Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior; Cipriano Culquicondor, mas conocido como "El asesino que no mira atrás ", salió temprano de su casa en Tacalpo y viajaba rumbo a Samanguilla a visitar un amigo; sin embargo, al llegar a Yanchalá, escuchó en una casa; que una familia se trenzaba en un pleito familiar, al acercarse comprobó lo desigual de la pelea, ya que el marido masacraba a la joven esposa, entró en su defensa, apartando al atacante y brindado su apoyo a la joven mujer, pero el depredador reaccionó y atacó al protector ocasional y éste esquivó el ataque.....
Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria. Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI.
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
Cipriano, como hábil peleador , debía sus éxitos a sus reflejos que le permitían anticipar el ataque, o esquivar las acometidas de los contrarios(rivales), justamente en este pleito familiar, él brindó su apoyo a la joven esposa que había sido doblegada por completo, llevándose la peor parte de la pelea, de este clásico : Pleito Familiar, y estando su cuerpo tumbado en el suelo, sin ninguna opción de salvarse de la golpiza que le infligía su esposo.
Cipriano, esquivó el ataque de represalia del marido opresor de la joven señora; y con la mano izquierda en guardia contenía al atacante, y con la derecha llevó a la joven mujer a un costado de la pared de la sala, dejándola parada y volteó a terminar en lo que se había metido; claro está, era un entrometimiento, pero ya no podía dar marcha atrás(tampoco le gustaba ese plan), y levantando la voz se dirigió al marido atacante diciéndole:
--- No se cuál es el problema entre ustedes, pero jamás podía permitir que tu como marido y con la ventaja de tremenda fuerza; ataques a esta indefensa mujer que es tu compañera, quiero que se arreglen las cosas y me retiro..., no puedo soportar la golpiza que con ventaja haces contra tu mujer.... nada me cuesta hacerte comer tu propia mierda con mis golpes, pero como nadie me llamó me detengo, da gracias a esa prudencia mía....
Pero la respuesta no se hizo esperar del opresor, quien encabritado le contestó:
--- Pedazo de estúpido, entrometido de mierda, nadie te llamó a meterte en peleas de esposos, lárgate por el camino que llegaste y déjanos a nosotros revolver nuestros asuntos; esta mujer de mierda... necesita ser corregida y justamente estaba haciéndolo y tu como un animal extraviado te metiste a mi casa sin que nadie te haya llamado, te repito lárgate, por que de lo contrario te enseñaré el camino.. no olvides este es un pleito familiar....
Cipriano, entendió que ciertamente nadie lo llamó a él y como bien dice el refrán: "Él no tenía vela en ese entierro", era una clásica pelea de esposos muy común en aquellos tiempos: un pleito familiar; pero tampoco podía permitir que un miserable con el titulo de "esposo" masacre a su compañera; y como los ánimos ya se calmaron, él aceptó los adjetivos que le lanzó el dueño de casa, dio marcha atrás y salió, pero cuando se encaminaba hacia su ruta, la joven mujer salió escapándose de la casa le dio alcance y le pidió protección, diciéndole:
--- Por favor joven, no me abandone, por que ese animal de mi marido me matará, si usted no me protege, por favor no se vaya, no le tema ese es un cobarde...
La joven mujer empezó a llorar desconsoladamente...
En esos instantes también salió el marido y cogió de los cabellos largos de su joven mujer y la arrastró al interior de la casa, la víctima gritaba dando desgarradores lamentos; una vez más Cipriano reaccionó en su defensa, pero esta vez fue directo contra el miserable cobarde, lo cogió del cuello tratando de extrangularlo; para que suelte los cabellos de su esposa.
En efecto, así lo hizo, Cipriano lo soltó y estando frente a frente, el victimario defendiéndose, trató de golpear el rostro de Cipriano, pero este estaba en guardia, esquivó, y de nuevo lo agarro del güergüero (cuello) y esta vez si lo apretó con la intención de asfixiarlo... pero se arrepintió.
Entonces, lo soltó empujando con fuerza y lo hizo tan fuerte que el cuerpo del marido atacante; cayó pesadamente en cúbito dorsal, recibiendo el golpe la cabeza; la joven mujer asustada y con la sangre que aún seguía manando de la nariz, ella fue hasta la cocina y trajo una lapa llena de agua y la echó sobre la cabeza de su esposo caído.
El golpe del agua fría, surtió efecto, el caído reaccionó tratando de sentarse, pero no logró, volviendo a caer sobre el piso, pero con vida.
Cipriano; muy asustado y aturdido por haberse medido en líos de esposos, y con el agravante que casi mata al agresor y pensó que ya era tiempo de alejarse de ese lío, le dio la mano a la joven esposa en señal de despedida y ella aprovechó no soltando la mano y le dijo:
--- Amigo gracias por ayudarme, que si no llega usted, yo ya sería un cadáver, por esa razón yo no me quedo en este cada casa, me voy con usted, no tanto como su compañera, sino como una amiga salvada de las garras del maltrato, por favor lléveme no me deje, por que si usted se va y algún día regrese solo encontrará mi cadáver; este hombre luego que se recupere me atacará de nuevo..... por favor no me deje sola....
