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domingo, 16 de abril de 2023

La Historia del Amor Cruel: Capítulo DXCVIII.- Verónica del Carpio y el joven Olzagon, establecieron el contenido de un contrato de provisiones, el joven ya firmó; mientras tanto, don Ernesto del Carpio y el técnico Benito Martín se ponen de acuerdo para establecer el costo del desmontaje de las máquinas paralizadas...

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel, entre Iarma y Olzagon y como informamos en el capítulo anterior; la hermosa joven, quien se llamaba Verónica del Carpio, era la hija del dueño de la Fábrica Metalmecánica del Carpio, ella recogió a Benito Martín, quien era un técnico especialista en desmontaje de maquinarias, los siguió Olzagon a pedido de Elsa Martinez Linares, para que firme un documento para la provisión de accesorios y repuestos; ellos llegaron a un gigantesca construcción; Verónica del Carpio como anfitriona los hizo ingresar a la fábrica.... ..sigamos la historia...........


Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen las consistencias del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices.
Este es el símbolo de la novela: La Historia del Amor Cruel.
Fuente: Archivos del blog: A vuelo de un Quinde.                                                
Obra Literaria reconocida con Derechos de Autor, según: Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI

Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.

El Jinete y su noble caballo que le salvó la vida..(2)
Chiclayo - Perú
13/04/2023
Derechos de autor reservados.

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Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
Muchas gracias poetisa Silvia Argueta, por conceder tan impresionante Certificado, que constituye un altísimo honor haber sido galardonado, lo recibo con humildad, y lo tomo como un incentivo para seguir adelante; asumiendo mi compromiso de seguir aportando con mis modestas letras, abrazos Chema.

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Muchas Gracias por ser, estar y compartir tu bellísima inspiración.
Eternamente agradecidos
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Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
Muchas gracias poetisa Norma Beatriz Alvarez Torres, por conceder el hermoso pergamino, que es un altísimo honor recibir, lo acepto con humildad, es para mi; un incentivo para seguir adelante, y asumo el compromiso de seguir aportando con mis modestas letras, abrazos Chema.

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Muchas gracias poeta Wilmar Peréz , por conceder el hermoso pergamino como Destacado de Oro, que es un honor recibir semejante galardón, lo acepto con humildad y asumo mi compromiso de seguir aportando con mis modestas letras, abrazos Chema.

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Muchas gracias poeta Wilmar Peréz , por  conceder tan impresionante galardón como Destacado de Oro, que constituye un orgullo recibirlo, siempre seré un humilde y así lo aceptaré, nada es más grande en la vida que recibir un incentivo, para mejorar y seguir adelante, asumo el compromiso de seguir aportando con mis modestas letras, abrazos Chema.

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Muchas gracias poeta Wilmar Peréz, por conceder el impresionante pergamino con Reconocimiento de Honor, que lo acepto con humildad, mi gratitud a usted por incentivar a los poetas con galardones, que nos animan a seguir adelante, no se busca ser premiado, es sólo el estímulo que nos abre el camino de la lucha, asumiendo el compromiso de seguir aportando mis modestas letras, abrazos Chema.

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Muy buenas noches, el mundo nos deja muchas enseñanzas a través de la literatura, la escritura y construimos un tejido social sobre la cual hay que seguir planificando, uniendo a todas las naciones para que la paz realidad.
El Instituto Cultural Colombiano CASA POÉTICA Magia y Plumas entrega este importante reconocimiento otorgado a: Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui, por su compromiso, dedicación, constancia permanente y aporte a la paz y al mundo universal, construyendo un tejido social con las comunidades, enriquece la historia y los nuevos lenguajes, muchas felicidades y que sigan los triunfos.
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
Muchas gracias poeta Cristian Camilo Serna Villada, por conceder tan impresionante galardón: Medalla del Premio Latinoamericana de Literatura en Lengua Castellana Miguel de Cervantes Saavedra; que fue toda una sorpresa muy grata ser parte de esta distinción, que la acepto con humildad, asumiendo mi compromiso de seguir aportando con mis modestas letras, abrazos Chema.

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Wilmar Peréz 


Muchas gracias poeta Wilmar Peréz, por conceder tan impresionante pergamino como Autor Distinguido, que lo considero como un incentivo, es realmente una sorpresa, recibir tantos premios suyos; mi gratitud a su generosidad, lo acepto con humildad y asumo el compromiso de seguir aportando con mis modestas letras, abrazos Chema.

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Hermoso texto literario gracias por compartir su excelente pluma que en galardona con esencia de poeta felicidades

Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
Autor
Silvia Montano , muchas gracias poetisa, por sus encantadoras letras y por conceder tan impresionante pergamino con Reconocimiento, que es un altísimo honor recibir, lo acepto con humildad y asumo el compromiso de seguir aportando con mis modestas letras, abrazos Chema.

