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domingo, 31 de enero de 2021

La Historia del Amor Cruel : Capítulo CDLXXXV.- Olzagon; suelta un "ataque de palabreo amoroso" y convence a Amelida, pasar la noche con él, en el hotel donde se aloja y ella gustosa acepta....

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel, entre Iarma y Olzagon, y como informamos en el capítulo anterior; la empresaria Zoraida Fuentes Plata, sintió tremenda decepción ante el rechazo de Moisés Brenzitti, gerente del Banco de Fomento Comercial, quien no le aceptó almorzar con ella; viéndolo desde el protocolo bancario, el funcionario hizo bien en rehusar, por que hay en gestión un préstamo cuantioso que ha solicitado Zoraida, pues dejemos a Zoraida con sus desilusiones y sigamos al joven Olzagon y la bella secretaria Amelida, quienes almorzaron juntos a pedido de Zoraida; el joven vendedor creyendo que Zoraida le puso en bandeja de plata a su más bella y hermosa secretaria, él intentó primero en tantear la posibilidad de establecer una relación sentimental y lo encontró con una ventana abierta y se lanzó declarándole su amor, pero ella no pudo responder por que llegó el chofer de la camioneta para recogerlos y llevarlos a la empresa "Comercial Tapal"....

Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen las consistencias del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices. Fuente: Archivos del blog. Obra Literaria reconocida con Derechos de Autor, según Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI.

Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.

