La Casa de la Loma tiene un Fantasma : Capítulo DLVII.- Amalia "Ojos verdes" y su acompañante el bandolero Rogelio Campos; caminaron un largo trecho y se apuran en llegar a una casa donde les preparen algo de comida...

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior; Amalia "Ojos verdes" iba en compañía del bandolero y  amante Rogelio Campos, en pos de recuperar una yunta de bueyes que le fueron robados del campo comunal de pastoreo, ellos ya en el camino real en dirección a las lejanas lomas donde habitan los ladrones roba vacas; Amalia apelando a sus habilidades de rastrear, detectó el rastro de uno de los bueyes; el tiempo apremiaba por que los ladrones les llevaban por lo menos 24 horas de ventaja, ella suponía que su yunta ya estaba en poder del alguno de los jefes viejos de los ladrones; en el trayecto se estableció un amplio dialogo entre Amalia y su acompañante Rogelio, a pesar de todo, tenían que caminar a paso largo para acortar la distancia y el tiempo que transcurría en su contra....

Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria. Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI.

Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.

Amalia "Ojos verdes", que rápidamente se convirtió en amante del bandolero Rogelio Campos, pero ella desconocía que él, era un ladrón más, por que no tuvo tiempo de conocerlo, apenas se hicieron conocidos en la Ciudad; y ella fue seducida por lo romántico como actuaba el bandolero y además, era una excelente peleador algo que cautiva a las mujeres, y se presentó como un exitoso ganadero, claro ella algo sospechaba, pero no había pruebas, que tal vez si se descubrirían en el encuentro con los jefes de los ladrones, que por allí haya un amigo de Rogelio, no lo sabemos... pero la posibilidad no se descarta.

Amalia "Ojos verdes" en amplio dialogo, le hizo saber a su acompañante que la crianza de ganado vacuno es fundamental en la economía de los campesinos, y la pérdida de un animal o más perjudica en demasía a la familia afectada; ella misma estaba perdiendo su yunta de bueyes que constituían su herramienta de trabajo para el barbecho de las chacras de los sembradíos; que sin ellos perjudicaría la siembra de los campos agrícolas.

Amalia "Ojos verdes", cada cierto trecho de la larga caminata que la hacía con su acompañante, bajaba la cabeza donde estaba acumulada la tierra suelta para identificar el rastro de sus bueyes y allí estaban bien estampados, ya no había ninguna duda que fueron robados; pero aún no se sabía que si los toros estaban en poder de un viejo ladrón o ya fueron vendidos a comerciantes inescrupulosos que pululan la zona.

Entonces, después de haber caminado un buen trecho, ellos llegaron a una pequeña hoyada con corriente de agua permanente, buscaron una pequeña poza que siempre se forma al discurrir el agua, y al encontrarla se lavaron las manos y uniéndolas las dos sacaban agua como si fuese un pocillo para beberla, ambos bebieron la cantidad suficiente como para saciar la sed, luego se sentaron por un corto tiempo y continuaron la caminata, no faltaba el dialogo y pasó por la mente de Amalia, conocer un poco más sobre la vida de su acompañante y le preguntó:

--- Don Rogelio, yo me siento feliz con su compañía, pero quisiera hacerle una pregunta:¿Cómo hace usted para tener dinero y divertirse en una fiesta? Le estoy haciendo la pregunta, por que no sé nada de usted, me sedujo por su comportamiento de caballero, pero nada más sé de su persona...

Rogelio, se sintió profundamente aludido que había dudas sobre su persona; a pesar que él, se presentaba como un próspero ganadero, pero no había pruebas; además, él llegaba a las fiestas patronales a divertirse enamorando mujeres y consumía licor a raudales; que a veces le originaba envidia  de otros, generando broncas, donde él siempre era el ganador, tal como lo demostró ante los ojos de Amalia.

Rogelio, hizo un ligero movimiento de los hombros y le contestó:

--- Doña Amalia, tal como usted me informó que cuando necesitan satisfacer un apuro económico ustedes venden una o dos vacas; pues, yo también hago lo mismo vendiendo parte de mi ganado y viajo por pueblos divirtiéndome en compañías de mujeres.....

