Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con el relato de los : Orígenes del Señor de Sipán; después del sepelio del señor Chonkik, quien heredó a su hijo Siekik el liderazgo del Señorío en nacimiento; hubo ciertos desencuentros dentro de los vasallos, quienes, al integrarse como guerreros fueron de diferentes tribus, desconociendo la autoridad de Siekik, él reaccionó matando a los rebeldes y como líder empieza a trabajar por el bienestar de sus vasallos, lo primero que hace; es buscar el lugar apropiado para la construcción del templo a los dioses, que ya ubicado se tomó las medidas para la construcción de los cimientos; como en el valle de Lambayeque no existen rocas calizas, se hará con bloques de arcilla pisada (adobes), ya los constructores están tomando las medidas del diámetro y extensión del templo.... sigamos el relato......
Aquí en la imagen observamos una recreación de lo que fue: El Señor Chonkik, detrás de él, está su hijo Siekik, y al fondo su esposa Mokumac; y naturalmente un perro sin pelo, que se convirtió en compañero de los antiguos habitantes de la costa norte; ellos son los personajes que darán el nacimiento al relato en ficción de la Historia:
Orígenes del Señor de Sipán; que se sustenta con la presencia de Chonkik I.
Derechos de Autor : Resolución Nro. 1328- 2020/DDA-INDECOPI y del Certificado de Partida Registral N° 1134-2020/DDA- INDECOPI, de fecha 16 de diciembre de 2020.
Imagen: Archivos del Blog: A Vuelo de un Quinde.
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En aquellos tiempos de los nacimientos de la Cultura Mochica o Moche en el valle de Lambayeque, se fue formando como una civilización con las tribus que en migración llegaron desde el Sur, del Centro de la sierra y del Norte, no se descarta que se haya utilizado las vías marítimas, ya que ellos dominaron al mar navegando con los caballitos de totora.
Unir una diversidad de tribus errantes y sedentarias con dialectos propios de cada comarca, debe haber sido una tarea titánica como lo fue la Civilización Mochica, que en el transcurso del tiempo, ellos supieron hacer frente a la furia de los elementos como la Corriente del Niño, que les inundaban vastas extensiones de sus plantaciones y asentamientos, que ellos lo conocían como el "enojo de los dioses", o lo contrario con prolongadas sequías, que lo consideraban como "la ira del dios de los rayos de oro" (el Sol), quien con implacable calor producía estragos en las cementeras secando las plantas por la falta del agua, y la mortandad de la ganadería silvestre como venados y llamas que les servían de alimento.
Al constituirse como una unidad, bajo el liderazgo de un ilustre personaje, aparecía la identidad de nación o del lugar del nacimiento; por tanto usando sus costumbres de como enfrentarse en la lucha diaria para subsistir nace la civilización de estar unidos e integrados y se triunfa en la vida.
Estamos en los inicios del año 1 de nuestra era, y estar en el 125 d.C., y observar como un visitante imparcial desde una cúspide, el desarrollo de los acontecimientos, debe haber sido fascinante y desde aquel ángulo otear en los cuatro puntos cardinales, las movilizaciones de las tribus errantes que buscaban un lugar donde iniciar la construcción de su asentamiento como base unitaria que les permita enfrentar a los retos de la naturaleza, vaya que no fue fácil por que la lucha era por la tenencia de la tierra fértil con agua, lo que originó luchas y enfrentamientos constantes.
Continuando con el relato; el joven líder Siekik, junto con los vasallos constructores, estuvieron tomando las medidas donde se construirá el Gran Templo.
Siekik, pensaba que había nacido para Ser un Señor más grande, de lo que fue su padre el señor Chonkik, como estaba en los comienzos, pues había que construir todo, incluso aún no se tenía idea de como se iniciaría la excavación de los cimientos donde se construirá el Gran Templo.
