Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel, entre Iarma y Olzagon, y como informamos en el capítulo anterior, el almuerzo que ofreció el joven gerente Olzagon, a los trabajadores de la empresa "Comercial ELMALI", fue muy festivo y de sano esparcimiento; con la excepción de los matices que impuso la cajera Otilia Balladares, quien besó en público al joven Olzagon, anunciando que eran novios sin el consentimiento del joven; después ella fue elegida reina del aniversario del Restaurante Campestre "El Buen Aire", estando en el proscenio ella sufrió el hostigamiento de un pedante individuo que le propuso se convierta en su amante, ella lo rechazó; siendo las 19:00 horas, se terminó la festividad y todos se disponen a regresar a la ciudad.... ..sigamos la historia......
Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen las consistencias del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices.
Este es el símbolo de la novela: La Historia del Amor Cruel.
Fuente: Archivos del blog: A vuelo de un Quinde.
Obra Literaria reconocida con Derechos de Autor, según: Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
El Amor busca distancias para llegar...................
Chiclayo - Perú
25/08/2022
Derechos de autor reservados.
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Muchas gracias mi estimado Poeta por compartir sus bellas letras en este grupo maravilloso de nuestro titular Rivera Angel en Amigos y Pensadores mis 
felicitaciones
de Bendiciones mis saludos isa GRUPO POÉTICO:
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Olzagon, quien se cuidó y no bebió tan sólo unos pocos tragos, para mantenerse ecuánime y así poder estar sobrio dentro del desarrollo del acontecimiento festivo para los trabajadores de la empresa "Comercial ELMALI" disfruten un día domingo dichoso, y todo iba muy bien; pero, Otilia Balladares había planeado hacer en público su deseo de convertir al joven Olzagon en su amante, y ya dio los primeros pasos suficientes como para establecer el "noviazgo".
Volviendo a la historia, al concluir la reunión del almuerzo en el Restaurante Campestre "El Buen Aire", el joven Olzagon conversó con el gerente del local para pedirle le asigne el bus para el regreso a la ciudad, le informó que se cumplía todo de acuerdo a lo planeado.
Todos los trabajadores subieron al bus, algunos de ellos totalmente ebrios, que los encargados tuvieron que subirlos en peso, se les pasó la mano (mejor dicho el codo) bebiendo tragos; el joven Olzagon totalmente sobrio subió siempre adelante y por su puesto Otilia Balladares, con más tragos que bebió estaba feliz que se convertiría en amante del joven Olzagon, se sentaron juntos, ocupando los dos primeros asientos del bus; él aún quería evadir unirse sentimentalmente con ella, pero todo era ya muy tarde, solamente quedaba seguir el desarrollo de los probables episodios románticos.
Olzagon, sentado al lado de la ventana, ella se sentó al lado del pasillo, no hubo diálogo, pero Otilia se arrimaba al cuerpo del joven aparentando sueño y descansó su cabeza sobre el hombro derecho del joven, su mano izquierda descansó sobre el muslo derecho del joven.
Ya con un buen trayecto del recorrido, aprovechando los movimientos del bus, ella iba avanzando su mano hacia las entrepiernas y llegó a la bragueta y comenzó a manosear por encima del pantalón, cuyos impulsos provocaron la erección del pene que levantó el pantalón; seguían mudos, sólo movimientos de las manos de Otilia en la bragueta del joven.
Otilia, usando hábilmente su mano izquierda, comenzó a desabotonar la bragueta y lo logró, metió la mano sobre el calzoncillo que cubría el pene cogió la cabeza del glande acariciándolo con sus suaves manos; pero, no contenta con eso subió la mano hasta el filo de la trusa y la metió y cogió el pene en directo, hizo un nudo a su mano y comenzó con movimientos desde el glande hasta los testículos, que al llegar allí cogió cada testículo estrujándolos con suavidad y deseos.
Olzagon, por primera vez permanecía inmóvil, casi estático, nunca hizo oposición a las manos traviesas de Otilia, dejándola en completa libertad, para que ella haga los que le plazca con sus genitales.
Otilia, con la tácita autorización de manosear los genitales del joven macho, con su cuerpo lleno de ardientes deseos, no pudo más y volteó su rostro hacia la boca del joven y lo besó, esta vez Olzagon correspondió abrazándola y se besaron apasionadamente, ella aprovechó y metió las dos manos a la bragueta y se adueñó del pene, originando la pasión y el afloramiento de la testosterona del joven que iba surtiendo efectos; él, ya se olvidó del compromiso de fidelidad con Elsa Martinez Linares; además, ella estaba a muchos kilómetros de distancia.
