Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior; Cipriano "El asesino que no mira atrás" y su gente, después de doblegar a "El trío de la Pampa" y hacer pedir perdón de rodillas al líder Gustavo ante don Emilio Culquicondor, padre de Emilio Segundo, quien fue asesinado por Gustavo y arrojado su cuerpo por un precipicio; don Emilio teniendo cerca a Gustavo maniatado le dio un puñetazo en el rostro, que la mayor fuerza fue a la boca y se desprendieron algunos dientes; Cipriano se opuso a este castigo, y quiso ayudar al herido con un jarro de agua para que se lave la boca llena de sangre y algunos dientes.en respuesta Gustavo se arrojó al suelo y desde allí tiro punta pies que afectó la rodilla de Cipriano....
Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria. Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI.
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
Gustavo, era un criminal muy cruel y que nunca tuvo un viso de misericordia con sus rivales, simplemente mataba; pero ahora era él, quien estaba bajo el poder de otro cruel asesino; pero éste era diferente, nos referimos a Cipriano "El asesino que no mira atrás", él siempre daba opción al contrario(rival) para definir fuerzas en igualdad de condiciones.
Sin embargo, Gustavo no quiso esa posibilidad e intentó atacar a Cipriano sorprendiéndolo con una fuerte patada que fue dirigida al estómago pero solo llegó a la rodilla derecha que lo hizo tambalear pero sin perder el equilibrio.
Entonces, Cipriano soportando el tremendo dolor a su rodilla que tuvo que separarse y sentarse sobre una tarima para sobar y masajear la rótula; pero rápido se levantó y se dirigió con la chaveta abierta contra el tumbado cuerpo de Gustavo, todos los allí presentes pensaron que iba a terminar asesinando a Gustavo, pero no, le volteó el cuerpo y de un tajo le cortó la soga que le ataba las manos y lo liberó y le dijo:
--- Nada me cuesta terminar contra tu cuerpo, pero estás libre y lo haremos en pelea libre afuera en el patio, recoge tu chaveta, tuviste la opción de seguir viviendo pero lo desperdiciaste....
Todos los allí presentes no entendían tanta contemplación de Cipriano contra su peor enemigo Gustavo, y nada aseguraba que estando libre y armado el dueño de casa podría recuperar su arrogancia y vencer a Cipriano y se atrevió a contestarle así:
--- No te agradezco tu actitud de misericordia, nunca te la pedí, ahora estúpidamente me liberas, lo haz hecho por que te tiemblan las manos y por fin aceptas que yo soy el mejor, vamos a la pampa, allí me daré el lujo de vaciar tus tripas y más tarde los guishcos(gallinazos) se darán un gran banquete.
Gustavo con la rapidez de un rayo fue hasta la tarima donde estaban las chavetas y cogió dos y retó a Cipriano a seguirlo hacia afuera.
Afuera el ambiente estaba oscuro, era media noche, solo estaba amarrados en su picotas los compinches de Gustavo, no corría viento, repentinamente pasaron volando casi al ras del suelo dos lechuzas que ululaban anunciando muerte y sería para el "Rey de las Tinieblas" don Satán...
Cipriano, rengueando salió tras el ahora retador Gustavo, él también llevaba listas dos chavetas para equiparar las fuerzas; la ventaja era para Gustavo, por que él conocía el terreno. aún así Cipriano, tenía que definir fuerzas con su peor enemigo, así lo quiso él, que seguro Gustavo nunca le hubiese dado esa opción; ambos contrincantes caminaron varios pasos hasta la mitad del patio
Los siguieron Néstor y Tomás con los mechones de luz que alumbraban incipientemente el ambiente.
Entonces, Gustavo creyéndose que siendo el dueño de casa tenía la oportunidad de acabar con un rival que se atrevió sorprenderlo en su propia casa y blandiendo por los aires sus chavetas, dijo:
--- Cipriano, mi rival mas enconado que he tenido, siempre esperé esta ocasión de hacerte comer la tierra con la fuerza de mis puños armados...
Y haciendo uso de su rapidez casi increíble, se abalanzó contra el cuerpo de Cipriano, quien adivinó sus intenciones, las chavetas pasaron tan cerca del rostro de Cipriano, que gracias al quite de cuerpo y sus reflejos siempre listos lo salvaron de la primera embestida de Gustavo; que por desgracia para él, empleó demasiada energía y se fue en banda hacia adelante casi perdiendo el equilibrio.
Cipriano, muy experimentado en peleas contra retadores que él, los denominaba: "Toros bravos pero brutos", ahora se cuadró bien y esperó el regreso del contrario(rival), que efectivamente retrocedió Gustavo muy encolerizado y listo para atacar el cuerpo de Cipriano y se lanzó con las dos chavetas al frente con pasos grandes y al llegar al cuerpo de Cipriano creyendo que se había entregado, pero que solo lo esperaba con las chavetas en punta que teniendo el cuerpo de Gustavo a su alcance, se introdujeron: una por el costado derecho comprometiendo órganos internos y la otra se introdujo al estómago; pero también Cipriano fue herido con una chaveta de Gustavo que se introdujo en el brazo izquierdo y se quedó allí....