Amalia, no le gustó mucho la respuesta y ahora ella era la aludida, casi interrumpiéndole le replicó:

--- Don Rogelio, quiero entenderle que para usted la vida es divertirse con mujeres, yo siendo una de ellas, me está diciendo que soy parte de esa diversión, no me parece seria su explicación; pero acepto su compañía, más por necesidad, por que no está nadie de mi familia....

Rogelio, interpretó que Amalia se había ofendido al haber dicho que asiste a fiestas a divertirse con las mujeres, por lo que trató de suavizar sus expresiones y lo primero que hizo fue pedir perdón, así:

--- Doña Amalia, le pido perdón, no fue mi intención ofenderla; en su caso es totalmente diferente, yo pretendo establecer una relación permanente con usted, creo que será la compañera de toda  mi vida, y me propongo regresar a mis chacras en su compañía; es más ya no iré a buscar fiestas, por que ya encontré a la mujer que quiero hasta la muerte.

Amalia, algo conmovida por las explicaciones que le hacía el bandolero Rogelio, se dio por satisfecha y cambió de tema de conversación y le preguntó:

--- Don Rogelio, dígame: ¿Cómo llegó a la Ciudad por la Festividad en honor a San Hilarión? Si usted ha informado que vive a tres días de camino en buena acémila para llegar a su casa.

Rogelio, muy pausado y atento a lo que iba a explicar debido que si pronunciaba cierta palabra, podía ofender a su acompañante, le contestó:

--- Doña Amalia, para las personas que caminan de parranda en parranda, siempre encuentra a alguien que tercia en la conversación y sale a flote la próxima fiesta en tierras desconocidas, dialogando sobretodo sobre las costumbres de sus gentes, los faltosos (ebrios y pleitistos), los bailes y con el debido respeto la presencia de mujeres, tal como la conocí a usted...

Pero, Amalia insistía en su curiosidad y le preguntó de nuevo:

--- Don Rogelio, pero en nuestra ciudad, usted si tiene amigos, por que después que me saludó en esa mañana, usted si dirigió fuera de la ciudad, allí va uno cuando tiene conocidos, ¿O me equivoco?.  ¿Tiene familia?

Rogelio, le pareció interesante la pregunta y le contestó:

--- Si, doña Amalia, fuera de la Ciudad viven unos amigos y justamente esa mañana fui  a saludarlos, ya que nos vimos después de 10 años; así es la vida, uno conoce a alguien, pero si no es de la Ciudad, ellos se mudan y desaparecen para nunca verlos de nuevo, sin saber de su existencia, pero mi interés mayor era conocer a usted y vaya que lo logré con creces jajajajajaja..

Los viajeros siguieron caminando y justo llegaron a una loma alta, que continuaba el camino bajando un trecho algo empinado y se continuaba en la larga pampa, y al final se veía una casa con techo de tejas a dos aguas; ellos pararon un momento para observar el paisaje y apreciaron el aún lejano lugar a donde iban; pero como ya habían pasado toda la mañana caminando y la barriga ya había hecho la digestión del sango que ellos comieron.

Amalia, mirando a su compañero, le dijo:
--- Don Rogelio, nosotros rodamos por esta bajada para avanzar sobre la pampa y llegar a la casa de techo de  tejas, que le está saliendo humo por el techo, tal vez nos preparen algo de comer..
Rogelio, sonrió con la iniciativa de Amalia y  sin pronunciar palabra alguna accedió a la sugerencia, y emprendieron la bajada, cuyo trecho estaba lleno de piedras pequeñas que eran resbaladizas; por lo que Amalia cogiéndose de los arbustos y casi sin control bajó cuesta abajo y Rogelio la seguía, hasta que llegaron al terraplén y luego avanzaron por la gran pampa hacia la casa que estaba ubicada al final..................
Continuaremos.................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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