Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior; un grupo de cuatro delincuentes costeños, encabezados por Pedro "Mano de Piedra", llegaron a la Gran Ciudad, para asaltar a la Familia Sánchez Calderón y Mulatillo de Socchabamba, pero como esta casa está protegida por un Pacto con Satanás; los huestes satánicos quienes son la infantería diabólica, ellos detectaron a los delincuentes en una cantina en el Barrio de la Pampa; para detenerlos ellos se transformaron en bebedores humanos y sedujeron a los delincuentes que tenían una mejor opción, sin asaltar a nadie, sino pelear contra espíritus del Más Allá, quienes custodian la casa abandonada cerca a Pingola; incluso les dieron una moneda de libra esterlina de oro, que presuntamente esa casa está llena de entierros con cuantiosos tesoros, aunque al principio a Pedro "Mano de Piedra" no le cayeron bien los presuntos bebedores, él al cerciorarse que la moneda era legítima, se entusiasmó para ir a esa casa, ellos se disponían a salir, hubo un apagón en la cantina, al recuperarse la luz, los tres bebedores desaparecieron, dejando un aviso, que en el patio estaban las mulas que los transportarán; al salir, ellos llenos de codicia, observaron a las mulas ensilladas con aperos de lujo..... ...sigamos la historia....
Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria.
Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI.
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
La codicia por los tesoros sepultados adrede en lugares inaccesibles o en el rincón de una vivienda, en un palacio o en un templo; que es perseguido por los cazadores, sean estos arqueólogos, o delincuentes comunes o antiguamente los bandoleros; que les demandaba mucho esfuerzo y tiempo preparando un plan; pero, lo que nunca aceptaban los cazadores que los dueños que dejaron esos tesoros los entregaron en custodia a los espíritus del Más Allá, que como sabemos son los ejércitos del Diablo, que comúnmente los conocemos como los Huestes Satánicos, quienes defienden a los entierros de los tesoros; la codicia humana no tiene límites y se enfrentan al poder diabólico, que se paga caro por el atrevimiento, que generalmente terminan en carnicerías de muertes, y naturalmente sus espíritus son llevados al infierno por el Rey de las Tinieblas - Don Satanás.
Continuando con la historia; los huestes satánicos disfrazados de bebedores, sedujeron a los costeños con un brillante trabajo, ya que las mulas que observaron los jinetes, eran en realidad huestes satánicos, que tomaron la forma de acémilas; que al salir los costeños, otearon a las mulas bien aperadas, ellos quedaron impresionados, ya que ellos si conocían de bestias de carga o de montar.
De todas las acémilas, había una mula más alta, que tal como informaron los bebedores, esa bestia será para Pedro "Mano de Piedra"; el delincuente sintiéndose distinguido por ser el líder del grupo, muy feliz se dispuso a montarla, quien se acercó le cogió los frenos (bridas) y la montó; el animal al sentir el peso dio un suave relincho.
Los otros tres delincuentes, también montaron sus acémilas, que efectivamente los "animales" al sentir que el jinete había trepado(montado) partieron casi disciplinadamente, que los jinetes llevaban como adorno el freno en sus manos, que si siquiera hicieron el trabajo de talonear la panza de las acémilas, por que avanzaban ligeramente en el sendero que eligieron, sin que los jinetes hayan intervenido.
Pero, lo que no sabían los flamantes jinetes, que las "mulas" no tomaron la ruta de trotar hacia Pingola, sino a los Quintos Infiernos; ya que los jinetes no conocían los terrenos, los animales trotaron en una llanura increíblemente larga, todo era fácil para llegar al infierno.
Los jinetes, cómodamente sentados sobre sus lomillos (sillas), se sentía felices trotando como los mejores jinetes, conversaban entre ellos que han tenido mucha suerte al encontrarse con amigos recién conocidos que les iban ayudar a convertirse en adinerados y ricos con el hallazgo de los tesoros de la casa cercana a Pingola, ese fue el plan preparados por los huestes satánicos.
Las acémilas trotaban rápidamente en una llanura que nunca cansaba a los jinetes, incluso el horizonte ofrecía la suficiente claridad para permitir ver a los jinetes que iban trotando por buena ruta.
Los jinetes, habían perdido la noción del tiempo, ya habían cabalgado por espacio de 5 horas y estamos llegando a las 03:00 horas de la madrugada, es un tiempo mortífero y diabólico, siempre evitado por los jinetes que trotaron por las noches, ellos se cuidaban de llegar al sitio de su destino antes de las 03:00 horas, o partían después de las 03:00 horas; o si lo hacían antes se tomaban un tiempo largo que les permita avanzar en la ruta del destino.
A esas horas, las lechuzas que volaban en parvadas ululaban para salir de terrenos funestos que los evitaban, que desde abajo salían vapores malignos y contaminados que afectan el vuelo de las aves nocturnas por la repentina aparición de espesas nubes negras llenas de espíritus malévolos.
Los jinetes, tal vez embelesados en sus pensamientos que iban a ser dueños de cuantiosos tesoros, no se dieron cuenta o el trabajo por lo menos de manejar los frenos (bridas) de las mulas conduciéndolos a otro lugar; ellos montados como meros jinetes no eran conscientes que no iban al lugar de su destino, sino que habían sido conducidos por las acémilas a la casa de Betsebú(Satanás).
