Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., el llamado "Robo del Siglo", que ocurrió el 22 de agosto del 1911, en el Museo de Louvre, que desapareció La Gioconda; la obra más famoso de Leonardo Da Vince, la noticia de aquellos tiempos fue mundial y se comentó por mucho tiempo, la policía y aficionados a la investigación policial elaboraron muchas conjeturas que fue robado por un sofisticado sistema del crimen. Incluso Se llegó a detener e interrogar a Apollinaire y a Picasso, por aquella época jóvenes artistas de vanguardia,
Sin embargo, a finales de noviembre, un rocambolesco suceso daría un vuelco a toda la
historia del robo: el director de la Galería de los Uffizi y un
marchante de arte fueron citados en un hotel de Florencia por un tal "Leonardo", que afirmaba tener en sus manos el retrato robado en París. Tras examinar el cuadro y comprobar su autenticidad, dieron parte a las autoridades y el ladrón fue detenido.
Peruggia había resultado ser un pobre desgraciado, lejos del
sofisticado ladrón de arte internacional que la gente había imaginado. Quizá por ello salió del paso cumpliendo apenas siete meses en prisión.
Técnica innovadora en la pintura original
Leonardo usó la innovadora técnica del sfumato para
pintar el famoso retrato. La expectación, pero también las
incógnitas han acompañado a este cuadro único desde su creación. Arriba,
la tabla y el marco colgados en el Louvre.
FOTO: Scala, Firenze
https://www.nationalgeographic.com.es/historia/grandes-reportajes/mona-lisa-enigmas-obra-maestra-leonardo-da-vinci_12799https://www.nationalgeographic.com.es/historia/robo-siglo-desaparicion-mona-lisa_12781
En 1911, el famoso cuadro de Leonardo Da Vinci desapareció del Museo del Louvre. El robo de la Gioconda, sin duda uno de las obras más importantes del genio italiano, fue catalogado como el robo del siglo
Con el robo llegó su fama
Tras el robo, los visitantes del Museo del Louvre
se multiplicaron. La mayoría quería observar el espacio vacío que había
dejado el ladrón en el Salón Carré del museo. La Mona Lisa se convirtió
entonces en un auténtico icono popular, reproducido hasta la saciedad,
cuya fama aún perdura, incluso entre los artistas.
FOTO: Rue des Archives / Album
Las sátiras callejeras
Un cantante callejero vende ¿La has visto? La Gioconda,
una de tantas canciones cómicas que proliferaron tras el robo. Los
meses pasaban y nada se sabía del cuadro. Empezó a cundir la
desesperación: ¿Dónde estaba La Gioconda?
FOTO: Roger-Viollet / Aurimages
De regreso a casa
El embajador de Francia, varios ministros italianos y el director del Louvre posan en Roma junto a la Mona Lisa en la ceremonia de retorno del cuadro a Francia en diciembre de 1913.
FOTO: Bridgeman / ACI
Portada del Domenica del Corriere
La prensa de la época siguió el robo y
su evolución con mucho interés. El cuadro se reprodujo en multitud de
portadas, hecho que contribuyó a la mitificación del mismo.
FOTO: Leemage / Prisma Archivo
Reproducciones cómicas
La Gioconda se despide de los "mirones" para ir al encuentro de "mi vinci" en esta postal.
FOTO: Josse / Scala, Firenze
La noticia en el ABC
La prensa española también se hizo
eco de la sorprendente noticia. A pesar de que el mismo día del robo
nadie se dio cuenta, al día siguiente, la noticia de que el cuadro había
sido sustraído estaba en boca de medio mundo.
FOTO: ABC. Jueves 24 de agosto de 1911
¿Rodeada de seguridad?
Foto de la ficha policial de Vincenzo
Peruggia. A pesar de las múltiples especulaciones sobre un cerebro
oculto del robo, tan sólo se condenó al italiano. Peruggia había
resultado ser un pobre desgraciado, lejos del sofisticado ladrón de arte
internacional que la gente había imaginado. Quizá por ello salió del
paso cumpliendo apenas siete meses en prisión.
FOTO: Bridgeman / ACI
Un esperado retorno
Esta caricatura muestra la expectación con que se esperaba la llegada de la Mona Lisa a Francia tras ser recuperada en Italia.