El bus avanzaba aceleradamente, hasta que llegaron al Mercado Mayorista, el joven Olzagon se abotonó su bragueta, se encendieron las luces del pasillo, rápidamente bajó Olzagon y pidió apoyo a los agentes de seguridad para bajar a los trabajadores ebrios, y como a un costado había una estación de taxis, era un paradero obligado y se conocían de vista con los agentes, se contrató a estos taxistas que hagan el servicio de transportar a los trabajadores a sus casas, que en algunos casos un sólo carro transportaría hasta tres hombres que vivían en el mismo barrio.
Olzagon, metió la mano al bolsillo y disponía de algún dinero pagando adelantado a los primeros taxistas y el resto lo cobrará el día lunes en la empresa; los hombres del volante aceptaron gustosos y transportaron a los muchachos ebrios que algunos se quedaban dormidos, se habían divertido a lo grande que nunca antes lo organizó Elsa Martinez Linares.
Al final, se quedaron Olzagon y Otilia Balladares, ellos tomaron un taxi en dirección al departamento de Otilia, en el trayecto permanecieron en silencio, ella como siempre con sus iniciativas le puso la mano sobre el muslo y la subió a la bragueta, por encima del pantalón acariciaba al pene que nuevamente se puso erecto, hasta que llegaron, el agente de seguridad les abrió la puerta, ingresaron tomaron el ascensor y subieron, al estar en la puerta del departamento ella abrió la puerta y lo hizo ingresar.
PREPARATIVOS ANTES DEL COITO:
Lo que para Olzagon, fue en principio una angustia acceder a convertirse en amante de Otilia, se convertirá en una noche placer, ella lo buscó y logró su objetivo ya lo tenía en su casa a su disposición.
Otilia, sacó de su refrigeradora una botella de licor, le retiró el corcho y sirvió dos copas llenas le dijo:
--- Amor mío, brindemos por nuestra noche de placer.
Ambos chocaron sus copas y bebieron todo el contenido de una sola vez, y empezaron los abrazos, caricias y besos, las ágiles manos de Otilia, desabotonaron la camisa del joven macho, bajó las manos a la cintura, le aflojó el cincho que sujetaba al pantalón y sin desprenderse de los labios, le desabotonó la bragueta el pantalón cayó al piso.
El joven macho, ya muy activo también le desabotonó la blusa quedando al descubierto dos abultados senos protegidos por el brasier, metió la mano a la espalda y desbrochó el sostén, luego levantándole los brazos le retiró la blusa y el sostén de los senos, quedando el dorso desnudo mostrando dos hermosos senos cuyos pezones estaban erectos esperando ser amamantados.
Otilia, con el pantalón abajo del macho, metió las dos manos a los genitales y se adueñó de los testículos que los estrujaba y acariciaba, luego con la mano derecha cogió el pene hizo un nudo y comenzó a jugar subiendo y bajando desde la cabeza del glande a los testículos.
El joven macho, también bajó la mano a la cintura de la hembra y le desabotonó el pantalón, lo impulsó y cayó al piso, quedando libre unos genitales protegidos por una delicadeza y suave trusa roja de seda, metió la mano y rozó con una vulva húmeda y como seguían con las caricias le impulsó hasta el sofá y cayeron sentados envueltos en sus pantalones, ella interrumpió los besos y le dijo:
--- Amor mío, vamos a mi dormitorio.
Otilia, se retiró su pantalón y su trusa y desnuda se levantó estirando su mano al joven macho, quien también se sacó su pantalón y calzoncillo, ambos desnudos se abrazaron y se besaron apasionadamente chocando sus cuerpos y por su puesto el pene erecto rozó la vulva húmeda, cuya vagina segregaba los líquidos lubricantes para ser penetrada, se soltaron de los labios y abrazados se fueron al dormitorio, que al ingresar se expandía un aroma de colonias francesas, ella encendió las mesitas de los costados, iluminando una cama bien tendida y el aroma que era completamente nueva, ella subió a la cama y se tendió boca arriba, el joven macho aún de pie observó el monumento erótico de carne blanca rosácea que se iba a suyo, observó su pubis lleno de vellos rubios que eran largos y cubrían parte del vulva.(en aquellos tiempos no se depilaban las mujeres).
DESFLORE VAGINAL:
Olzagon, vio con asombro la hermosura del cuerpo de Otilia, ya su cuerpo estaba lleno de testosterona, él subió a la cama, se colocó encima abriéndole las piernas que ella dócilmente cedía, su pene rozó con la vulva, pero aún no la penetró, la besó apasionadamente y ella lo abrazó desde la espalda y lo impulsó a sus genitales y la penetró sólo con la cabeza del glande, el pene erecto llegó a la entrada de la vagina, pero hubo resistencia, el pene no ingresaba a esas entrañas, ella abrió más sus piernas para facilitar la penetración, pero el pene no pasaba se detuvo por la resistencia del himen, ella era virgen.
