Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con el relato de los : Orígenes del Señor de Sipán; tal como lo había previsto Chonkik, se celebró la fiesta de emparejamiento de su hijo Siekik con la joven Nassanchak, fue una ceremonia mas bien sencilla y llena de simbolismo y colmó con alegría de los contrayentes y con la participación de todos los integrantes del señorío en nacimiento; hasta la naturaleza nocturna se hizo presente con una parvada de búhos traídos por el Búho de la suerte (Pucu nikosäk ærô), que ulularon y revolotearon por encima de los contrayentes; después del rito, culminó con una comelona general para todos los presentes.
Aquí en la imagen observamos una recreación de lo que fue: El Señor Chonkik, detrás de él, está su hijo Siekik, y al fondo su esposa Mokumac; y naturalmente un perro sin pelo, que se convirtió en compañero de los antiguos habitantes de la costa norte; ellos son los personajes que darán el nacimiento al relato en ficción de la Historia: Orígenes del Señor de Sipán; que se sustenta con la presencia de Chonkik I. Derechos de Autor : Resolución Nro. 1328- 2020/DDA-INDECOPI y del Certificado de Partida Registral N° 1134-2020/DDA- INDECOPI, de fecha 16 de diciembre de 2020.
Imagen: Archivos del Blog: A Vuelo de un Quinde
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Al día siguiente, se levantaron temprano la flamante pareja de desposados, que por primera vez se celebró en el naciente señorío; como siempre Siekik quien era el primero en levantarse y ahora lo hacía en compañía de su pareja Nassanchak; hubo un momento de desconcierto por que ellos no sabían como iban a vivir, y cuando avanzaban justamente en la sala les dio el encuentro la pareja mayor: Chonkik y su esposa Mokumac, quienes al verlos les estrecharon las manos y fue el señor Chonkik, quien les dijo:
--- Hijos Siekik y Nassanchak, ahora ustedes son otras personas, son una pareja que compartirá todo y como esta casa está destinada a una sola pareja que somos nosotros, por lo que ustedes tendrán que ir a vivir a la vivienda que fue conquistada por guerra y que perteneció a Tankik; hemos conversado con mi pareja Mokumac y decidimos compartir con ustedes parte de los enseres que necesitarán como: ollas, cucharas, mates, mantas, cobijas y ropa y que estos momentos los llevarán a la sala que serán para uso de ustedes...
El señor Chonkik, hizo una pausa y dirigiéndose a su hijo Siekik, le dijo:
--- Siekik, como hoy mismo ustedes tendrán que viajar a vivir a su nueva morada, necesitarán de vasallos que los protegerán de ataques de tribus belicosas, te doy la opción de escoger a los vasallos que llevarás junto con la comida para la manutención, sobretodo venados; por que seguramente los campos de cultivos de Tankik estarán para cosecha; te advierto que el hecho que vivan a parte no estamos dividiendo nuestros terrenos, lo que estamos haciendo es cimentar la fortaleza de nuestros terrenos ocupándolos y haciéndolos producir, es todo cuanto tuve que decirte...
Nuevamente el señor Chonkik, apretó las manos de la flamante pareja deseándole buena suerte.
Las mujeres pasaron a la cocina, incluida Nassanchak para preparar los alimentos; Chonkik y su hijo Siekik estaban muy atareados acarreando las cosas que llevarán la nueva pareja a su vivienda.
Mientras tanto; Renkik, capitán de los vasallos estaba reuniéndolos para hacer ejercicios y el "pedagogo" Monkik, había separado a los músicos, felicitándolos por lo bien que tocaron durante la ceremonia de emparejamiento.
Siendo aproximadamente las 08:00 horas de la mañana, salió de la cocina la señora Mokumac, acompañada de su nuera Nassanchak, portando cada una la lapa llena de mates de comida para los cuatro señores: Chonkik, Renkik, Monkik, y Siekik y ellas estando frente a Chonkik, y la mayor hizo la venia y le dijo:
--- Oh Señor Chonkik, hemos traído los alimentos para ustedes y pido la autorización para servir a los vasallos.
El señor Chonkik, aceptó la comida y le autorizó servir a todos los vasallos, las mujeres después de entregar la comida se retiraron a la cocina.
Esta vez las lapas se quedaron, y cada comensal a medida que llegaba se servirá cogiendo su mate; claro está que se esperaba que lo haga primero el señor Chonkik, quien convocó a Renkik y le ordenó que haga sentar sobre los corredores a todos los vasallos para que coman el desayuno.