FOTO: Rue des Archives / Album
Redacción
El robo del siglo, la desaparición de la Mona Lisa
La mañana del martes 22 de agosto de 1911, el personal del Museo del Louvre se percató de que la Mona Lisa había desaparecido. No es extraño que el día anterior nadie se diera cuenta, ya que el lunes era día de cierre. A eso hay que unir que las obras solían moverse para ser fotografiadas, por lo que, en un primer momento, aquel hueco vacío no alarmó a nadie. Al día siguiente, la noticia de que el cuadro había sido sustraído estaba en boca de medio mundo; el robo del retrato de Leonardo copó la portada de los diarios de todo el planeta.La noticia de que el cuadro había sido sustraído estaba en boca de medio mundo; el robo del retrato de Leonardo copó la portada de todos los diariosAl principio, los investigadores pensaron que podría tratarse de un chantaje y que el ladrón pediría un rescate. También se sugirió que era una llamada de atención ante las escasas medidas de seguridad del museo. Se llegó a detener e interrogar a Apollinaire y a Picasso, por aquella época jóvenes artistas de vanguardia, rebeldes que clamaban contra las anquilosadas instituciones artísticas y que, ciertamente, habían estado implicados en la sustracción de alguna pieza del museo. Sin embargo, los meses pasaban y nada se sabía del cuadro. Empezó a cundir la desesperación: ¿Dónde estaba La Gioconda?
Al mismo tiempo, el escándalo hizo que la Mona Lisa adquiriera de golpe una popularidad universal. Tras la reapertura del museo, los curiosos hacían cola para visitar el espacio vacío que antes ocupaba el retrato de Leonardo. La pintura aparecía reproducida por doquier: ocupaba las páginas de la prensa –que seguía la crónica del robo día a día–, se empleaba como reclamo publicitario y hasta dio lugar a películas sobre el robo. Como afirma R. A. Scotti en El robo de la sonrisa: "Mona Lisa abandonó el Louvre siendo una obra de arte y volvió convertida en un icono".
Rescate y retorno de la Gioconda
En 1913 se había perdido toda esperanza de encontrar el cuadro. La Mona Lisa ya ni siquiera aparecía en el catálogo del Museo del Louvre. Sin embargo, a finales de noviembre, un rocambolesco suceso daría un vuelco a toda la historia del robo: el director de la Galería de los Uffizi y un marchante de arte fueron citados en un hotel de Florencia por un tal "Leonardo", que afirmaba tener en sus manos el retrato robado en París. Tras examinar el cuadro y comprobar su autenticidad, dieron parte a las autoridades y el ladrón fue detenido.El ladrón quería devolver el cuadro a Italia, su verdadero hogar, pues creía que formaba parte de las obras de arte que Napoleón se había llevado a FranciaEnseguida se desveló la identidad de "Leonardo". Se trataba del italiano Vincenzo Peruggia, antiguo trabajador del Louvre, que argumentó una razón política para el crimen: quería devolver el cuadro a Italia, su verdadero hogar, pues creía que formaba parte de las obras de arte que Napoleón se había llevado a Francia a principios del siglo XIX. Antes de volver a Francia, la obra se expuso en Florencia, Roma y Milán, captando la atención de numeroso público. Finalmente, el 4 de enero de 1914 regresó a París. Peruggia había resultado ser un pobre desgraciado, lejos del sofisticado ladrón de arte internacional que la gente había imaginado. Quizá por ello salió del paso cumpliendo apenas siete meses en prisión.
Copias de la Mona Lisa
Sin embargo, la duda sobre la existencia de un compinche o algún otro ideólogo del delito ha alentado todo tipo de teorías. En 1932, el reportero norteamericano Karl Decker afirmó haber conocido en Casablanca en 1914 a un misterioso marqués llamado Eduardo de Valfierno, que le habría contado el verdadero trasfondo del robo más famoso del siglo: el plan era realizar diversas copias que, pasando por verdaderas, se habrían vendido a varios coleccionistas incautos. La historia nunca pudo ser probada, por lo que el misterio perdura.NATIONAL GEOGRAPHIC
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
Excelente ! Gracias por compartir ! Felicidades y bendiciones ! Buen inicio de semana !
ResponderEliminarHola don Guillermo mi dilecto amigo permitame saludarlo y al mismo tiempo felicitarlo por su encomiable labor cultural en parabien de su pueblo Ayabaquino que tuvo la suerte de tener un hijo predilecto preocupado por el quehacer cultural convirtiéndole en paradigma digno de imitar que pocos hombres lo hacen bueno que sea ejemplo de LA juventud estudiosa de Ayabaca don chema su amigo jgsa
ResponderEliminarMuchas gracias Don José Guillermo Serrano Arrasco. por su comentario , tal vez inmerecidos elogios, sólo estoy contribuyendo con un granito de arena, en bien de la cultura, que desgraciadamente en las nuevas enseñanzas de la juventud peruana; ya no se menciona a la Historia Universal, materia básica para conocer y estudiar las diferentes etapas y épocas de la civilización humana, abrazos Chema.
ResponderEliminar