Una imagen cedida por el fotógrafo Ale Mallado muestra un galeón
español, réplica de un navío del siglo XVII, llega el muelle 84 del río
Hudson este 9 de agosto 2013 en Nueva York (EE. UU. ). EFE
Un galeón español del siglo XVII, el nuevo inquilino del río Hudson |
Un galeón español del siglo XVII, el nuevo inquilino del río Hudson
(EFE)
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hace 2 días
Nueva
York, 11 ago (EFE).- El río Hudson tiene este verano un nuevo
inquilino: un galeón español, una réplica de un navío del siglo XVII que
invita a los neoyorquinos a descubrir la historia de la navegación y
cómo era la vida de los primeros exploradores españoles en embarcaciones
similares.Con visitas diarias de grupos de escolares y del público en general, los 25 tripulantes reciben hasta el próximo 18 de agosto a todos aquellos que lo deseen los secretos de esta réplica de los barcos españoles que llegaron el Caribe cuatro siglos atrás.
"En este barco de madera de 50 metros de eslora vivían 200 personas. Estaban expuestas a tormentas y ataques de piratas", contaba uno de los tripulantes del galeón, Miguel Talegón, a un grupo de niños de una escuela de Manhattan que visitó la embarcación.
Con un paseo por la cubierta, por la zona noble del galeón destinada al capitán de la embarcación o por los camarotes, los más pequeños pudieron sentirse como en una película de piratas.
"Es una atracción turística pero también cultural", dijo a Efe Talegón, "porque enseñamos la historia de la navegación marítima española, el papel que jugó entre los diferentes pueblos y la conexión que estableció entre tres continentes: Europa, América y Asia".
Desde que llegó el pasado 28 de julio a Manhattan, el galeón ha recibido la visita de neoyorquinos y de muchos hispanos "que se sienten identificados con la historia. Este era uno de los barcos que llegaban a esas áreas y muchos de sus antepasados vinieron con estos barcos", añade.
Lo que más sorprende a los visitantes, especialmente a los más pequeños, es la zona de los cañones, donde se acercan entusiasmados a observar estas piezas de artillería que tantas veces han visto en algunas de sus películas favoritas y que según les explica Talegón, "se utilizaban para protegerse de los piratas".
"También les enseñamos nuestra vida, qué hace un grupo de españoles cruzando el Atlántico, recorriendo el Caribe y ahora la costa estadounidense en un galeón del siglo XVII", comentó.
En esta aventura "cultural" a bordo del galeón, participan desde historiadores, antropólogos o periodistas con algo en común: la pasión por el mar.
Aunque el navío se ha adaptado a los nuevos tiempos y cuenta con un motor, Talegón explicó que el "rigor histórico" se mantiene.
"Tomamos duchas con agua salada, tenemos un cocinero y un gambucero que velan por que se administre la comida y la navegación a vela es a mano, como en el siglo XVII, por lo que necesitamos 15 personas para levantar las velas principales", dijo.
Según explicó, los galeones del Atlántico navegaban de España al Caribe con los vientos alisios, llenaban las bodegas en el Caribe y con la corriente del Golfo volvían a subir hasta el norte de Florida, por lo que "tan arriba nunca llegaron".
Por eso los marineros de este navío han hecho historia, ya que en el registro de la navegación no consta que ningún galeón español atracara en Nueva York, de modo que esta podría ser la primera vez que uno navega por las aguas del río Hudson.
En palabras de Talegón, la entrada a Manhattan el pasado 28 de julio fue "impresionante, viendo ese pedazo de roca lleno de edificios enormes, dejando la estatua de la libertad por babor y con la bahía llena de veleros y cruceros".
Además, el galeón cuenta con un peculiar compañero de muelle: el "Intrepid", el legendario portaaviones de la Marina estadounidense que participó en importantes batallas navales y que en 1982 se convirtió en un museo naval flotante.
La aventura "cultural" de esta réplica construida en 2009 en los Astilleros de Punta Umbría (Huelva, España), arrancó el pasado 4 de febrero dentro de las actividades que la Fundación Nao Victoria efectúa para conmemorar el quinto centenario del descubrimiento de Florida por Ponce de León y otros exploradores españoles, que significó el principio de la presencia de los europeos en Norteamérica.
Desde entonces, ha cruzado el Atlántico para "hacer las Américas" y llevar la historia española por todos los mares del mundo. Después de Nueva York, el galeón pondrá rumbo a Maryland, y volverá después a Puerto Rico y Florida, donde ya estuvo hace unos meses.
© EFE 2013.
