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domingo, 3 de mayo de 2020

ORÍGENES DEL SEÑOR DE SIPÁN : Capítulo XXIV .- Chonkik y sus vasallos; fueron atacados por un gran número de guerreros desconocidos, pero ellos reaccionaron logrando hacer huir a los atacantes...

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG.,continuando con el relato de los : Orígenes del Señor de Sipán; Renkik, fue alertado por el traductor del grupo de los 10 cazadores de venados, que un grupo de individuos avanzan para atacar a la vivienda, como la noche estaba oscura no se pudo distinguir. ¿Quiénes son esos atacantes? De inmediato dispuso entregar armas al ejército de vasallos a su mando, y con el  movimiento y bullicio se despertó Chonkik, quien acudió a los corredores para averiguar que estaba sucediendo por el inesperado movimiento de los vasallos.

Aquí en la imagen observamos una recreación de lo que fue:  El Señor Chonkik, detrás de él, está su hijo Siekik, y al fondo su esposa Mokumac; y naturalmente  un perro sin pelo, que se convirtió en compañero de los antiguos habitantes de la costa norte; ellos son los personajes que darán el nacimiento al relato en ficción de la Historia: Orígenes del Señor de Sipán; que se sustenta con la presencia de Chonkik I. Derechos de Autor : Resolución Nro. 1328- 2020/DDA-INDECOPI y del Certificado de Partida Registral N° 1134-2020/DDA- INDECOPI, de fecha 16 de diciembre de 2020
Imagen: Archivos del Blog: A Vuelo de un Quinde


Renkik, quien ya estaba en alerta y que lamento no haber previsto el desplazamiento de vigías nocturnos, le dijo:
--- Oh Señor Chonkik, lamento que se haya despertado por el movimiento de los vasallos, pero fuimos alertados por el traductor del grupo de los 10 cazadores, que uno de ellos  observó bultos negros que caminaban en dirección a la vivienda; por esa razón se despertó a todos los vasallos y se les entregó armas para defender la vivienda.
Chonkik, quien siendo el líder, tenía que estar a la cabeza de sus vasallos para repeler al probable ataque de los desconocidos y llamó al traductor de los 10 cazadores y le preguntó:
--- Dime hombre, que según uno de tus compañeros observó bultos negros que caminaban hacia esta vivienda, pero nadie nos ha llegado atacar, tal vez puede haber visto a espíritus del amanecer que pululan por el espacio y que no hacen daño a nadie.
El traductor con la seguridad de su compañero que decía la verdad, y señalando al lugar lo respondió:
--- Oh Señor Chonkik, mi compañero no vio espíritus, sino que eran gentes que venían, seguro se han  escondido para preparar el ataque; o tal vez huyeron  al ver que nosotros íbamos a responder, no se puede saber, que está sucediendo en esa dirección (lugar donde se vio a los bultos negros).
Entonces, Chonkik, dispuso que los 10 cazadores vayan al frente hasta el lugar donde se vieron a los bultos negros con él a la cabeza, y que Renkik con el resto de los vasallos se coloque a la retaguardia para reforzar a los vasallos que van al frente.
Chonkik, se puso la gruesa coraza de cuero, agarró una porra en la mano izquierda y la derecha con un instrumento cortante erguido (cuchillo rudimentario), avanzaron, y como guía iba detrás  el vasallo que observó los bultos negros.
El comando de ataque, se abrió paso por los costados, pero en línea al frente para cubrir todo el ancho del gran patio, ellos avanzaron y llegaron al lugar donde el vasallo observó a los bultos, pero no encontraron a nadie, el jefe Chonkik, aprovechando la luz de la penumbra bajó el cuerpo en cuclillas y la cabeza hacia el suelo y observó que habían huellas de pisadas muy frescas y efectivamente allí estaba la evidencia de la presencia de hombres, que desaparecieron misteriosamente.
Chonkik, se levantó y dispuso mantenerse en el lugar, le dio el mando al traductor y él regresó a la retaguardia hasta donde encontró a Renkik y le dijo:
--- Renkik, hay movimiento de gentes desconocidas. vayan a los corredores detrás de la vivienda, formen una hilera ancha de vasallos, hasta cerca al lugar donde nos quiso atacar Tankik, seguro por allí están los enemigos, por que por adelante solo hay huellas de pisadas de muchos enemigos.
Renkik, hizo la venia de sumisión y con todo el cuerpo de sus vasallos que disponía a su mando, les ordenó retroceder a la parte de atrás de la vivienda.
Inesperadamente en esos momentos, misteriosamente apareció el "Búho de la Suerte"(Pucu nikosäk ærô) que había desaparecido por completo, que incluso nadie lo recordaba, y comenzó a ulular en dirección al flanco izquierdo de la vivienda, que era una bajada muy amplia que descansaba en un gran terraplén, pero era ocultado por un pequeño bosque de árboles que nacieron y crecieron sin que les hayan cortado ningún árbol.
Chonkik, que creía ciegamente en el apoyo del "Búho de la Suerte " (Pucu nikosäk ærô) en forma pausada y en voz muy baja, detuvo a Renkik cambiando las ordenes y le dijo:
--- Renkik : Vamos a sorprender al supuesto enemigo, estoy seguro que ellos nos están divisando y siguen nuestros movimientos en posición privilegiada, pero les vamos a devolver su curiosidad, por que nosotros les atacaremos por los flancos, divide a los vasallos para que unos vayan por atrás al flanco izquierdo y otro grupo que irán por delante del patio al mismo flanco; yo ordenaré al grupo de los 10 cazadores, para que salgan fuera del contorno de la vivienda y ellos ataquen por la espalda al enemigo.