En seguida las mujeres sirvieron la comida a todos los vasallos, y después de consumido el desayuno, el señor Chonkik, ordenó a Renkik, hacer formar a los vasallos en el gran patio, para que su hijo Siekik elija a los hombres que lo acompañarán en su nueva vivienda.
Aquí en la imagen observamos una recreación de lo que fue el joven Siekik, hijo único del líder Chonkik I., se aprecia claramente que el joven tenía el porte, la talla y la pasta para ser el sucesor de lo que estaba construyendo su padre: El Nacimiento de un gran señorío.
Imagen: Archivos del Blog: A Vuelo de un Quinde.
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Renkik, obedeció las ordenes y convocó a todos los vasallos al patio, y luego de la formación, se acercó Siekik y él, llamó a Monkik el traductor y le dijo:
--- Informa a los vasallos que voy a elegir a los guerreros que me acompañarán a la vivienda que fue de Tankik donde viviremos con mi pareja Nasssanchak.
El "pedagogo" Monkik, les habló en los siete dialectos que él dominaba de las nuevas medidas y al finalizar fue Siekik quien comenzó a observar el batallón de vasallos que ya era numeroso superando fácilmente el medio ciento, su elección fue primero a los tres hombres sobrevivientes que fueron los espías de Tankik, luego eligió a los 07 también sobrevivientes de los cazadores; con un número de 10 vasallos, los separó del grupo, los hizo formar a parte y luego se dirigió a su padre y le dijo:
--- Oh Señor Chonkik, ya elegí a dos manos completas (diez) de vasallos que me acompañarán, le pido autorización para salir con ellos en este momento para inspeccionar los terrenos y la vivienda que fueron de Tankik y luego conociendo esos terrenos me iré a vivir con mi pareja Nassanchak.
Chonkik, sabía que sería el primer paso conocer el terreno donde se iba a vivir y muy sonriente le contestó:
--- Siekik, celebro tu elección de tus vasallos que te acompañarán, haz elegido muy bien, puedes ir con ellos a conocer lo que será tu vivienda, si deseas lleva más vasallos, por si acaso hayan tribus rebeldes que les puedan atacar.
Siekik, no necesitaba más gente; además, era de día que contaba con la protección del dios de la iluminación ( El Sol) y le contestó:
--- No, es necesario más gente, con los que elegí es suficiente Señor Padre...
En seguida, Siekik, llamó a dos de sus hombres y con ellos los llevó al almacén para sacar armas y herramientas; ya con todas las provisiones que compartieron con todos los demás salieron y partieron rumbo a los terrenos que fueron de Tankik, se tuvo la precaución de elegir como cabeza de marcha a los vasallos que fueron de Tankik...
Ellos caminaron por espacio de 02 horas, y llegaron a los terrenos de su destino, se observaba campos descuidados y llenos de hierbas, algunos sembradíos que no se culminaron, otros con cosechas incompletas, que daba la impresión que fueron hurtados por gentes ajenas, hasta que llegaron a la vivienda, que si era una construcción de adobe muy grande, casi del mismo tamaño de la vivienda de Chonkik.
Ellos, ingresaron a la vivienda se encontraron con todo desparramado, por que había sido saqueado y las pocas cosas sobrantes estaban rotas, casi todo era inservible, ellos al salir por la puerta trasera divisaron una enorme pampa llena de cultivos de maíz, yuca, camote y algodón pardo en bellota para la cosecha; todo estaba bien sembrado, era algo raro que no haya sido saqueado ni robado (no olvidar que Tankik, cedía terrenos a cultivadores independientes).
Pero, al avanzar Siekik y sus vasallos a estos terrenos cultivados les llegó una lluvia de flechas disparadas por guerreros que estaban ocultos por callejones fuera de los campos de cultivos..
Rápidamente, Siekik ordenó tumbarse al suelo y desde allí observar quienes eran los atacantes, y como ellos felizmente no fueron heridos (tal vez era solo una advertencia de los enemigos escondidos) comenzaron a otear a su alrededor el siguiente ataque; pero nada pasaría, hasta que apareció el Búho de la suerte (Pucu nikosäk ærô), y con un movimiento de sus alas y ululando hacia el norte, le indicó a Siekik donde estaban ubicados y ocultos los enemigos....
Continuaremos...................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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