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EFE
El Galeón llega a Nueva York. Crónica de la llegada
Fotografia: Alejandro Mallado
Parte desde las 2:00 del 27 de julio hasta las 2:00 del 28 de julio
Posición: Latitud 40º16' N Longitud 073º45' W
Atracados en el Pier 84, Nueva York, EE.UU.
Total millas recorridas desde el inicio de la travesía (Palma de Mallorca): 6419 millas
Nueva York por la proa
Todos conocemos Nueva York, aunque no hayamos estado nunca en ella.
El Galeón y lo que es más importante, su tripulación, tiene la gran
suerte de vivir una experiencia casi única: entrar en NYC con la réplica
de un navío del siglo XVII.
Son las 13:30 del 27 de julio de 2013 y estamos de guardia Adrián,
Pedro, Lau, Miguel, Juan J., Lucre y el que escribe, José, un modesto
marino que está viviendo la que, por ahora, puede ser la experiencia de
su vida: ir de segundo oficial a bordo del Galeón Andalucía. Estoy
encargado de la segunda guardia y tenemos la suerte de ser nosotros los
que iniciamos la navegación de aproximación a “la capital del mundo”.
¡Tierra! ¡Es Nueva York! Empieza a escucharse por cubierta. La
“tripu” está deseando llegar, todos tenemos esa ilusión que de niño no
nos dejaba dormir la víspera de una excursión con el cole, o la noche
del 5 de enero.
Pues sí, en el horizonte, muy de lejos, se adivina la silueta de
algunos edificios. Haciendo vigilancia desde el puente, con los
prismáticos, pude distinguir a más de 20 millas, dos estructuras enormes
sobre el horizonte, creí que eran dos gigantes de hormigón de esos que
abundan en Nueva York. Luego supe que eran los pilares del puente que da
la bienvenida a la entrada del rio Hudson, el puente de
Verrazano-Narrows. La bruma que había no dejaba distinguir entre una
cosa y otra… da igual ¡¡¡Tierra a la vista!!! ¡¡¡Nueva York!!!.
El práctico nos espera a las 14:00 para ayudarnos a entrar hasta
nuestro atraque, vamos un poco adelantados pero creo que eso lo
agradecen.
Práctico a bordo. Presentaciones, asombro y admiración por su parte y manos al timón. La ciudad de los rascacielos nos espera.
Desde hace unos días tenemos la incertidumbre de si podremos hacer
un buen reportaje de la entrada del Galeón en la ciudad. El práctico nos
confirma que sí, que podremos arriar la neumática para hacer fotos
desde fuera del Galeón. ¿Dónde? No sé, donde vosotros queráis, nos dice.
¿Podemos parar a la altura de la Estatua de la Libertad? Pues claro, a
unos cien metros si queréis. Siempre dentro de los márgenes de
seguridad, pero sin problema. Este práctico, joven práctico, es “el
práctico”.
Tenemos fotos increíbles de ese momento. La experiencia es
abrumadora. La emoción se reparte a raudales entre la tripulación. La
vista alegra el espíritu.
Una vez que hemos pasado por debajo del puente, viramos algunos
grados a estribor, y poco a poco se abre ante nosotros el Río Hudson en
todo su esplendor, empiezan a llegar barcos de todas partes, nos
alcanzan desde los cuatro costados, nos hacen fotos, nos saludan, tocan
las bocinas, esto se anima. Popo avisa: “oye mirad a proa, si, si, allí,
¿la veis? es Liberty Island y la bella Estatua de la Libertad.
A partir de ese momento todo se convierte en un pequeño caos
controlado. Todos queremos hacernos fotos con ella, en grupo, solos, con
los veleros navegando en primer plano, con Manhattan a la derecha….
¡Qué maravilla chiquillo, qué maravilla!.
Como nos prometió, el práctico nos deja poner la máquina en neutro y
arriar el chinchorro con Popo haciendo fotos y Jaime pilotando. Durante
unos veinte minutos se desata la locura. En el tajamar hay cola para
hacerse fotos. Es impresionante verse a tan escasos metros de tan
emblemático monumento, flotando en medio del Hudson y rodeados de
barcos… El Queen Mary II, zarpando del muelle 33, la goleta América
haciendo un bordo espectacular para rodearnos por nuestra popa, los
barcos de charter con turistas de aquí para allá, barcos recreativos,
lanchas de alta velocidad, veleros modernos, veleros clásicos, el ferry
de Connie Island, uf… necesito dos crónicas para describir todo lo que
hemos visto.