Como Siekik, nunca trabajó como un constructor manual; sin embargo, tenía el arte de pensar y imaginar de como sería el Gran Templo, que según sus pensamientos sería una construcción plana que se iría levantando como plataformas hasta lograr una altura que sobre salga del nivel de los terrenos del entorno; quien al tomar las medidas de lo que sería la entrada sumaba unos 200 metros de frontera.
Luego, Siekik y los constructores usando a los más altos en talla, desde el punto donde se tomaron con el final de la extensión de la soga; ahora era el inicio para extender la soga mirando al Sur, se hizo el mismo procedimiento y la soga llegó casi justo donde empezaba la pendiente del terreno, se marcó el lugar y se procedió hacer lo mismo desde el otro punto de la otra soga, que eran coincidentes en las extensiones.
Cuando ambas medidas estuvieron paralelas hacia el Sur, se procedió a unir los puntos tal como se hizo en la delantera (frontera) y estando los cuatro puntos unidos, se formó la figura geométrica de parecida a un cuadrado, que si no hubiese existido ese inicio de la pendiente sería un rectángulo.
Con las medidas ejecutadas; el joven líder Siekik, quien si tenía una visión de arquitecto, junto a los constructores se pusieron en cuclillas, limpio un pedazo del terrero que le sirva como una pizarra y con un palito con punta, les explicó a los constructores lo que él, quería se edifique, él trazó varios dibujos de cuadrados y rectángulos de lo que seria la construcción, que iba tomando una figura de una plataforma que avanzaba hacia arriba con las hileras de los adobes usando argamasa de barro batido, que iban superponiéndose a los anteriores logrando altura, que se comunicará con escaleras del mismo material.
Aquí en la imagen observamos una recreación de lo que fue el joven Siekik, hijo único del líder Chonkik I., se aprecia claramente que el joven tenía el porte, la talla y la pasta para ser el sucesor de lo que estaba construyendo su padre: El Nacimiento de un gran señorío.
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Eventos funerarios prehispánicos de tres personajes de élite mochica: el Sacerdote Guerrero (tumba 14), el Señor Guerrero (tumba 16) y el Noble Guerrero (tumba 15), el personaje más antiguo hallado hasta la fecha en Sipán
Los vasallos constructores, estuvieron asombrados de las ideas del joven líder, a la vez le informaron que construir un templo de esas dimensiones se necesitarán miles de adobes.
Siekik, era obstinado en sus ideas, que era fruto de lo que pensaba y dirigiéndose al constructor más antiguo, le dijo:
--- Hombre, creo que si captaste mi idea de lo que quiero para construir el templo, dime: ¿Cuántos vasallos necesitas para ir construyendo por tiempos (etapas) hasta dar una forma de lo que será la base?
El constructor sabiendo que él moriría y aún el templo no estaría terminado, le contestó:
--- Oh Gran Líder, construir un templo como usted lo piensa es un largo tiempo, ni siquiera usted vivirá para cuando se haya terminado; creo que necesitaremos 20 veces las manos llenas (200) de vasallos, sólo para mover la tierra y limpiar el terreno y llegar a tierra firme.
Siekik, entendió que se le pasó la mano, que lo que él quería, era una gigantesca construcción y demasiado grande para las posibilidades de la mano de obra; pero como era tesonero en nunca ceder a la derrota, decidió iniciar la construcción y dirigiéndose a Renkik, le dijo:
--- Renkik, necesito 80 vasallos, que acompañen a los constructores para iniciar el movimiento de tierras.
Renkik, quien también estaba ilusionado por la construcción del tempo por ser él un constructor, le respondió:
--- Oh Gran Líder, construir el Gran Templo, es un sueño suyo, que aunque no le alcance toda su vida, lo haremos lo que nos alcance vivir, tengo 80 hombres que se destinarán la remover la tierra.