Gustavo, muy mal herido, perdió el equilibrio y cayó boca abajo, entregando su espalda, que Cipriano no se hizo de rogar se lanzó contra el cuerpo caído y lo chaveteó sucesivamente los pulmones que comenzaron a perder aire y por allí afloraba sangre en burbujas, ya no se pudo levantar Gustavo, solo estiró el cuerpo y murió.
Cipriano después de terminar contra Gustavo, se levantó ante la herida del brazo izquierdo, jalo la chaveta, rompió un pedazo de su camisa formando una tira y se amarró el brazo para controlar la hemorragia, pero como no era suficiente, fue a la sala cogió el jarro y miccionó allí y con esos orines lavó la herida de su brazo.
El desafío(duelo) de dos grandes bandoleros había terminado, con la contundente victoria de Cipriano, quien no iba ser lo mismo con los compinches, que se acercó a uno de ellos y el infeliz creyendo que lo iba a matar, desde la picota donde estaba amarrado le imploró perdón así:
--- No me mate, yo fui quien arrojó el cuerpo del finado de Cuchayo(Emilio Segundo), por que así lo ordenó Gustavo, y cuando amanezca los llevaré al lugar, es una peña muy peligrosa. pero en el día claro iremos por la quebrada, le juro que yo mismo buscaré lo que queda del finado, pero no me mate...
Cipriano, no iba a matarlos, y ya repuesto de la pelea y con la hemorragia controlada de su brazo izquierdo, le contestó:
--- No se preocupe amigo, yo no mato a gente indefensa, acepto su ayuda para más tarde ir a la peña, mi tío Emilio se lo va agradecer, pero por seguridad por que no te conozco no llevarás armas, con tu amigo serán nuestros guías y luego de encontrar los restos nos iremos, los voy a soltar para juntos cavar un hueco(hoyo) para sepultar los restos de Gustavo, yo no arrojaré su cuerpo por precipicios, él merece su sepultura.
Cipriano, soltó a los dos compinches del ahora finado Gustavo, quienes como dueños de casa, conocían la ubicación de palanas y barretas y se tomó la decisión de sepultar al costado del patio grande posterior de la casa.junto a un viejo árbol de chachacomo; les demandó cavar el hoyo casi la totalidad de la noche, ya al amanecer con el canto de gallos de las casas vecinas se dio sepultura a Gustavo.
El cadáver fallecido misteriosamente rápidamente se había hinchado y empezaba la descomposición y aumentó de peso, los allí presentes cargaron y soltaron el cuerpo hacia el profundo hoyo y lo sepultaron con sus chavetas, echándole tierra y tapándole totalmente, Cipriano después echó agua sobre la tierra movida para apelmazarla y sellar el sepulcro......
Continuaremos..............
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
ayabaca@gmail.com
ayabaca@hotmail.com
ayabaca@yahoo.com
Gustavo, era un criminal muy cruel y que nunca tuvo un viso de misericordia con sus rivales, simplemente mataba; pero ahora era él, quien estaba bajo el poder de otro cruel asesino; pero éste era diferente, nos referimos a Cipriano "El asesino que no mira atrás", él siempre daba opción al contrario(rival) para definir fuerzas en igualdad de condiciones.
Sin embargo, Gustavo no quiso esa posibilidad e intentó atacar a Cipriano sorprendiéndolo con una fuerte patada que fue dirigida al estómago pero solo llegó a la rodilla derecha que lo hizo tambalear pero sin perder el equilibrio.
Entonces, Cipriano soportando el tremendo dolor a su rodilla que tuvo que separarse y sentarse sobre una tarima para sobar y masajear la rótula; pero rápido se levantó y se dirigió con la chaveta abierta contra el tumbado cuerpo de Gustavo, todos los allí presentes pensaron que iba a terminar asesinando a Gustavo, pero no, le volteó el cuerpo y de un tajo le cortó la soga que le ataba las manos y lo liberó y le dijo:
--- Nada me cuesta terminar contra tu cuerpo, pero estás libre y lo haremos en pelea libre afuera en el patio, recoge tu chaveta, tuviste la opción de seguir viviendo pero lo desperdiciaste....
Todos los allí presentes no entendían tanta contemplación de Cipriano contra su peor enemigo Gustavo, y nada aseguraba que estando libre y armado el dueño de casa podría recuperar su arrogancia y vencer a Cipriano y se atrevió a contestarle así:
--- No te agradezco tu actitud de misericordia, nunca te la pedí, ahora estúpidamente me liberas, lo haz hecho por que te tiemblan las manos y por fin aceptas que yo soy el mejor, vamos a la pampa, allí me daré el lujo de vaciar tus tripas y más tarde los guishcos(gallinazos) se darán un gran banquete.
Gustavo con la rapidez de un rayo fue hasta la tarima donde estaban las chavetas y cogió dos y retó a Cipriano a seguirlo hacia afuera.
