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domingo, 20 de febrero de 2022

La Historia del Agente Justiciero Genochi: Capítulo XXXVIII.- "El Machetero del Río"; tal como era el alias de Servelio Smith López, hizo su debut escalofriante: asesinando a un soplón, que le propinó un machetazo en el cuello que lo degolló...y se refugió en la playa del Río...

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Agente Justiciero Genochi; "El Machetero del Río", nos sigue narrando su historia en el mundo del hampa; él después que fue adoptado por el delincuente "Gato Salvaje", que se convirtió en su segundo padre y se cuidó que el niño Servelio Smith López, no ingrese al mundo de la delincuencia, esa decisión la tomó en honor a su amigo John Smith, quien fue el padre biológico del niño y nunca más regresó al Puerto de Paita, lo llevó a su casa, que estaba ubicada en Castilla, Piura, allí ellos rápidamente congeniaron; el niño muy trabajador limpió la sucia casa, luego hicieron la comida, compartieron la cena, en seguida le tendió cama al niño, lo acostó y él salió a buscar a sus compinches, con quienes tenía un asunto pendiente que era reclamar parte de un botín, al encontrarlos ellos habían dispuesto el reparto de un botín, dejando casi sin nada a "Gato Salvaje", hubo el reclamo al "jefe del grupo", pero éste no le dio satisfacciones, más bien nació una enemistad que quedó marcada para siempre... ....sigamos la historia............


Aquí en la imagen Observamos al Agente Justiciero Genochi, quien como agente anónimo bregará para capturar a los culpables del asesinato de sus padres en Chilcapampa.
Foto: Archivos del Blog: A Vuelo de un Quinde.


Aquí en la imagen observamos al delincuente Bonifacio "Oreja Mocha"; quien como líder de una banda juvenil, asaltaron a la morada de Eucebio Nonajulca Rivera, residente en el Barrio Alto de Chilcapmpa, a quien asesinó por que no le entregó el dinero de una venta de ganado vacuno.
Foto: Archivos del Blog: A Vuelo de un Quinde.


