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domingo, 18 de abril de 2010

LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA.....CAPÍTULO L.- EL SEÑOR SÁNCHEZ Y SU FORTUNA ES ACOSADO POR EL BANDOLERO ·"EL CHAVETAZO MORTAL"

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., hoy nos sentimos muy orgullosos y halagados al recibir el Reconocimiento de Derecho de Autor por el INDICOPI , con Partida Registral No. 00392-2010, Asiento Nº. 01, con fecha del 27 de Marzo de 2,010. De la Obra Literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA"
Continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior, el Señor Sánchez encontró un caballo desfalleciente y cargado con un baúl de caudales que cabalgaba errante en dirección a Aragoto.
Al encontrarlo el Señor Sánchez, que llegó allí sin saberlo, lo descargó y se llevó el baúl a Socchabamba en su caballo.

Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma, que viene a ser "El Rey de la Tinieblas": Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la Obra Literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación , impresión y distribución literaria. Con Reconocimiento de Derechos de Autor por INDICOPI, con Partida Registral No. 00392-2010. Asiento 01, con fecha de 27 de Marzo de 2,010. Fuente: Archivos del blog.
Mientras tanto, en Samaco el bandolero "El Chavetazo Mortal", después de superado el momento dramático que protagonizó en la "raya", y con toda la calma que reinaba en ese lugar; Juan Cunya ( "El Chavetazo Mortal") y su gente reaccionan y echan de menos que su viaje a la "raya" (límites Perú-Ecuador), haya sido en vano y recién recuerdan de los dos caballos cargados con los baúles.

Sin embargo uno de ellos de ésta banda, había observado que uno de los caballos salió a todo trote hacia Huara, justo en el momento que ellos disparaban contra los bandoleros de "El Indio salvaje".

Aquí en la imagen observamos una típica calle de la Ciudad de Ayabaca, justo en éste lugar esta el paradero de transportes hacia Socchabamba y otros lugares. Fuente de Imagen: Archivos del blog.
El no haber logrado nada en el viaje a la "raya" originó discusiones y deliberaciones de los bandoleros de Samaco, en medio de la discusión el bandolero "El Chavetazo mortal", tratando de imponer orden, dijo:

-----"Si alguien de nuestra gente vio salir un caballo en dirección a Huara de Indios, lo que es probable, pues, regresemos a Huara y sigamos el rastro del caballo, sus señales nos llevarán directo a la casa que el cuadrúpedo llegó......
Y Juan Cunya, agregó:
......" Estoy casi seguro, que encontraremos el rastro del caballo, como esta cargado, su pisada es profunda y no se puede borrar fácilmente, además la tierra está banda por esas zonas, porque llovió tres días atrás....
Y finalmente , dijo:
....." Voy a entregar el 50% del total de los caudales, que traía o lleva ese caballo a quien lo encuentre, doy un plazo de tres días, y ahora a moverse rápido"-----
Naturalmente los hombres de su banda se sintieron motivados para encontrar el caballo errante, y nuevamente interviene Juan Cunya , y dijo:
----"Necesito un hombre rastreador (el que sigue las huellas de un ser viviente), para que viaje a Gigante ( así se llama este lugar limítrofe), y desde allí siga el rastro del caballo cargado, nosotros los esperaremos en el límite de Huara de Indios; es necesario tomar la medida del rastro y con ello será suficiente, los hombres del finado Rodrigo Mazache aun deben estar en la "raya" reparando sus pérdidas y tal vez repartiéndose los caudales del caballo que se quedó con ellos"----
No le faltaba razón a Juan Cunya, en efecto los sobrevivientes de la banda del "El Indio Salvaje", aún no salían de su sorpresa que al abrir el baúl, solo encontraron fierros viejos y oxidados, pero pensaron que los bandoleros de Samaco que se habían llevado el otro caballo, encontrarían lo mismo que ellos. -- Consuelo de tontos ---
---Que lejos de la verdad estaban estos hombres, porque ese caballo no fue a Samaco---
---Ese caballo llevó un cuantioso caudal de tesoros, que fue a parar a las manos del Señor Sánchez de Socchabamba ---


Aquí en la imagen apreciamos a un capilla, este tipo de construcciones es muy típico en Socchabamba, dado el alto espíritu religioso de sus moradores. Fuente de imagen: Archivos del blog.
Volviendo a Samaco, luego de las ordenes impartidas por le bandolero "El Chavetazo mortal", éste, envió a la "raya" a un hombre especialista en rastreo de pisadas, para hacer le seguimiento del caballo que escapó solo; y ellos viajaron directamente a Huara, sin embargo antes de dividieron en pequeños grupos; uno de ellos estaba a cargo de Eloy Criollo, y se fue al Llano de Aragoto, tanteando la posibilidad que le caballo haya sido encontrado por alguien de esa zona, y el resto partió en otras direcciones y se estableció que dentro de lo posible que le tiempo lo permita, todos se reunirían de nuevo en un paraje de Huara de Indios.