Cipriano, miró a la joven mujer, ella era muy donosa(bella) y también observó el cuerpo caído del atacante y comenzó a pensar, que hacer en este lío de esposos, que él trató de ayudar a la joven mujer.....
Continuaremos.............
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
ayabaca@gmail.com
ayabaca@hotmail.com
ayabaca@yahoo.com
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Cipriano, como hábil peleador , debía sus éxitos a sus reflejos que le permitían anticipar el ataque, o esquivar las acometidas de los contrarios(rivales), justamente en este pleito familiar, él brindó su apoyo a la joven esposa que había sido doblegada por completo, llevándose la peor parte de la pelea, de este clásico : Pleito Familiar, y estando su cuerpo tumbado en el suelo, sin ninguna opción de salvarse de la golpiza que le infligía su esposo.
Cipriano, esquivó el ataque de represalia del marido opresor de la joven señora; y con la mano izquierda en guardia contenía al atacante, y con la derecha llevó a la joven mujer a un costado de la pared de la sala, dejándola parada y volteó a terminar en lo que se había metido; claro está, era un entrometimiento, pero ya no podía dar marcha atrás(tampoco le gustaba ese plan), y levantando la voz se dirigió al marido atacante diciéndole:
--- No se cuál es el problema entre ustedes, pero jamás podía permitir que tu como marido y con la ventaja de tremenda fuerza; ataques a esta indefensa mujer que es tu compañera, quiero que se arreglen las cosas y me retiro..., no puedo soportar la golpiza que con ventaja haces contra tu mujer.... nada me cuesta hacerte comer tu propia mierda con mis golpes, pero como nadie me llamó me detengo, da gracias a esa prudencia mía....
Pero la respuesta no se hizo esperar del opresor, quien encabritado le contestó:
--- Pedazo de estúpido, entrometido de mierda, nadie te llamó a meterte en peleas de esposos, lárgate por el camino que llegaste y déjanos a nosotros revolver nuestros asuntos; esta mujer de mierda... necesita ser corregida y justamente estaba haciéndolo y tu como un animal extraviado te metiste a mi casa sin que nadie te haya llamado, te repito lárgate, por que de lo contrario te enseñaré el camino.. no olvides este es un pleito familiar....
Cipriano, entendió que ciertamente nadie lo llamó a él y como bien dice el refrán: "Él no tenía vela en ese entierro", era una clásica pelea de esposos muy común en aquellos tiempos: un pleito familiar; pero tampoco podía permitir que un miserable con el titulo de "esposo" masacre a su compañera; y como los ánimos ya se calmaron, él aceptó los adjetivos que le lanzó el dueño de casa, dio marcha atrás y salió, pero cuando se encaminaba hacia su ruta, la joven mujer salió escapándose de la casa le dio alcance y le pidió protección, diciéndole:
--- Por favor joven, no me abandone, por que ese animal de mi marido me matará, si usted no me protege, por favor no se vaya, no le tema ese es un cobarde...
La joven mujer empezó a llorar desconsoladamente...
En esos instantes también salió el marido y cogió de los cabellos largos de su joven mujer y la arrastró al interior de la casa, la víctima gritaba dando desgarradores lamentos; una vez más Cipriano reaccionó en su defensa, pero esta vez fue directo contra el miserable cobarde, lo cogió del cuello tratando de extrangularlo; para que suelte los cabellos de su esposa.
En efecto, así lo hizo, Cipriano lo soltó y estando frente a frente, el victimario defendiéndose, trató de golpear el rostro de Cipriano, pero este estaba en guardia, esquivó, y de nuevo lo agarro del güergüero (cuello) y esta vez si lo apretó con la intención de asfixiarlo... pero se arrepintió.
Entonces, lo soltó empujando con fuerza y lo hizo tan fuerte que el cuerpo del marido atacante; cayó pesadamente en cúbito dorsal, recibiendo el golpe la cabeza; la joven mujer asustada y con la sangre que aún seguía manando de la nariz, ella fue hasta la cocina y trajo una lapa llena de agua y la echó sobre la cabeza de su esposo caído.
El golpe del agua fría, surtió efecto, el caído reaccionó tratando de sentarse, pero no logró, volviendo a caer sobre el piso, pero con vida.
Cipriano; muy asustado y aturdido por haberse medido en líos de esposos, y con el agravante que casi mata al agresor y pensó que ya era tiempo de alejarse de ese lío, le dio la mano a la joven esposa en señal de despedida y ella aprovechó no soltando la mano y le dijo:
--- Amigo gracias por ayudarme, que si no llega usted, yo ya sería un cadáver, por esa razón yo no me quedo en este cada casa, me voy con usted, no tanto como su compañera, sino como una amiga salvada de las garras del maltrato, por favor lléveme no me deje, por que si usted se va y algún día regrese solo encontrará mi cadáver; este hombre luego que se recupere me atacará de nuevo..... por favor no me deje sola....
Cipriano, miró a la joven mujer, ella era muy donosa(bella) y también observó el cuerpo caído del atacante y comenzó a pensar, que hacer en este lío de esposos, que él trató de ayudar a la joven mujer.....
Continuaremos.............
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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