En el mundo del hampa, la enemistades entre los mafiosos, nunca se curan, siempre las cicatrices afloran los sentimientos encontrados y terminan en nuevas broncas entre los involucrados, que muchas veces conducen al asesinato, marcado por un ajuste de cuentas, ya que el hampa nunca perdona los entredichos delincuenciales.
La enemistad del "Gato Salvaje" con el jefe de la banda criminal, marcó el inicio de una guerra entre ellos, y como el "felino" se estaba envejeciendo, ellos ya no lo tomaban en cuenta en los grandes atracos; aún con todo siempre tenía sus migajas por el servicio del reglaje que lo hacia a la perfección; nadie como él, dando datos exactos de los movimientos de las futuras víctimas, donde el "Gato Salvaje" ponía el ojo, nadie se podía salvar de sus seguimientos.
En una oportunidad, hizo el reglaje a un rico comerciante, quien también fue delincuente y se reformó, dedicándose a los negocios inmobiliarios con mucho éxito, sus antiguos compinches lo buscaban con frecuencia para sacarle alguna tajada, hasta que se cansó de seguir manteniendo a los delincuentes y la única manera de deshacerse de ellos, era simplemente matándolos y por arte de magia él desapareció, ya no era visible, y como su trabajo era de un corredor de inmuebles, fue fácil quitarse de la luz de la gente.
Este comerciante, contrató los servicios de dos matones y los llevó a su domicilio, allí les probó sus habilidades, vaya que demostraron ser delincuentes sicarios, ellos fueron como los clientes al negocio de la víctima.
Los sicarios, que iban asesinar al dueño de un restaurante (enemigo del agente inmobiliario) entraron como clientes, pidieron el platillo más caro y pagaron por adelantado, era una costumbre de delincuentes que estaban siguiendo los pasos de su víctima, después del consumo, aprovechando la poca afluencia de clientes, se acercaron a la caja y le dispararon 5 balazos al dueño, matándolo al instante, salieron tan tranquilos, que incluso, afuera llegaba la policía y actuaron como curiosos.
Esa muerte, marco el inicio de una guerra entre bandas, justo el muerto era hermano del compinche del grupo; quienes declararon venganza y le comisionaron a "Gato Salvaje" hacer el reglaje de los asesinos.
"Gato Salvaje", haciendo honor a su fama, que a quien él sigue, ya nos se salva de la muerte, pero los sicarios resultaron ser movedizos, ya que ellos actuaban en Sullana, Piura, Trujillo y Chimbote.
Entonces, el seguidor comenzó su trabajo, yendo a la familia de la víctima, ya que ellos tenían datos indispensables que podrían ayudar para ubicar y encontrar a los asesinos; vaya que fue una decisión acertada por que hizo amistad con la viuda, quien estaba interesada en la búsqueda y captura de los asesinos y entregarlos a la justicia para que los juzguen y condenen; los familiares aportaron la información que buscaba el "felino", ya sabía los nombres incluso el domicilio de uno de ellos, le hizo reglaje pero el seguido  se cuidó por que nunca entró ni salió.
Pues, ellos se mudaron a Chimbote, él "felino" buscó sus contactos en el puerto pesquero, encontró su ubicación fue allí, pero ellos venían en dirección a Trujillo, se cruzaron en el camino.
"Gato Salvaje", llegó a Chimbote y de inmediato retornó a Trujillo, estando allí, ya los sicarios habían viajado a Sullana, para hacer un "trabajito", el seguidor viajó a Sullana, contactó con su gente, quienes desconocían a esos sicarios, pero si sabían del próximo asesinato de uno de ellos que se había convertido en soplón y el hampa lo condenó a muerte, este informante afectó mucho a las bandas porque la policía dio golpes certeros capturando a muchos de ellos con las "manos en la masa", fueron duros golpes para el hampa.
Pero, los sicarios se adelantaron con 8 horas y desubicaron a sus seguidores y asesinaron a su víctima, casi todos les estaban esperando en el día siguiente, tendiéndoles una trampa, para capturarlos vivos, se les volvieron a escapar de las manos.
"Gato Salvaje", quien casi les pisaba los talones a este par de escurridizos sicarios, no se daba por vencido, les siguió los pasos hasta Piura, que si la conocía de palmo a palmo, y dio con ellos, inesperadamente entraron a beber  un jugo de frutas, ellos habían llegado antes y se servían, el "felino" fue a un teléfono público y les dio el dato preciso a sus compinches, con esa valiosa información, que los asesinos estaban en Piura, viviendo sin ningún temor de un ajuste de cuentas, los deudos llegaron y encontraron a los sicarios totalmente descuidados bebiendo un jugo de frutas.
Los ajusticiadores los sorprendieron totalmente, disparando a matar, que las víctimas no tuvieron tiempo de usar sus armas, quienes murieron con cinco balas en la cabeza, fue una carnicería en la juguería, sus cabezas destrozadas por las balas cayeron encima de los vasos del juego.
"Gato Salvaje", era muy eficiente en su trabajo, nunca fallaba; con el dato anterior se ganó el respeto de la banda de los compinches, quienes hacían el trabajo sucio; él no mataba con la frecuencia que lo hacían sus compinches, él aportaba la información y ese era su trabajo.
Así pasaron los años y "Gato Salvaje" se envejeció más, pero nunca descuidó la crianza de Servelio, incluso lo matriculó en una escuela privada para que aprenda a leer y escribir, y éste llegó a los 18 años de edad.
