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domingo, 29 de marzo de 2020

La Historia del Amor Cruel : Capítulo CDXLI.- Olzagon, ya en Tapal; se aloja en el Hotel "El Ensueño del Descanso", que le sugirió la empresaria Zoraida Fuentes Plata...........

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel, entre Iarma y Olzagon, y como informamos en el capítulo anterior; el joven vendedor Olzagon, fue enviado a Tapal por su empresa Import & Export S.A., atendiendo un pedido de la cliente Zoraida Fuentes Plata, quien es la dueña de la empresa "Comercial Tapal"; él, ya llegó a su destino y fue recibido por la misma empresaria, quien le preguntó al recién llegado si había separado alojamiento en un hotel, y ante la negativa del joven, ella le dijo que la acompañe por que  tenía el hotel que el joven deseaba. 

Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen las consistencias del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices. Fuente: Archivos del blog. Obra Literaria reconocida con Derechos de Autor, según Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI.

Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.

Zoraida Fuentes Plata, tuvo cierta disconformidad al observar y conocer al joven vendedor en cuanto a su estatura, ella era muy alta y le sobrepasaba por lo menos unos 10 centímetros a la talla del joven; pero reaccionó y ella misma se corrigió mentalmente: " Que te pasa tonta, que te interesa la talla del joven, tendrás por algo un menor peso encima", sin hacer ni decir nada de sus pensamientos, ella actuó con naturalidad, le hizo salir del terminal de buses al joven y lo llevó hasta su camioneta estacionada y al llegar le dijo:
--- Por favor suba  a mi camioneta, nos iremos a separar el alojamiento.
El joven puso en la cajuela (maletera) su útiles, maletas y regalos, los guardó y sé sentó en el asiento del copiloto, ella subió arranco el motor y partieron rumbo al alojamiento.
En el trayecto, hubo conversación no muy fluida, pero si lo suficiente necesaria, es que recién se conocían, pero ella muy inquieta por conocer algo más de él,  si le preguntó:
--- Joven Olzagon, dígame: ¿Usted acostumbra acostarse muy temprano? Le hago la pregunta por que esta zona es muy calurosa y el bochorno obliga estar fuera de la cama.
Olzagon, muy sorprendido por el tipo de pregunta que le hizo la empresaria, de inmediato le contestó:
--- No, señorita Zoraida, estoy acostumbrado acostarme muy tarde, por que estudio por las noches en la Universidad: aunque como soy nuevo aquí y no conozco a nadie a excepción de usted, me iré temprano a la cama.
Era la respuesta esperada por Zoraida, quien era una dama muy atractiva de talla alta, con rostro ligeramente ovalado, ojos de color pardo, cejas negras pobladas, frente corta, cabello negro ligeramente ondulado; su cuerpo era proporcional a su talla, senos no se podían percibir por que llevaba un blusa muy suelta, cintura ligeramente espigada, glúteos muy abultados y muy sensuales. Pues, era un portento de hembra.
Ella, tenía mucho interés de sellar la amistad, ese mismo día y le contestó:
--- Creo, que usted llegó en el día preciso, y el momento adecuado, por que hoy en Teatro Regional, hay una presentación de un Concierto de Música Vernacular,  luego y después de la presentación, y  por invitación de los organizadores hay una cena informal; por lo queda invitado y será el caballero que me acompañará. ¿Está de acuerdo con la invitación?
Olzagon, realmente estaba cansando por el largo y agotador viaje de casi 08 horas, pero no podía rechazar la invitación y justamente a la empresaria con quien iba a estar durante 15 días y le contestó:
--- Será un honor compartir con usted, gracias por la invitación señorita Zoraida, pero antes necesito tomar una ducha en el hotel y cambiarme de ropa para estar a tono con el concierto.
Zoraida Fuentes Plata, se sonrió por que todo lo iba saliendo a su medida y siguió con los interrogatorios y fue la nueva pregunta:
--- Joven Olzagon, dígame: ¿Tiene novia usted?