Olzagon, al declarar su amor a Amelida, se pensó que cometió varios errores, mostrándose tal vez soberbio de ser la única solución, que ella tenía por la decepción sufrida de su novio que la traicionó, era un camino equivocado, ya que herir sentimientos femeninos es quizá el mayor acto de un patán, imbécil y rimbombante conquistador; cosas que nunca mostró Olzagon en sus múltiples conquistas, él era siempre un caballero lleno de un cúmulo de buenas costumbres, con principios y valores que conmovía a la mujer que intentaba conquistar.
Olzagon, pensaba que había cometido la peor estupidez de su vida; ya que en el trayecto desde el restaurante a la empresa "Comercial Tapal", la pareja no cruzó palabra alguna, ambos completamente serios y compungidos, ni siquiera hubo alguna mirada insinuante de ninguno de los dos, hasta que llegaron a la empresa "Comercial Tapal", cada cual fue a su lugar de trabajo.
Amelida, al llegar a la Gerencia donde ella trabajaba, ya estaban sus compañeras y la jefa Zoraida, ella las saludó y tomó su escritorio y empezó el trabajo; Zoraida con cierto disimulo observaba de reojo a Amelida y al notar que seguía sufriendo, ya que ella si conocía la terrible decepción amorosa que sufrió, ella se dijo así misma: "Creo que el joven Olzagon, cometió algo imprevisto que hirió más Amelida y él está libre esta noche, pues será para mi.." Ella intentó seguir con sus pensamientos, pero inesperadamente se apareció Olzagon, quien saludando a todas y en especial a Zoraida, le dijo:
--- Señorita Zoraida, quisiéramos conocer su opinión en el almacenamiento de algunos productos completamente nuevos, que no hemos decidido su ubicación, por que no tenemos datos de su aceptación del consumidor y usted con su vasta experiencia conoce esos detalles comerciales.
Zoraida, quien estaba muy atareada y no tenía tiempo suficiente como para ir hasta las ampliaciones comerciales, agradeciendo la deferencia de Olzagon, le contestó:
--- Gracias joven Olzagon, por tomar en cuenta mi opinión y creo que Zózimo, ya conoce el gusto de los clientes; más bien quisiera información de las guías de remisión que aún no han llegado a la Gerencia.
Y dirigiéndose a Amelida, le dijo:
--- Por favor Amelida, ve con el joven Olzagon a las ampliaciones y reclama todas las guías de remisión y dile a Zózimo que apelo a su capacidad y él ordene la ubicación de los productos; claro está, con la opinión del joven Olzagon en cuanto a los productos del proveedor Import & Export S.A.
Amelida, sintió un escozor en todo su cuerpo y eso ya era pasión; al tener que ir acompañando a Olzagon, quien se le declaró y que ella no desea aceptar por la forma  como se expresó en su declaración (aún así ella lo deseaba), pero no contestó se puso de pie desde su escritorio y fue junto a Olzagon y le dijo:
--- Joven Olzagon, una vez más tengo el honor de acompañarlo: ¿Nos vamos?
Olzagon, quien estaba sumamente arrepentido de su estúpida declaración de amor hacia Amelida; él, creyó que Zoraida por segunda vez, le daba la oportunidad de conquistar a la  mujer más bella, por lo que esta vea no iba a cometer errores, y le contestó:
--- Es un honor para mi humilde persona, ser acompañante de la bella secretaria, pues nos vamos.
Zoraida, escuchó todo, pero se hizo la disimulada en sus trabajos y no pestañó, y era cierto, ella le puso  a su bella secretaria; con el tremendo dolor en su corazón estaba obligada a respetar el compromiso de no involucrarse más con Olzagon.
El joven vendedor Olzagon, de reojo observó a Zoraida, quien estaba concentrada revisando documentos seguros de vital importancia, que nunca le levantó la mirada, era la afirmación tácita que Olzagon se entregue de lleno a conquistar a Amelida.
Ambos personajes, salieron de la Gerencia, y ya desde allí Olzagon, lo primero que haría es pedir disculpas a Amelida y cuando avanzaron por los almacenes  y sin que nadie pueda oírlos, le dijo:
--- Amelida, por favor me disculpará por mi imprudencia de las expresiones que te hablé en el restaurante, hubo demasiada presunción mía, creo que en vez de ayudarte, te he deprimido más, considero que todo lo expresado fue un grave error.
Pero, para la consideración de Amelida no estaba en sus planes desperdiciar esta dichosa declaración, y contra toda sospecha en los pensamientos de Olzagon, o lo que él creía; a ella si se había gustado la declaración del pretendiente y lo tomó como algo serio, que sane como un remedio amoroso, el profundo dolor que sentía en su corazón; claro que si, no le gustó las últimas palabras de esa declaración, pero que no le hirieron sino que las tomó como expresiones irónicas y se apresuró a contestar así:
--- Jovencito, usted primero peca de presunto enamorado y después de arrepiente de sus actos, para su tranquilidad no hay nada que perdonar, hizo bien en manifestar lo que su corazón le dictaba y le aseguro que lo expresó bien; ahora, me toca a mi responder si estoy dispuesta aceptar tan amorosa declaración y mi respuesta es: si me gustó, pero no soy una mujer fácil, dele tiempo y recibirá mi respuesta, y no le puedo adelantar cual será....
Olzagon, justamente lo que no tenía era tiempo, por que le quedan escasos días en Tapal, claro que le aumentaron su estadía por unos 45 días, pero él, tendrá que viajar a otras ciudades, aún así, él estaba seguro que ella si deseaba ser su amante, pero tenía que ser más contundente y le contestó:
--- Amor de mi vida, lo que no tengo es tiempo a mi disposición, todo está calculado hasta la inauguración de las tiendas, más unos días que tengo que buscar nuevos clientes, pero no solo en Tapal, sino en los distritos y otras ciudades; que te parece si esta misma noche nos vamos a mi hotel para demostrarte lo mucho que te amo, y no precisamente para hacer sexo, sino para entregar nuestros corazones a disfrutar el amor con caricias, abrazos y besos, tu sabes el amor es pasión y todo cuanto haya amor hay dicha; creo que la maravilla de la Tierra fue crear el amor entre los seres que sin conocerse antes ya se amaban, tal como sucedió contigo, que sin conocerte tuve un sueño que conocía a la mujer más bonita y amorosa de la Tierra y vaya que la encontré y se llama Amelida.
Con semejante verborrea de Olzagon, quien extasió a Amelida, quien si quería con él, pero siendo una joven recatada se tomaba su tiempo para no aparentar ser una mujer fácil y pasó por su mente este pensamiento: "Acéptale, es un joven que te sacará del corazón esa amargura que te dejó tu ex novio, y como él mismo te dijo: vive la vida, no dejes pasar la oportunidad..." y ella recapacitando, le contestó:
--- Escúcheme jovencito, me ha conquistado por ese exquisito verbo que expone, que no me queda otra cosa que aceptar, pero si le aclaro que me fascina la curiosidad de conocer un habitante de la Capital manifestando su amor a una provinciana; dígame si puede acompañarme a mi casa y asegurar a mis padres que somos compañeros de trabajo y que haremos tiempo extra durante la noche. ¿Qué dice lo haría por mi?
Olzagon, se dio un pellizco al brazo izquierdo con la mano derecha para saber si estaba durmiendo y soñando un dulce sueño, pues le dolió si era verdad, él se sobre paró y le contestó:
--- Amelida, yo por usted iría al mismo infierno y destruiría a Satanás, si con ellos consigo su amor, no estoy exagerando, pero recuerde si me invita a su casa es asumir un compromiso serio; que quede bien claro, nosotros no somos novios, si somos dos jóvenes que nos gustamos y tal vez el tiempo lo dirá hasta donde llegaremos, con el mayor placer la acompañaré hacer esa mentira amorosa.. jajajajajajaja
Amelida, también acompañó con la carcajada que lo hizo tan fuerte, como despejando de su adolorido corazón la angustia y el sufrimiento acumulado por el grave episodio de la traición de su ex novio; ya ella decidió que pasará la noche con Olzagon y cuando la mujer quiere nadie la detiene; además, si efectivamente le gustaba el joven vendedor y ella seguía pensando: "¿Cómo este joven hizo para conquistar el corazón de la jefa (Zoraida)?.." sé que me estoy metiendo en graves problemas, pero ya no se puede detener los designios de mi corazón.."
Tan concentrada estuvo Amelida en sus pensamientos, que no se había dado cuenta que ya habían llegado a las ampliaciones comerciales y justamente Zózimo la saludó así:
--- Buenas tardes señorita Amelida: ¿En qué puedo servirla?
Amelida, como despertando de un largo sueño, contestó el saludo y le dijo:
--- Señor Zózimo, dice la señorita Zoraida, que apela a su buen criterio y profundo conocimiento de los productos para su ubicación y que no es necesario que ella venga y además, ella necesita información de las últimas guías de remisión, que aún no han llegado a la Gerencia, entréguemelas para llevarlas.
Zózimo, quien también estaba fascinado por la belleza de Amelida, rápidamente hizo un fajo todas las guías, que ya fueron chequeadas por él y las entregó a Amelida....................
Continuaremos..................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

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