Pero, la desgracia llegó muy fuerte, un día muy temprano, que él había salido y al regresar encontró muerto a su protector  en la puerta de su casa, fue un terrible golpe emocional, ver a su padre adoptivo separado el cuerpo de la cabeza y tuvieron el cuajo de dejar el machete, que era de óptima calidad, tal vez no tuvieron tiempo de recogerlo o evitaban pruebas de su acción.
Servelio, totalmente asustado y adolorido viendo semejante espectáculo y rodeado de muchos curiosos que probablemente allí estaban los asesinos, él levantó el cuerpo con la cabeza sobre el pecho, ingresó a su casa y cerró la puerta para evitar a tanto curioso.
Ya en el interior, él sólo y el cadáver, observando la macabra muerte, tomó ese machete asesino y juró venganza contra  los que mataron a "Gato Salvaje".
Él tendió el cuerpo sobre la cama; tarima que había en la sala, fue al dormitorio, levantó el colchón y encontró 6 talegas llenas de monedas, era mucho dinero, él tomó unas cuantas monedas, volteó el colchón; pero, recordó que llegarán policías y voltearán la casa en busca de evidencias; por lo que recogió las 6 talegas y las guardó en un hueco que había debajo de la cama con una tapa mezclada con tierra que nadie podría descubrir .
Con el dinero en el bolsillo fue al carpintero para comprar un cajón para el cadáver de su padre adoptivo; llegó un Juez de Paz y los policías, quienes pretendieron llevarse el cadáver al puesto policial.
Servelio, hizo tenaz  resistencia y tuvo el apoyo del Juez de Paz,, quien verificó el cadáver, redactó un acta y le entregó a la policía y ordenó enterrar al occiso.
Al día siguiente, se efectuó el sepelio en el panteón de Castilla, los vecinos colaboraron con el deudo y recién él supo que su padre adoptivo fue un delincuente, el finado había guardado el secreto, que Servelio nunca se enteró de donde traía dinero su socio y como lo habían acordado ambos respetaron el pacto de la "Sociedad Familiar".
Entonces, Sevelio estaba tan afectado y con el dolor emocional a cuestas, contra la muerte violenta de su "protector", sabiendo que fue delincuente, decidió ingresar a  ese bajo mundo, para poder vengar la salvaje muerte; él tuvo muchas dificultades, nadie lo quería, por que no tenía trayectoria, hasta que pensaban que era un soplón al servicio de la policía; pero no todos pensaban así, hubo un joven como él con amplio prontuariado conocido como el "Coyote" y se ofreció ayudarle, él ingresó a una banda, donde el requisito era asesinar y le dieron el trabajo de liquidar a un individuo que se había convertido en soplón y con sus datos ya la policía había capturado a varios ranquedos delincuentes.
Por lo que que el "jefe de la banda", le dijo:
--- Jovencito, yo no quise recibirte, por que no tienes experiencia, pero no puedo contradecir a mi amigo "Coyote", que te recomendó y que el ingreso es fuerte, tienes que matar a un chivo que está balando (balidos) con mucha información a los tombos (policías); ¿Crees que lo harás?
Servelio, quien quería ingresar por la puerta grande, le contestó:
--- Si señor....
El jefe ordenó preparar el plan, le hicieron seguimiento al soplón y lo detectaron que entraba a una cantina, dos de ellos fueron a invitarle un trago; para eso y al ser dueño del machete que degollaron a su padre adoptivo, Servelio lo había afilado, le puso vaina y esperaba el dato que le enviaría el "jefe" para asesinar al "chivo bocón"....
El Plan era que el soplón bebía con dos "amigos", quienes al ver a Servelio, abandonarían al soplón, dejándolo sólo en manos de su justiciero. (le dieron las características y hasta la ropa que vestía).
Los emisarios del "jefe", llegaron a la casa de Servelio, para avisarle que el "chivo balador", estaba listo para su viaje al Más Allá, él los atendió, cogió su puñal y juntos se fueron a la cantina, él caminaba rápido y se había adelantado, quien al llegar a la cantina ya sus acompañantes habían desaparecido, lo mismo hicieron en el interior los que acompañaban al soplón, él estaba vestido con la ropa que le indicaron.
Servelio, ingresó con todo su poder de matar, con rapidez increíble desenvainó su machete y fue directo al solitario bebedor, con el machete blandiéndolo lo descargó con terrible machetazo en el cuello que degolló al infeliz, quien no tuvo tiempo de defenderse, todo fue a la velocidad de un rayo.
Servelio, después del asesinato, con la cabeza de su víctima dando bote sobre el piso; con la tranquilidad asombrosa y pasmosa, limpió el arma con la manga suelta de su camisa y la guardó en la vaina, nadie de los aterrorizados bebedores allí presentes trataron de intervenir; el asesino salió a la calle y recién corrió despavorido sin saber donde ir, llegó a la playa del Río Piura y allí buscó refugio, permaneció escondido toda la tarde, y como no habían noticias para él, había olvidado parte del plan, que él debería regresar al refugio de la banda, después del "trabajito".
Aquel lugar, era una casucha abandonada fuera del casco urbano de Castilla, así se inició con sus primeros pininos, el flamante "machetero"..............................
Continuaremos................................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

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