar a EE.UU. del acuerdo de París, Trump cumple una promesa que formuló en su campaña electoral el año pasado, al igual que lo hizo antes con la salida del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP por sus siglas en inglés).
Trump, que enfrenta una crisis interna por investigaciones sobre una posible conspiración entre su campaña y Rusia durante las elecciones, dijo que su decisión busca defender la creación de empleo en EE.UU. y evitar lo que él considera ventajas concedidas a países como China o India.
"El acuerdo es una redistribución masiva de la riqueza de Estados Unidos a otros países", afirmó. "Fui electo para representar a los ciudadanos de Pittsburgh, no de París".
Trump cuenta con el apoyo de su electorado en zonas de EE.UU. cuyas economías dependen del negocio del carbón, así como de una veintena de senadores republicanos que días atrás lo instaron a dar este paso en una carta pública y ahora lo aplauden.
Pero otros creen que el rol protagónico de EE.UU. en la cooperación internacional, incluso en temas financieros o de terrorismo, pueden verse perjudicados por la decisión de Trump de abandonar hasta a países aliados en política ambiental.
El rechazo al acuerdo "será una abdicación de la responsabilidad (y el) liderazgo de Estados Unidos", afirmó Nicholas Burns, un exdiplomático estadounidense que fue subsecretario de Estado durante la presidencia de George W. Bush, en su cuenta de Twitter antes del anuncio de Trump.
Expertos en relaciones exteriores advierten que China ya se apresta a ocupar parte del vacío que deja EE.UU., intentando garantizar con Europa el mantenimiento del acuerdo de París.
Calentamiento globalDerechos de autor de la imagen Getty Images
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                                    Para analistas, "la retirada de EE.UU. puede aumentar la presión de populistas y nacionalistas en otros países para hacer lo mismo".

Para Pekín además podrían reducirse las exigencias de medir adecuadamente sus propias emisiones de gases de efecto invernadero (que generan dudas de otros países) y aumentar las oportunidades de negocios en energía renovable.
Mientras tanto, algunas multinacionales estadounidenses en sectores como el energético temen represalias de otros países, en la forma de aranceles o de otro tipo de medidas.
Si bien estados, ciudades y empresas de EE.UU. anunciaron medidas para reducir sus propias emisiones, expertos como Sterman consideran "muy difícil" que con esas acciones el país pueda alcanzar las metas que estaban previstas.
"Personalmente creo que es muy triste para nuestro país estar uniéndonos a Siria y Nicaragua como los únicos países que no son parte (del acuerdo de París)", dijo Wuebbles.
"Luce bastante mal para lo que se supone que es un líder mundial", concluyó.

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Cambio climáticoDerechos de autor de la imagen EPA
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                                    195 países firmaron el Acuerdo de París en 2015. Dos decidieron no adherirse: Siria y Nicaragua.

Con la decisión de Donald Trump de abandonar el Acuerdo de París sobre cambio climático, Estados Unidos se une a un club en el que solo están Siria y Nicaragua.
Y es que esos dos países fueron los únicos que no suscribieron el pacto firmado en París en 2015: Siria sumida en una guerra civil y Nicaragua por unas razones que no tienen nada que ver con las que han llevado a Donald Trump a salirse del pacto.
 
Nicaragua rechazó el acuerdo internacional no porque no quisiera acatar los nuevos estándares para reducir emisiones contaminantes sino porque los que establece el acuerdo no eran suficientemente estrictos con las naciones más ricas y las economías más grandes del planeta.
En otras palabras, Nicaragua pensó entonces que el acuerdo era "demasiado débil".
Paul Oquist (izq)Derechos de autor de la imagen Getty Images
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                                     Paul Oquist, jefe de la delegación nicaragüense en las conversaciones para el Acuerdo de París declaró que éste era "demasiado débil" y que los compromisos voluntarios "no funcionan".