CONSTRUCCIÓN DEL GRAN TEMPLO:
Ese mismo día, se inició el trabajo, con palas de madera y talegas grandes, donde los vasallos cavaban y llenaban la tierra en las talegas que era cargada y llevada a una rivera del perímetro de la construcción, ese trabajo duro y agotador les demandó 45 días, quedando completamente limpio el terreno y como hubo desnivel, se rellenó los costados formando una gran plataforma totalmente nivelada de unos 40,000 metros cuadrados.
Así empezó el trabajo en serio de los vasallos constructores, quienes acostumbraban usar soguillas amarradas a una pequeña estaca que era sembrada y desde allí se extendía la soguilla para lograr observar el nivel del terreno.
Cuando ya estuvo el terreno limpio y nivelado, se dio inicio al tendido de los adobes, se mezcló arcilla con greda para hacer la argamasa que batiéndola con los pies se extendía y se asentaban encima los adobes en hilera longitudinal; pues, las 40 rumas de adobes que habían elaborado sólo cubrió la tercera parte de la extensión de la plataforma.
Ante la escases de adobes, se dispuso seguir elaborando, pero Siekik, recordó que dentro de los guerreros habían unos de ellos; que elaboraban adobes de excelente calidad, fue a Renkik y le dijo:
--- Renkik, nos quedamos cortos con los adobes que hiciste, necesitamos muchos más; vamos a encargar a los vasallos, que elaboran los mejores adobes con su marca; para que nos pongan en contacto con su tribu y encargarles la confección de los ladrillos.
Renkik, quien si conocía a la tribu, que estaba muy cerca en línea recta y un par de días caminando y le respondió:
--- Oh Gran Líder, mañana iniciaremos de nuevo la elaboración de los adobes; y con los 4 guerreros de esa tribu serán los que conduzcan a su lugar de origen para proponerles el trabajo.
Renkik, se fue hasta la tribu cuyos integrantes elaboraban adobes y tenían la particularidad de marcar su trabajo, fueron recibidos se inició un dialogo usando traductores y se acordó que irán un grupo de 50 vasallos para elaborar los adobes en el mismo lugar, a cambio de la entrega de productos comestibles; era el trueque perfecto, que le permitía a Renkik contar con sus guerreros.
Renkik, regresó a la vivienda con los nuevos vasallos, quienes se integraron al trabajo muy cerca del perímetro de la construcción, quienes usarían la misma tierra movida de la limpieza.
Mientras tanto; Siekik estaba pensando en establecer talleres de orfebrería para utilizar el oro y la plata en la elaboración de joyas y dijes para los dioses, y el cobre para elaborar armas y piezas para el uso de los líderes en las ceremonias de veneración a los dioses.
Había necesidad de cántaros y ollas y era necesario tener alfareros, el joven líder pensó que la tribu que elabora los mejores adobes, también deben ser alfareros, regresó a Renkik y le dijo:
--- Renkik, necesitamos hombres que elaboren mates y pocillos (valijas), ollas y cántaros (vasijas) de arcilla, averigua si esos vasallos de la elaboración de adobe, saben esos oficios.
El joven líder, siguió pensando en el mejoramiento de todo cuanto se hacía y los talleres de los tejidos, necesitaban una mejora para la confección de chalecos, pectorales, corazas y mantas de abrigo para entregar a los guerreros.
Con tantas cosas por hacer, en la cabeza del joven líder; en aquellos instantes llegó su pareja Nassanchak, quien le dijo que estaba cerca de parir, según Mokumac (mamá de Siekik) sólo le quedan una vez las manos llenas (10 días).
Él, sonrió sabiendo que se aproximaba el nacimiento de su primer hijo, pasaron los días y efectivamente al décimo día, apuraron los dolores a la barriga de Nassanchak, quien fue atendida por su madre y Mokumac, al anochecer nació una robusta bebé, era una mujercita muy hermosa, que no fue del gusto de Siekik, él quería un hijo varón....................
Continuaremos............................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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