Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior; Rodrigo López Huamán, junto con sus compinches, deseaban descansar en su viaje hacia Socchabamba, ellos encontraron una casa a un costado de una pampa que estaba iluminada con luces azules, ellos fueron recibidos por tres bellas mujeres vestidas de negro, al hospedarse una de ellas sacó una botella de licor y brindaron con los huéspedes, pero el trago estaba mezclado con un somnífero o algo parecido, que rápidamente doblegó a los visitantes quienes se acostaron con las mujeres, dos de ellos fueron asesinados y las mujeres les extrajeron sus corazones; se salvó Rodrigo, por ser más fuerte; él huyó y llegó a una casa vecina en donde narró la tragedia, el dueño de casa le informó que él, tuvo mucha suerte salir con vida de aquel lugar, que era conocido como: "La Casa de Las Tres Ánimas", quienes seducían a los viajeros nocturnos y luego matándolos...... sigamos leyendo la historia.......
Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria.
Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI.
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
Se dicen muchas cosas sobre los seres del inframundo, incluso hay investigadores religiosos, quienes aseguran que los espíritus del Más Allá, pululan en las noches en los lugares siniestros que les permite acosar a los humanos para atraparlos.
Todas las civilizaciones que existieron y existen sobre La Tierra; desde de sus tempranos inicios, siempre veneraron al ser del bien y despreciaron al ser del mal; es algo parecido a una balanza de dos platillos, cuyo fiel al centro está en constante movimiento, que según la conducta y comportamiento del ser humano quienes dedicados a sobrevivir trabajando y acumulando recursos para brindar una vida mejor a su familia; pero, al otro lado al mismo tiempo, hay otros seres tenebrosos que se apropian de los recursos generados con esfuerzo, estos nuestros personajes están al servicio del diablo, así se mueven los platillos de la balanza en uno o otro extremos...
Todos estos personajes infernales; que muchas veces son creados por la imaginación humana; ya que aún nadie ha retornado del infierno, como para que nos describa; por la sencilla razón de que el infierno está aquí presente con nosotros, ya que desde que el hombre empezó a vivir en comunidad, mediante las tribus o clanes con un mismo dialecto como símbolo de comunicación y raza que los identificaban como tales y que no eran los únicos habitantes, ya que existían otras tribus vecinas.
Estos; mientras tenían los mismos recursos convivían en armonía; sin embargo, cuando una tribu destacaba con avances en el desarrollo del bienestar en su población con mejores condiciones de vida, las otras continuaban atrasadas originaba la codicia de estas últimas por esos recursos que ellos no disponían y como no podían obtenerlo por las buenas maneras, originó la guerra por la pugna de imponer la fuerza y el poder para apoderarse de lo ajeno; donde morían justos por pecadores, allí justamente nace el infierno como un lugar de suplicio o esclavitud.
Continuando con la historia, Rodrigo López Huamán, al llegar a una casa, lejos del lugar donde se reunieron con sus compinches; el dueño de casa le narró que habían llegado a un funesto lugar denominado de las Tres Ánimas, quienes seducían a los viajeros para luego asesinarlos destrozando sus pechos y apoderándose de sus corazones; él, pretendía regresar y destruir aquel funesto lugar, pero fue persuadido por el dueño de casa que desista de su propósito y que continúe con su camino, agradeciéndole al Todopoderoso que aún le concedió la vida.
Rodrigo López Huamán, obedeció la recomendación de su anfitrión, ya no regresó a destruir la casa de las tres Ánimas; él hizo amistad con el dueño de casa y se pusieron a conversar y Rodrigo le preguntó:
--- Señor, usted mencionó que existe un señor ricachón en las pampas de Socchabamba y que él, estaba protegido por espíritus demoniacos, dígame: ¿Usted cree en esa historia?
El dueño de casa, tosió como aclarando la garganta y le respondió:
--- Escúcheme señor, se dicen tantas cosas de los señores que han acumulado riqueza, que la tuvieron de la noche a la mañana; y que fue gracias a un "Pacto con Satanás" o "Pacto con el diablo", ese espíritu infernal que está presente en nuestras vidas, metiendo su rabo de la seducción, por lo que se comenta que el señor Sánchez hizo ese "pacto" y se llenó de tesoros, a cambio entregando su cuerpo y alma al diablo, y como usted me preguntó si creo en esa historia; pues, si creo y por cierto lo temo, por que ese ricachón está protegido, por que nadie ha podido tocar sus tesoros, ya que todos los que lo intentaron murieron en el trabajo, y si alguien sobrevivió, no regresaron nunca más a Socchabamba.
Ya pasaron las primeras horas de la mañana; la señora preparó el desayuno que le convidaron al transeúnte; él continuaba con la incertidumbre de continuar o no a Socchabamba; el dueño de casa con la explicación que le dio, le aseguraba ese pacto diabólico y que él estaba expuesto.