Ahora, después de un duro día de trabajo, y de tantas emociones,
sentado en la escala de acceso a la toldilla, escribiendo estas líneas
levanto la cabeza y veo a mi alrededor una fantasía, parece que estoy
soñando, estamos en Nueva York, en el muelle 84, a pocas manzanas de
Time Square, de Broadway, del edificio más famoso del mundo, símbolo de
un imperio, de la calle 42, todo iluminado y a nuestra proa.
Hace fresco, el clima es más cómodo que en St. Augustine, donde el
calor y la humedad no te dejaban respirar. Aquí, sentado en la toldilla
pienso en que soy una persona con suerte, y he tenido el honor de
escribir esta crónica para quien quiera leerla. Espero poder transmitir,
aunque solo sea un poco, la emoción que todos hemos vivido a bordo del
Galeón en este día.
Desde Nueva York, un humilde navegante les desea que tengan un bonito día.
José Manuel Pérez Malvido.
http://www.fundacionnaovictoria.org/
El Galeón parte de St. Augustine rumbo a la Gran Manzana
De San Agustín a la Gran Manzana
El paso del Galeón por la histórica ciudad de San Agustín ha estado
colmado de visitas y relaciones culturales. Más de 35.000 personas han
pasado por sus cubiertas desde que arribase el pasado 21 de mayo a la
ciudad más antigua de Estados Unidos. Hoy este barco réplica de los
antiguos galeones comerciales españoles ha puesto proa hacia Nueva York,
donde estará abierto al público en el Hudson River Park, en pleno centro de la Gran Manzana.
San Agustín ha cubierto las expectativas tanto de la Fundación Nao
Victoria, en su intención por promover la historia marítima española,
como de la propia ciudad por añadir este gran atractivo cultural al 500 aniversario de la Florida,
y que a su vez ha sumado un valor histórico y cultural a su oferta
turística, plagada de referentes al pasado español de este estado. De
hecho, esta población ha sido el colofón de una gira por el estado de la
Florida, donde el Galeón ha abierto anteriormente su pasarela en Miami,
Fort Lauderdale y Port Canaveral, con una exitosa acogida.
Ahora pone rumbo Norte a lo largo de la costa este norteamericana
en una travesía estimada de seis días hasta alcanzar la impresionante
estampa de la Estatua de la Libertad con el "skyline" de Manhattan.
Aunque en la historia nunca se ha registrado que un Galeón español
alcanzase dichas coordenadas, en pleno siglo XXI este embarcación
buscará revolucionar la cosmopolita ciudad en su intercambio cultural.
La Nao Victoria atraca en el Puerto de Garrucha, Almería
La Nao Victoria, réplica del navío que dio la primera vuelta al mundo, llega por primera vez a Garrucha
Podrá visitarse en el nuevo puerto deportivo de Garrucha a partir del día 24 de julio
Desde el próximo día 24 de julio será posible visitar la Nao Victoria en el Puerto de Garrucha.
Este barco es la réplica del navío que entre 1519 y 1522 dio la
primera vuelta al mundo. Una hazaña marítima que permitió conocer el
planeta en toda su dimensión. Además la embarcación realizó su
particular vuelta al mundo desde 2004 a 2006 en homenaje a la original.
Con una tripulación de 20 personas y visitando 17 países, se convirtió
en la primera réplica histórica de un barco de estas características en
realizar una travesía semejante.
El programa “Nao Victoria Experience”
permite a los visitantes aprender sobre las formas y detalles de la
primera circunnavegación de la historia y como vivían sus tripulantes en
el siglo XVI. Además de conocer las experiencias y aventuras vividas
por la tripulación que durante 2004-2006 emuló a su antecesora.
De Lunes a Viernes se podrá visitar el barco en horario de 11:00 a
14:00h. y de 18:00 a 24:00h.. En fin de semana el horario es continuo de
11:00 a 24:00. El precio de la entrada es de 2 euros.
La Fundación Nao Victoria invita a todos los ciudadanos y
visitantes de Garrucha a disfrutar de esta réplica y conocer las
aventuras que a lo largo de la historia ha vivido.
DATOS DE LAS VISITAS:
Lugar: Nuevo Puerto Deportivo de Garrucha
Horario:
Lunes a Viernes: 11:00h. a 14:00h. y de 18:00 a 24:00h.
Fines de Semana: 11:00h a 24:00h.
Tickets: 2 €
Visitas de centros educativos y grupos concertados:
Concertar con Jose Gutiérrez
Teléfono: 638763838
EFE
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
ayabaca@gmail.com
ayabaca@hotmail.com
ayabaca@yahoo.com
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