Hasta que llegó las 03:00 horas de la madrugada, repentinamente el firmamento se oscureció, las mulas sobre pararon todas al mismo tiempo, se escuchó un ruido espantoso con el sonido de un trueno, el medio ambiente se cubrió con nubes negras que ocultaron el firmamento; aquel ruido asustó a las mulas que sorpresivamente corcovearon tirando hacia adelante a los jinetes, que cayeron pesadamente al suelo, las mulas por arte de magia se fueron corcoveando y desaparecieron en la oscuridad de la noche.
Pedro "Mano de Piedra", reaccionó levantándose se sacudió su ropa del polvo, los otros jinetes magullados y heridos, sólo gemían de dolor de sus cuerpos.
Entonces, desde una de las nubes negras, misteriosamente se abrió un camino que como una gigantesca escalera fue tendida hasta el lugar donde cayeron los jinetes, y fue Pedro "Mano de Piedra", que con el golpe que sufrió en la cabeza, él había perdido la noción del raciocinio y creyendo que la escalera les serviría para salir del aquel lugar, se dispuso a escalar y lo hizo grada por grada, se reincorporó Juan "Ojo chuto" quien siguió a su jefe, del mismo modo se levantó Julián "Pata larga", quien haciendo honor a sus piernas largas siguió a su amigo escalando la escalera a paso largo y finalmente Froilán "Bolsillo roto", que siendo el último se coló a la escalera como el postrero jinete.
Pero, los jinetes, perturbados por los golpes que recibieron sus cabezas al caer tumbados al suelo, ellos creyeron ver la continuación de la ladera que les permitía salir de un profundo hoyo, nunca se cercioraron que escalaban una escalera, que efectivamente el Príncipe de los Huestes Satánicos Damíán; les tendió para atraerlos y transportarlos al infierno, ya que ellos al llegar al último peldaño que se veía desde abajo, siguieron caminando, nunca se detuvieron, tampoco hubo dialogo entre ellos, caminaban como unos zombis, que se quedaron tragados en aquel ambiente que misteriosamente desapareció y el firmamento recobró su estado natural.; fue una abducción diabólica.
Como ninguno de los terrenales hemos tenido acceso directo a los quintos infiernos y si alguien regresó pero nunca llegó para contarlo; se supone que los cuatros jinetes o delincuentes costeños fueron tragados (abductados) por el mismo poder satánico y llevados al fuego eterno.
Después de varios días, llegaron familiares de los delincuentes costeños averiguando por su presencia que misteriosamente habían desaparecido y no dejaron rastro, y como alguien dijo: "Ellos desaparecieron como si la tierra se los hubiese tragado"; nadie supo dar razón, que les pasó, ya que el último lugar donde ellos estuvieron fue la cantina, y que el dueño declaró que ellos abandonaron el lugar y nunca más regresaron.
Una vez más el trabajo de los huestes satánicos al servicio del señor Sánchez, saborearon el triunfo, sin hacer mucho esfuerzo, fue fácil desprenderse de cuatro delincuentes, que si pudieron visitar Socchabamba, pero que fueron engatusados en una cantina que había un sitio mejor lleno de tesoros al alcances de la desmedida codicia.
Recién ahora se puede encontrar alguna explicación de las misteriosas desapariciones de seres humanos, que nunca más se sabe de ellos, que seguramente fueron abductados por los espíritus del Más Allá.; y ¿por qué no?, por seres extraterrestres.
Sin embargo, la codicia humana no tiene límites, que siempre hay seres humanos quienes transformados en cazadores de tesoros, son capaces de superar todos los escollos hasta lograr el objetivo de apropiarse con buena intención del tesoro si lo encontró o usando la fuerza bruta., si alguien se les opone.
Justamente, llegó un jinete a la Pampa de la Ciudad, él era desconocido para todos, su caballo era un alazán muy bien cuidado y aperado; el jinete buscó alojamiento, pero todos los hoteles estaban llenos, hasta que encontró la casa de viejo herrero, que ofrecía dos cuartos para alojar a forasteros, que le servía como una entrada económica adicional.
El desconocido jinete, caminando halando a su caballo, llegó a la casa del herrero, por que era el único lugar disponible para pernoctar aquella noche, ya que al día siguiente tenía planes para ir a Socchabamba a visitar a la Familia Sánchez Calderón y Mulatillo.
Entonces, el desconocido, amarró a su caballo en el pilar del corredor de la casa del herrero, cruzó el corredor y fue al taller, donde trabajaba el martillador de los fierros, quien al ver al recién llegado, le dijo:
--- Señor, por hoy todo culminó no habrá herrajes hasta el día de mañana, estoy muy cansado.
El recién llegado sonriendo, el respondió:
--- Buenas tardes buen hombre, no vengo por herrajes, por que mi caballo recién los tiene repuestos, mi presencia es para pedirle una posada hasta el día de mañana, ya que alguien me informó que usted alquila habitaciones para viajeros.
El herrero, sacó el pañuelo de su bolsillo trasero del pantalón y se secó el sudor de su frente y ligeramente tosiendo, le contestó:
--- Bienvenido forastero, será un honor servirlo, voy a cerrar la puerta del taller para ubicarlo.
El herrero, se sacó el delantal de cuero que le protegía su ropa del trabajo y se dispuso a salir junto con el recién llegado.........................
Continuaremos.......................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
Muchas gracias por compartir, recuerdo que mi abuelo paterno, cuando venía de visita a casa, (él vivía en Chalaco); por las noches me contaba historias de fantasmas de su pueblo, él decía que eran reales, que sí habían sucedido. Yo aún era una adolescente.
ResponderEliminarSaludos amigo