En diciembre de 2015, cuando se firmó el documento, Paul Oquist, jefe de la delegación nicaragüense le dijo a la agencia Reuters que las naciones ricas deberían hacer mucho más para defender al planeta.
Durante todas las conversaciones que se llevaron a cabo sobre el acuerdo, Nicaragua insistió en que los países desarrollados no estaban haciendo suficiente para reducir su uso de combustibles fósiles.
Y tampoco, declaró Oquist, "están ofreciendo suficientes fondos para ayudar al mundo en desarrollo a adaptarse al impacto del cambio climático".
En una entrevista con el programa Democracy Now, Oquist dijo que "estos compromisos voluntarios no funcionan", refiriéndose al Acuerdo de París.
"En estos compromisos voluntarios se habla de la responsabilidad universal, de que todos somos responsables. Eso es una opinión histórica sesgada porque no todos creamos este problema (del calentamiento global)", declaró Paul Oquist.
"Nicaragua tiene 4,8 millones de toneladas de emisiones al año, eso es 0,03% de las emisiones (globales). ¿Somos nosotros responsables de haber creado el cambio climático? No, para nada".
Energía eólicaDerechos de autor de la imagen Reuters
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                                    Nicaragua asegura que los países ricos deben hacer más para ayudar al mundo en desarrollo a adaptarse al impacto del cambio climático.

Oquist apuntó entonces que los países más desarrollados, las 10 economías más grandes del planeta, eran responsables de 72% de las emisiones de CO2.
"Cien países, los cien países más pobres, tienen 3% de las emisiones de CO2".
Y agregó: "Nosotros pensamos que debemos salirnos de esta opinión sesgada y enfocarnos donde el problema puede ser resuelto, los 10 países con 72% de las emisiones".
Como estos países son los que tienen 76% de los ingresos brutos del mundo, argumentó Oquist, "son ellos los que deben reducir sus emisiones de CO2".
El argumento no es nuevo. Durante años los países en desarrollo han argumentado que como los países más ricos son los más contaminantes, son ellos los que deben comprometerse de forma más estricta con la reducción de sus emisiones.
El consenso que se logró en el acuerdo de París, sin embargo, es que todos los países tienen la misma responsabilidad y como tal, todos deben comprometerse a reducir sus emisiones, aunque cada uno establecerá sus límites de forma voluntaria.
Planta en ManaguaDerechos de autor de la imagen Getty Images
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                                    En 2015 las energías renovables generaron 52% de la electricidad de Nicaragua.

Durante su protesta, Paul Oquist también dejó en claro que Nicaragua es uno de los contados países que ya están haciendo algo para proteger al planeta.
Según el funcionario, en 2015 las energías renovables generaron 52% de la electricidad del país.
Nicaragua aún está lejos de igualar a su vecina, Costa Rica, que genera 98,1% de su electricidad con fuentes de energías renovables.
Pero está muy por delante de Estados Unidos, que en 2015 generaba 13% de su electricidad con fuentes renovables.
"Nicaragua es lo que muchos expertos llaman un paraíso de las energías renovables", señala el Banco Mundial en un informe publicado en 2013.
"Con sus extensos recursos geotérmicos -que resultan de su enorme cadena volcánica y actividad sísmica- con excelente exposición al viento y al sol y a una variedad de fuentes de agua".
Y, según los expertos, está en camino a convertirse en una "potencia energética verde".
"Hace solo unos años, Nicaragua era casi totalmente dependiente de combustible fósil importado para generar electricidad", afirma un artículo de NPR (Radio Pública Nacional de Estados Unidos).
"El país no tenía centrales termoeléctricas para convertir ese combustible en electricidad".
NicaraguaDerechos de autor de la imagen Getty Images
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                                    Nicaragua, con sus extensos recursos geotérmicos, es lo que muchos expertos llaman "un paraíso de las energías renovables".

Agrega que después de que se establecieron una serie de políticas que permitieron el desarrollo de proyectos de energía renovable, hoy estas energías generan la mitad de la electricidad del país.
La pregunta que muchos se plantean es ¿tomó Nicaragua la decisión correcta al no comprometerse con el Acuerdo de París, en protesta porque éste es 'demasiado débil'?
No, según el profesor Martin Siegert, codirector del Instituto Grantham de Cambio Climático y Medio Ambiente del King's College de Londres.
"No entiendo esa decisión", le dice el experto a BBC Mundo. "Creo que se trató de una decisión que tuvo más que ver con la política interna de Nicaragua".
"El Acuerdo de París es un diálogo internacional en el que se está buscando un consenso para mejorar la situación global, y si realmente se quieren cambiar las cosas, es necesario luchar desde dentro, no alejarse de éste".
"Para mí, no tuvo mucho sentido lo que hizo Nicaragua de no firmar este acuerdo como protesta", agrega.
"Esto es un asunto muy serio en el que se ha puesto un enorme esfuerzo para tratar de entender lo que está ocurriendo con el cambio climático".
"Ignorarlo o aislarse del resto del mundo, es motivo de consternación", asegura el experto del King's College.

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Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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