Olzagon, sintió un escalofrío en todo su cuerpo, por que le recordó la recomendación del Supervisor de Ventas Homero, de no comprometerse en relaciones sentimentales con las clientes y le contestó con una mentira directa para cortar por lo sano, algún interés de la empresaria y le dijo:
--- Si, señorita Zoraida, tengo novia oficial y ya le pedí la mano a sus padres, justamente lo hice dos días antes de viajar a esta ciudad.
Zoraida Fuentes Plata, sintió como un balde agua fría que le derramaron en todo su cuerpo, ante la desilusión al escuchar que el joven estaba comprometido y se dijo en la mente: "Ni modo, el jovencito tiene novia", pero su ágil mente de inmediato le reportó otra idea: " Pues, no te preocupes, él estará de novio, pero no está acompañado por ella, él vino solo". Ella se sonrió de mala gana y sólo pudo decir:
--- Pues, lo felicito, siendo tan joven ya se comprometió.
Y casi al final, tanto se habían concentrado en la conversación que no sintieron el trayecto del viaje y llegaron a una zona residencial con casonas muy grandes que parecían palacios, con jardines muy bien cuidados, calles completamente limpias; la conductora se estacionó frente a una casona que parecía un palacete, y antes de bajar le dijo a su copiloto:
--- Nos bajamos aquí, el "hotel" que le mencioné es mi casa de descanso semanal, allí hay personal de servicios y tendrá todas las comodidades que usted va a disfrutar.
Olzagon ante la sorprensiva oferta de la residencia de la empresaria, sintió en todo su organismo una saturación de calor sofocante; por que él no tendría libertad en su trabajo y sujetarse  a parcializarse en la gestión de las acciones que haga, no se podía permitir y le tuvo que contestar así:
--- Señorita Zoraida, mi gratitud y reconocimiento pero no puedo aceptar su casa como mi alojamiento, no es ético para mi; además, la empresa que me envió paga mis viáticos; su casa es muy hermosa, por favor entienda no rechazo su gentileza, sino que deseo libertad de acción y nunca lo podría obtener desde su casa, me temo que mi empresa lo vería muy mal si hago esto, ellos son muy rigurosos en la independencia de sus acciones.
Zoraida Fuentes Plata, sintió una nueva desilusión con la negativa del joven en rechazar su casa; pero si lo entendió, y  tal vez así será mejor para los planes de ella, por que tenía la última carta bajo la manga, ella era propietaria de un hotel de categoría intermedia con 04 estrellas, y demostrando seguridad y no  encono por el rechazo, le respondió:
--- ¡¡¡ Caramba !!! Joven Olzagon ha rechazado mi vivienda y le entiendo sus razones, por lo que nos iremos de la búsqueda del primer hotel que encontremos para que usted esté conforme.
Olzagon, muy aliviado por la respuesta de la empresaria, le contestó:
--- Gracias Señorita Zoradia por su comprensión, usted entenderá, que así son las reglas de mi trabajo, le aclaro  que no hay nada personal ante mi negativa, y como me hubiese gustado conocer su residencia de descanso semanal...
Zoraida Fuentes Plata, encendió de nuevo el motor de su camioneta y partieron rumbo al hotel, que estaba escasamente a unos 200 metros de su vivienda, y se llamaba Hotel "El Ensueño del Descanso"; era un majestuoso edificio de 06 plantas, completamente iluminado en el exterior (ya eran las 18:00 horas del día), la conductora se estacionó frente a la puerta principal, y de inmediato vino un conserje y le saludó así:
--- Buenas tardes señorita Zoraida, sea usted y su acompañante bienvenidos, me entrega las llaves del carro, mientras ustedes separan su dormitorio.
Zoraida Fuentes Plata, de inmediato aclaró que ella no era la huésped, sino su acompañante y le contestó:
--- Gracias por la amabilidad, pero no soy la huésped, es el joven quien tiene su equipaje en la cajuela, por favor estacione la camioneta en la playa y suba el equipaje a la recepción, allí lo esperamos.
Zoraida Fuentes Plata, acostumbrada hacer y deshacer como ella mejor le parecía, no lo estaba logrando con el recién llegado, pero mirándolo como amabilidad, le dijo:
--- Bienvenido joven Olzagon, creo que este hotel le gustará.............
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

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