Afuera el ambiente estaba oscuro, era media noche, solo estaba amarrados en su picotas los compinches de Gustavo, no corría viento, repentinamente pasaron volando casi al ras del suelo dos lechuzas que ululaban anunciando muerte y sería para el "Rey de las Tinieblas" don Satán...
Cipriano, rengueando salió tras el ahora retador Gustavo, él también llevaba listas dos chavetas para equiparar las fuerzas; la ventaja era para Gustavo, por que él conocía el terreno. aún así Cipriano, tenía que definir fuerzas con su peor enemigo, así lo quiso él, que seguro Gustavo nunca le hubiese dado esa opción; ambos contrincantes caminaron varios pasos hasta la mitad del patio
Los siguieron Néstor y Tomás con los mechones de luz que alumbraban incipientemente el ambiente.
Entonces, Gustavo creyéndose que siendo el dueño de casa tenía la oportunidad de acabar con un rival que se atrevió sorprenderlo en su propia casa y blandiendo por los aires sus chavetas, dijo:
--- Cipriano, mi rival mas enconado que he tenido, siempre esperé esta ocasión de hacerte comer la tierra con la fuerza de mis puños armados...
Y haciendo uso de su rapidez casi increíble, se abalanzó contra el cuerpo de Cipriano, quien adivinó sus intenciones, las chavetas pasaron tan cerca del rostro de Cipriano, que gracias al quite de cuerpo y sus reflejos siempre listos lo salvaron de la primera embestida de Gustavo; que por desgracia para él, empleó demasiada energía y se fue en banda hacia adelante casi perdiendo el equilibrio.
Cipriano, muy experimentado en peleas contra retadores que él, los denominaba: "Toros bravos pero brutos", ahora se cuadró bien y esperó el regreso del contrario(rival), que efectivamente retrocedió Gustavo muy encolerizado y listo para atacar el cuerpo de Cipriano y se lanzó con las dos chavetas al frente con pasos grandes y al llegar al cuerpo de Cipriano creyendo que se había entregado, pero que solo lo esperaba con las chavetas en punta que teniendo el cuerpo de Gustavo a su alcance, se introdujeron: una por el costado derecho comprometiendo órganos internos y la otra se introdujo al estómago; pero también Cipriano fue herido con una chaveta de Gustavo que se introdujo en el brazo izquierdo y se quedó allí....
Gustavo, muy mal herido, perdió el equilibrio y cayó boca abajo, entregando su espalda, que Cipriano no se hizo de rogar se lanzó contra el cuerpo caído y lo chaveteó sucesivamente los pulmones que comenzaron a perder aire y por allí afloraba sangre en burbujas, ya no se pudo levantar Gustavo, solo estiró el cuerpo y murió.
Cipriano después de terminar contra Gustavo, se levantó ante la herida del brazo izquierdo, jalo la chaveta, rompió un pedazo de su camisa formando una tira y se amarró el brazo para controlar la hemorragia, pero como no era suficiente, fue a la sala cogió el jarro y miccionó allí y con esos orines lavó la herida de su brazo.
El desafío(duelo) de dos grandes bandoleros había terminado, con la contundente victoria de Cipriano, quien no iba ser lo mismo con los compinches, que se acercó a uno de ellos y el infeliz creyendo que lo iba a matar, desde la picota donde estaba amarrado le imploró perdón así:
--- No me mate, yo fui quien arrojó el cuerpo del finado de Cuchayo(Emilio Segundo), por que así lo ordenó Gustavo, y cuando amanezca los llevaré al lugar, es una peña muy peligrosa. pero en el día claro iremos por la quebrada, le juro que yo mismo buscaré lo que queda del finado, pero no me mate...
Cipriano, no iba a matarlos, y ya repuesto de la pelea y con la hemorragia controlada de su brazo izquierdo, le contestó:
--- No se preocupe amigo, yo no mato a gente indefensa, acepto su ayuda para más tarde ir a la peña, mi tío Emilio se lo va agradecer, pero por seguridad por que no te conozco no llevarás armas, con tu amigo serán nuestros guías y luego de encontrar los restos nos iremos, los voy a soltar para juntos cavar un hueco(hoyo) para sepultar los restos de Gustavo, yo no arrojaré su cuerpo por precipicios, él merece su sepultura.
Cipriano, soltó a los dos compinches del ahora finado Gustavo, quienes como dueños de casa, conocían la ubicación de palanas y barretas y se tomó la decisión de sepultar al costado del patio grande posterior de la casa.junto a un viejo árbol de chachacomo; les demandó cavar el hoyo casi la totalidad de la noche, ya al amanecer con el canto de gallos de las casas vecinas se dio sepultura a Gustavo.
El cadáver fallecido misteriosamente rápidamente se había hinchado y empezaba la descomposición y aumentó de peso, los allí presentes cargaron y soltaron el cuerpo hacia el profundo hoyo y lo sepultaron con sus chavetas, echándole tierra y tapándole totalmente, Cipriano después echó agua sobre la tierra movida para apelmazarla y sellar el sepulcro......
Continuaremos..............
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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