Verónica del Carpio, hizo pasar a la sala de recibo a Olzagon y al técnico Benito Martín, allí esperaron por un rato, hasta que se abrió una puerta y apareció un señor ya envejecido, era don Ernesto del Carpio quien como dueño de la Fábrica Metalmecánica del Carpio, los saludó y dijo:
--- Es un placer conocer al señor técnico, habrá mucho trabajo, por que tengo muchas máquinas paralizadas, así que acompáñeme a visitar a los talleres.
En efecto, el fabricante y el técnico, luego de abrirse una puerta metálica ingresaron al destino de su sendero, se quedaron Olzagon y Verónica del Carpio, ella inició el diálogo y le dijo:
--- Señor Gerente, creo que vamos ir avanzando, ya que, lo que el técnico haga, será cosa de varios días, semanas o tal vez meses; por lo que iré a la oficina por los documentos para firmar un acuerdo.
Verónica del Carpio, se levantó, caminó y le dio la espalda que fue una provocación con un cuerpo tan precioso, provisto por unos anatómicos glúteos, ella abrió una puerta, ingresó, cerró la puerta y desapareció.
Verónica, se tomó su tiempo, que después de varios minutos, ella apareció de nuevo con una carpeta en mano llena de documentos impresos con renglones vacíos, ella dijo:
--- Señor gerente, es norma de nuestra empresa firmar compromisos con los proveedores, aquí tiene estos documentos; por favor revíselos y llene los renglones vacíos, es información básica que usted tiene que proporcionarnos, le tomará tan sólo unos minutos.
Verónica, le hizo pasar a un escritorio que estaba ubicado al costado izquierdo de la sala, allí se sentó el joven y comenzó a leer el documento, que le pareció que era un procedimiento correcto, ya que algo parecido hizo en la cadena de Supermercados "Mercado Gigante", incluso en Tapal, también firmó esos documentos de compromiso empresarial.
Sin embargo, era una joven mujer algo mayor que Olzagon y también tenía sus deseos; ella abandonó de nuevo el recinto dándole la espalda mostrando tan provocativo cuerpo, era una tentación casi incontrolable no desear tanta hermosura femenina, y vaya que ella lo había hecho a propósito, por que cuando desapareció, ella pensaba así: 
"Este jovencito, está como a pedido; yo conocí a alguien en París, pero el muy estúpido se echó para atrás, en cambio aquí en mi país, acabo de conocer alguien que me gustó, yo no tengo la culpa que los dioses me hayan dotado de un bello cuerpo".
Verónica del Capio, con ese instinto femenino, si se había dado cuenta que el joven gerente la seguía con sus miradas lo que ella exhibía con primor; pero, ella razonó de nuevo y se dijo:
"Por ahora, nada con el corazón, todo será firma de documentos empresariales".
Verónica, ingresó a su oficina personal y sacó de allí un tampón y sellos y regresó a la sala de recibo, donde encontró a Olzagon leyendo la información que le pedían los documentos, quien al llegar le dijo:
--- Señor gerente, seguro que ya leyó el documento y comprobó que sólo requerimos información básica, que nos unirá a mantener una relación comercial en el tiempo.
Olzagon, rápidamente llenó los renglones vacíos y firmó en la señal para él, sacó su sello lo humedeció en el tampón que había traído Verónica y lo aplicó al documento, eran cuatro documentos, dos de los cuales eran copias; al finalizar, Verónica, le dijo:
--- Señor gerente, le seguiré robando su valioso tiempo, ya que el firma documentos es mi padre, lo esperaremos por un momento, por que tiene que regresar con el técnico, para que se pongan de acuerdo en los honorarios, turnos de trabajo y ayudantes, que necesitará el desmontaje de las máquinas; le juro, que a mi me gusta la mecánica, por esa razón estudio en París, para en adelante formar un equipo técnico con nuestro personal bajo mi dirección.
Olzagon, quien estaba asombrado de lo que escuchaba de los labios sensuales de Verónica, quien además de ser bonita, era toda una ejecutiva que pensaba con pundonor en su fábrica y le respondió:
--- Señorita Verónica, estoy fascinado por la responsabilidad suya en dirigir la fábrica, seguro que su señor padre se sentirá orgulloso de sentir en la continuación perpetua de esta fábrica, ya que usted se está preparando para el futuro, reciba mis felicitaciones, ya que es muy raro observar en estos tiempos su dedicación, que muchos otros hijos de fabricantes prefieren la vida holgazana antes que el desarrollo empresarial.
Verónica del Carpio, apreció los elogios de Olzagon y le agradeció:
--- Muchas gracias señor gerente por sus elogios, los acepto con humildad; pero, es mi trabajo, por que soy la única hija de siete hermanos más, nacidos en diferentes mujeres; ya que mi padre, un hombre trabajador incansable, pero si tenía sus debilidades en enamorarse de sus secretarias, que cuando las  empreñaba ellas dejaban de trabajar para criar al hijo; yo misma  soy hija de la última secretaria, quien fue mi madre que murió después de mi nacimiento, por primera vez mi padre cambió y me recogió, asumiendo mi crianza con la ayuda de una hermana, que en esos mismos días ella; había parido y perdió a su bebé y a su marido; yo me quedé algo así como un reemplazo, por lo que tomé leche de mi tía, quien se encariñó conmigo y me crio como si fuese su propia hija; pero, ella falleció hace exactamente un año, sufrió un accidente en un viaje de turismo.
Olzagon, muy conmovido por lo que escuchó de Verónica del Carpio, que sin proponérselo ya conoció toda su vida; pero, si se interesó por el resto de hermanos, quien le dijo:
--- Señorita Verónica, es muy conmovedora su historia personal, lo importante que el destino señaló a usted ser la continuadora de esa fábrica; sus hermanos, tal vez en algún momento también se integrarán a la grandeza empresarial; claro está hoy no lo están, pero mañana si estarán codo a codo con usted dirigiendo a la fábrica cuando su señor padre se jubile.
Pero, no era así, los hermanos en su mayoría hombres, quienes recibieron todas las atenciones de su padre que sin convivir con ellos, siempre los protegió; pero, las respuestas de algunos de ellos fue que eran vagos y viciosos; solamente tres de ellos viajaron al extranjero y tuvieron éxito que ya hicieron su vida y no tienen ningún interés en la fábrica; justamente uno de ellos vive en París, y adora a su hermanita Verónica, ejerció su posición para que ella estudie allí; él sabe que ella es muy inteligente y tiene capacidad empresarial y llevará adelante a la fábrica, le contestó:
--- Señor gerente, hay un viejo adagio que lo escucho con frecuencia: "No todo lo que brilla es oro"; pues, una vez más le agradezco sus elogios; pero, ninguno de mis hermanos tiene interés en la continuación de la fábrica, ya ellos hicieron su vida y soy la única esperanza para mi envejecido padre, quien pensó que después de su muerte, todo desaparecería; sin embargo, yo le hice reaccionar que seré su continuadora y vaya que ya tengo muchos planes, pero si me aseguraré que me deje los documentos a mi nombre, usted sabe la codicia y las ambiciones del trabajo ajeno es innato en el hombre.
Mientras tanto, don Ernesto del Carpio en compañía del técnico Benito Martín ingresaron a un gigantesco taller lleno de máquinas donde laboraban por lo menos unos 100 operarios; claro está, se escuchaba un ensordecedor ruido del funcionamiento de los motores, que muchos de ellos usaban protectores en sus oídos; el fabricante y el técnico caminaban y se fue ubicando a las máquinas paralizadas que estaba dispersas y desconectadas de la cadena productiva; más bien eran un obstáculo, hasta un estorbo en la producción.
Benito Martín, quien era muy observador, y dirigiéndose al industrial, le dijo:
--- Señor del Carpio, veo un enorme taller productivo y dígame: ¿Existe un lugar separado para las reparaciones?
Don Ernesto del Carpio, le contestó:
--- Si señor, a la izquierda de la zona que se observa al fondo, está la sala de reparaciones, que si tiene operarios, pero sólo para chequeos o reemplazo de algún accesorio, pero no para desmontaje.
Benito Martín, algo inquieto le dijo:
--- Señor es necesario sacar esas máquinas paralizadas, pero son muy pesadas, dígame: ¿Cómo lo haremos?
El fabricante, sonriendo le contestó:
--- Muy fácil, tenemos grúas con tolvas planas como si fuesen canastillas, que nos permite levantar toneladas de peso; pero, si tenemos que hacerlo por la noche, cuando los obreros ya no estén, creo que es posible el traslado; para esa operación lo queremos a usted que bajo su sabiduría nos permite sacar esos estorbos y repararlos para integrarlos de nuevo a la producción.
Benito Martín, se frotó sus manos, él comprobó que efectivamente había mucho trabajo que hacer, justamente era exactamente lo contrario en Import & Export S.A., que en los últimos meses no había trabajo para los cuatro técnicos, que cuando llegaba algo, se sorteaban entre ellos para saber quien lo haría; él, pensó en pedir licencia sin goce de haber (que no era mucho sólo una bonificación) por 90 días y le contestó:
--- Señor, vamos a firmar un acuerdo para prestarle mis servicios por un periodo aproximado, que antes tengo que hacer de nuevo la inspección a ojo del buen cubero, a cada máquina que me permita señalar el costo de la mano de obra; pero, no se alarme, no será tanto, yo siempre trabajo con los salarios justos.
Don Ernesto del Carpio, le contestó:
--- Me parece correcto su proceder....................
Continuaremos...............
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

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