Olzagon, asombrado que era el primer hombre en una mujer ardiente que se acostaba con ella, ya no hizo fuerza había que excitarla al máximo para que ella no sienta dolor al momento del desflore; aún así ella seguía impulsando su cuerpo para lograr la penetración.
Entonces, el joven macho, lo pensó que esta noche de virginidad había que disfrutarla con suavidad y con mucha pausa, al fin tenía toda la noche a su disposición, interrumpió el semi coito, por que no era completo y le volteó el cuerpo, ella estando boca abajo, mostró su cuerpo anatómico esculpido por los dioses del amor.
Olzagon, observando esos exquisitos glúteos que eran perfectos como dos medias naranjas totalmente ovalados como si hubiesen sido esculpidos por un artista, bajó sus labios y comenzó a lamerlos, esa carne exuberante blanca rosácea suave y liza provocaba comer un trozo, la lengua avanzaba llegando a la filo del glúteo y se pasaba al otro, hasta que ella se abrió de piernas mostrando un ano muy pequeño parecía como un lunar en medio de las entrepiernas.
El plan del joven macho era excitarla al máximo para desflorarla y avanzó sus labios al ano le dio un beso y ligeramente metió la punta de su lengua, bajó su lengua para llegar a la vulva, ella dio un grito así:
--- Oooouuuuuooooooooooooouuuuuuuuuuuuuuuuuooooooooooooo
El joven macho encontró el Punto "G", que estaba en ese espacio entre el ano y la vulva, le pasó varias veces la lengua y ella se excitaba y seguía gritando:
--- Ooooouuuuuuuuuu, quiero tu pene en mi vagina..... ooooooooouuuuuuuu......
El joven macho seguía lamiendo ese reducto erótico, para excitarla y ella seguía gimiendo así:
--- Ooouuuuu. tu lengua es rica me hace cosquillas..... ooooouuuuuuuuuu...
El joven macho seguía lamiéndole ese reducto erótico, que no hay más delicia tan exquisita que lamer la vulva y el ano de una doncella que aún no sentía el dolor del desflore y gemía:
--- Ouuuuuuuuuuuuuuuuuuoo.. quiero tu pene en mi vagina........ ooouuuuuuuuuuuuu....
Parece que la excitación de la hembra ya estaba llegando a su máximo esplendor como para perforar su delicioso himen virgen y seguía gimiendo:
---- Ooooooooouuuuuuuu ya no soporto más tu lengua exquisita que me despierta pasiones, quiero tu pene en mi vagina..... oooooouuuuuuuuuuuuuu......
Olzagon, creyó que ya era tiempo, le volteó el cuerpo, ahora ella lo abrazó cogiéndole el pene y lo puso en su vulva, se impulsó desde abajo abrazándole la cintura y lo haló a sus genitales, el joven macho la penetró con fuerza y el himen cedió roto por un poderoso pene recibiéndolo una sedienta vagina que buscaba el placer, ella gritó:
--- Aaaaaaaaaayyyyyyyyyyyy... que dolor siento y a la vez una dulzura como cosquillas a mis entrañas... ... aaaaaaaaaaayyyyyyy, me arde mi vagina. ...aaaaaayyyyy.....que dolor siento.....
El joven macho sintiendo mucha humedad a su pene, mojado por la sangre que era impulsado a las cavidades uterinas por los movimientos de la hembra que seguía gimiendo por el dolor de la rotura del himen, y como estuvo excitada sentía al mismo tiempo placer a la penetración y gritaba:
--- AAAAAAAAAAyyyyyyyyyyy que ardor siento, pero sigue metiéndolo tu pene es riquísimo..... aaaaaaaayyyyyyyy Dios mío no pensaba que ardía tanto......... aaayyyyyyyyyy, .. pero esta rico......
El joven macho muy feliz que se estaba desflorando a la mujer más hermosa de la empresa, con un cuerpo tan provocativo que hasta paraban los taxistas para verla pasar, ahora era él quien la estaba desflorando, quietándole su virginidad y ella seguía moviéndose gozando y gritando:
--- Aaaaaaayyyyyyyyyyyyyyyyyy... sigue metiéndolo hasta mis entrañas, que rico es tu pene, entra con si fuese un formón caliente que abre camino cortando carne.... aaaaaaayyyyyyyyyyyyy.... estoy feliz, de sentirme una hembra poseída .... aaaaaaayyyy pero me arde mi cosita........... siento dolor y cosquillas en mi vagina... aaaaaaaaaayyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy.....
El joven macho siguió penetrándola con toda su dimensión, quien cogiéndola desde los glúteos la apegó a sus genitales formando un sólo cuerpo unidos por el coito, él gozaba estar desflorando a una hembra que siempre lo acosó y él se dio el lujo de despreciarla, pero ella nunca se rindió y ahora lo estaba gozando, la humedad avanzaba, era la sangre de la rotura del himen virgen de una hembra ardiente........
Continuaremos.........................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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