Pero, lo que no sabía Rodrigo López Huamán, que si bien logró salvarse con vida, pero su ruta había sido desviada, él agradeció las atenciones a los dueños de casa que le llenaron la panza, montó su caballo y se fue sin dirección, él estaba desorientado y lo peor no sabía que dirección tomar, ni siquiera tenía noción como ir a Socchabamba, ya que no lo preguntó al dueño de casa para no despertar sospechas, que él era un asaltante.
Siguió trotando sin rumbo conocido y lo hizo todo el día, ya al anochecer su caballo estaba cansado ya que no había comido ni bebido agua, hasta que encontró una casa al pie del camino, quien al llegar llamó y salió una señora, quien al ver al desconocido, le dijo:
--- Buenas tardes amigo, baje, soy la dueña de casa, ya va anochecer.
Rodrigo, quien era muy observador, vio a la mujer como muy hermosa y vestía un traje de una sola pieza, con un lazo en la cintura que le ajustaba, mostrando sus caderas muy abultadas y ella era de talla grande; él miró a su caballo si tenía alguna reacción, el equino no estaba asustado y con esa buena noticia, le dijo:
--- Señora, estoy de viaje hacia Socchabamba, pero me he perdido del camino.
La señora se sonrió y le contestó:
--- No conozco Socchabamba, si tengo idea del camino que va a ese lugar, usted está en Ollería, pues tendría que descansar esta noche y continuar mañana su viaje, ya que el camino es solitario y peligroso por las noches.
Rodrigo, al sentirse favorecido por la hospitalidad, que le brindó la dueña de casa, le contestó:
--- Muchas gracias señora por brindarme la posada; pernoctaré esta noche; además quisiera pasto para mi caballo.
La dueña de casa, le contestó:
--- Ya eres mi huésped, hay posada para los dos, ya que su caballo será envidado al potrero que está lleno de pasto.
Rodrigo, quien se apeó del caballo, lo desensilló; la anfitriona le señaló el lugar, donde fue con su caballo lo soltó en un potrero lleno de pasto; él regresó a la casa, ya tenía en mente la hermosura de la mujer que era su anfitriona.
Al llegar, ya encontró una mesa que había sido servida con comida, al lado había un gran mechón de luz que iluminaba, la señora desde adentro, le gritó:
--- Amigo, siéntese y sírvase, voy con los jarros de café.
Efectivamente, la anfitriona regresó con dos jarros llenos de humeante café y ella muy hermosa que le brillaba su rostro, le dijo:
--- Amigo, sírvase con confianza, seguro que todo el día no probó bocado, así sufren los viajeros, usted no es la primera persona que hospedo en mi humilde chosita, ya vinieron otros viajeros.
Rodrigo, aún traumado con el recuerdo de las "tres Ánimas", estaba desconfiado, ya se había sentado y estando frente a un mate lleno de comida, le contestó:
--- Señora, le agradezco su atención, muy cierto durante todo el día no he consumido nada para mis tripas, por que no encontré una casa, ya que estaba perdido.
La señora, sirviéndose la comida, que demás de su hermosura, era gentil y amable, le dijo:
--- Amigo, no entiendo, que siendo un viajero, se haya perdido del camino, dígame: ¿Le sucedió algo horrible?, aún no me ha dicho de donde viene.
Rodrigo, observando la generosidad de la dama, pasó por su mente enamorarla, pero se detuvo y le contestó:
--- Nosotros estuvimos en Simbaca, salimos e intentamos pernoctar en una casa como esta, pero al encontrarla fuimos atacados por espíritus del Más Allá y mis amigos fueron devorados, yo me salvé y salí despavorido sin dirección, por eso llegué a esta zona, siento la satisfacción de haber salvado mi vida y a la vez la tristeza de haber perdido a mis amigos.
La señora dueña de casa, razonó que efectivamente el huésped se había desviado del camino, y como para no desmoralizarlo, le contestó:
--- Amigo, el desvió fue corto en comparación que salvó su vida, si he escuchado de las tres mujeres que devoran corazones, lo importante que usted está vivo.
Ellos terminaron de cenar, la anfitriona recogió las vasijas, con ellas fue a la cocina, ya la noche oscureció al medio ambiente, las aves nocturnas como los búhos y las lechuzas ululaban comunicándose entre ellos.
La anfitriona salió de la cocina, tendió cama sobre una tarima de carrizo, el huésped ya estaba observando como una hembra y le dijo:
--- Señora, veo que usted vive sola, dígame: ¿Tiene esposo?
La anfitriona, quien también estuvo mirando al huésped como un macho, le contestó:
--- No, señor ya no tengo esposo, él vivía aquí y una noche fue asesinado por un huésped, yo me salvé, por que me había levantado y hui en la oscuridad hasta pedir auxilio, el asesino huyó, pero no robó nada.......................
Continuaremos.......................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor deja tus opiniones, comentarios y/o sugerencias para que nosotros podamos mejorar cada día. Gracias !!!.