Aquí en la imagen observamos una recreación de lo que fue el joven Siekik, hijo único del líder Chonkik I., se aprecia claramente que el joven tenía el porte, la talla y la pasta para ser el sucesor de lo que estaba construyendo su padre: El Nacimiento de un gran señorío.
Imagen: Archivos del Blog: A Vuelo de un Quinde.

Recién se apareció Siekik, que se había quedado profundamente dormido; con ese valioso apoyo, se le acercó su padre Chonkik, y éste le dijo:
--- Hijo, toma a tu mando a los 06 hombres que te ayudaron contra el ataque de los guerreros de Tankik y caminen por el flanco izquierdo; ya Renkik, lo hará por atrás.
Hubo una rápida composición en la distribución de los guerreros y avanzaron al ataque en dirección donde se movía el ulular del "Búho de la Suerte" (Pucu nikosäk ærô).
Los guerreros defensores avanzaron y se acercaron al lugar del terraplén donde según el ulular del búho estaban los enemigos, pero no encontraron a nadie, el enemigo se movía en distintas direcciones para desubicar y tener ventaja para el eminente ataque, y justo el búho cambió de dirección, ahora se colocó volando al frente del gran patio, donde originalmente fueron vistos los bultos negros.
Chonkik, que interpretaba los movimientos del vuelo del búho, a la cabeza con los hombres de su hijo Siekik se movilizó al frente y encontraron a los atacantes quienes dando la voz del ataque con grandes alaridos y con sus armas erguidas se lanzaron en asalto contra los vasallos defensores.
Siekik, quien comandaba, hizo frente a tres atacantes y los derribó con su poderosa porra, pero también recibió el corte de parte de su brazo izquierdo, pero no se detuvo aún herido siguió adelante peleando cuerpo a cuerpo contra los atacantes que caían; pero venían más y más como hordas humanas.
El ataque era salvaje para ambos bandos; dos de los hombres de Siekik cayeron muertos, por que fueron cercenadas sus cabezas por los atacantes; en precisos instantes que llegaron los refuerzos de Renkik que avanzaron con fuerza avasalladora.
Los desconocidos atacantes que lo hicieron en gran número y que habían caído varios de ellos, sintieron la pegada de los defensores, y comenzaron a retroceder, aún así haciendo gran pelea, era una batalla donde se escuchaban gritos, alaridos y clamor de moribundos, todos se batían cuerpo a cuerpo con el ruido del choque de porras entre los guerreros y el destrozo de sus cabezas y el chillido de los guerreros que caían en el campo de la batalla.
Recién llegó el cuerpo de 10 cazadores; quienes reforzaron el ataque de los defensores, hombres muy aguerridos, que comenzaron a cortar cabezas de los atacantes derribando enemigos a diestra y siniestra; pero lastimosamente también cayeron tres de los cazadores muertos, pero aún así el destino de la batalla ya era ventajoso para los defensores.
Los atacantes, que siendo muy numerosos, pero tal vez no buenos soldados, se vieron superados por los valientes defensores de Chonkik, quien como su líder peleaba matando a cuanto atacante se le cruzaba; era desgarrador observar cuerpos caídos,  muertos sin cabeza, otros sin brazos, y  se escuchó el grito del jefe de los atacantes a todo pulmón ordenando la retirada de sus guerreros.
Chonkik, ya victorioso, él sabía que no se debía dejar escapar a los atacantes desconocidos, que más tarde volverían atacar, y él gritando también a todo pulmón ordenó seguir a los fugitivos enemigos y exterminarlos sin piedad, al escuchar a su jefe los vasallos varios de ellos heridos pero en condiciones de combate, pisando a heridos y muertos siguieron a su jefe. 
Chonkik, junto a su hijo Siekik y con la retaguardia cubierta a cargo de Renkik, siguieron y avanzaron casi corriendo detrás de los atacantes que huían despavoridos.
Chonkik, conocedor del terreno, sabía que más adelante había un largo callejón y era la única vía de escape del enemigo, había que acorralarlo, observó un punto de escape a la izquierda que nunca fue visto por el enemigo, ordenó a su hijo Siekik y sus hombres correr por ese flanco que estaba fuera del camino, atravesando terrenos anegados y pantanosos, que estaban inundados por las lluvias y adelantar al enemigo para detener su avance de huida, y para él; emboscarlos por atrás dejándolos sin lugar a escape.......
Continuaremos..........................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

1 comentario:

Marina Rojas- Higa dijo...

RADIO NUEVO EMBRUJO
Gracias por compartir
tus bellas letras
en esta tu casa.
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