El emisario que viajó a la "raya", rápidamente llegó al lugar de su destino, pero fue descubierto por los sobrevivientes de Rodrigo Mazache, fue acorralado y reducido, pero no le dispararon; intervino Gumercindo y le preguntó:
----"¿Qué haces aquí? si sabes muy bien que tienes una muerte segura, si te has arriesgado por algo será "----

El emisario de Juan Cunya, sabiendo que podría morir y tratando de salvar el pellejo, dijo:
----"Señor Gumercindo, yo le conozco a usted, una vez hace muchos meses atrás, estuvimos juntos en Huara de Indios en una "landa" (primer corte de cabello de un niño), e incluso estábamos tratando de enamorar a unas "chinas " (jóvenes mujeres solteras)y contestando su pregunta, yo estoy aquí en busca de un caballo que se nos perdió el día de antes de ayer, y quiero seguirle el rastro, para saber en dirección se fue"----

Gumercindo un poco incrédulo sobre la fiesta de Huara de Indios, sin embargo, rápidamente captó que la presencia de este hombre, era rastrear el caballo cargado con los caudales y pensó que ellos no tenían el caballo perdido, y contestó:
----"No recuerdo haber estado contigo en una fiesta, pero si sé , porque estás aquí, seguro vienes por el otro caballo del baúl; en realidad no han perdido nada, y tanta muerte que ocasionó estas porquerías de fierros oxidados, el chimba Quiroz nos engañó a todos; hace unos momentos abrimos el baúl y solo hemos encontrado como repito fierros oxidados, y si ustedes no llevaron el otro caballo, seguro se ha dirigió a Huara de Indios, y como no hay nada que perder, te perdono la vida y dile a tu jefe que voy a vengar la muerte de Rodrigo Mazache, y que algún día nos encontraremos y arreglaremos las cuentas pendientes"----
El emisario, de todas maneras tomó las medidas del rastro del caballo fugitivo y siguió su trayecto, cabalgó varios kilómetros hasta que llegó al cruce de Huara y Aragoto, como era de esperarse el caballo debería haber seguido a Huara, el rastreador no se tomó la molestia de seguir el rastro, viró a la izquierda y siguió su camino, hasta que casi llegando a Huara, se apeó de su caballo y comenzó a verificar el rastro y no lo encontró, retrocedió varios metros atrás pensando que se había quedado sobre unos matorrales, pero tampoco había ningún rastro, siguió retrocediendo y llegó de nuevo al cruce, allí encontró el rastro y verificó que le caballo había seguido de frente hacia Aragoto.
El rastreador continúo con su seguimiento hasta que se encontró con el resto de sus compañeros que lo esperaban para saber sobre el caballo; él, les relató que lo descubrieron en la "raya" y ellos le dijeron que en esos baúles solo había fierros oxidados, entonces todos hablaron y discutieron, hasta que intervino Juan Cunya, y dijo:
----"Tú, seguramente has creído lo que te dijeron esos indios de Huara, como ellos están seguros que el caballo está en algún lugar de su tierra, tratan de ganar tiempo, hablándonos mentiras y así evitar que nosotros encontremos el caballo. Pues, vamos a seguir el rastro, parece que ya no fue a Huara, nos dirigimos hasta el límite de Aragoto"----
Los bandoleros, siguieron el rastro y en una explanada se cruzaron los rastros del caballo, habían rastros de ser humano, pisadas muy fuertes por el trabajo de descarga, pero solo había de una sola persona, y el caballo y otro mas, recordando el capítulo anterior aquí lo encontró el Señor Sanchez y con la ayuda de dos misteriosos ayudantes lo cargó de nuevo en su caballo; subieron a una pequeña pampa y allí estaba el caballo sin aperos y sin su preciada carga, el pobre animal estaba reponiéndose comiendo un buen forraje natural de la zona.
Ante las evidencias que el caballo fue encontrado por otra persona sola y se llevó el preciado tesoro, el bandolero "El Chavetazo Mortal", dijo:
----" Ohhh.. nos adelantaron, el baúl ha sido trasegado a otro caballo, ahora sigamos el rastro del nuevo caballo para saber adonde fue el cofre"----.
En efecto los bandoleros, siguieron los rastros del caballo del Señor Sánchez, cruzaron todo el llano de Aragoto, y avanzaron llegando a los límites con Socchabamba, allí encontraron a un transeúnte que iba en sentido contrario y le preguntaron sobre un caballo cargado y aquel hombre les informó que siendo aproximadamente las 6:00 a.m., él estaba en una loma y vio pasar a un jinete jalando un gran caballo cargado con un enorme bulto y que se dirigió a la Pampa de Socchabamba.
Los bandoleros con el dato obtenido optaron por regresar a Samaco, todo se había perdido; pero Eloy Criollo, insistió en continuar la marcha, (el 50% de lo ofrecido, era un incentivo que vale la pena arriesgar el pellejo). Juan Cunya un bandolero cuajado con muchas aventuras conocía sus límites y no quiso arriesgar su presencia en una zona que era el reducto del temible bandolero Huamán, y como no había manera de convencer a Eloy Criollo y su grupo que retrocedan , los dejó bajo su propio riesgo y todos los restantes regresaron a Samaco.
Estando Eloy y su gente libres de la sombra de Juan Cunya, siguieron el rastro del caballo y avanzaron hasta cerca de la Casa de la Loma, ya que hasta allí llegaron los rastros y como era de día y había mucho movimiento se retiraron a Chilcapampa, hasta a la noche para poder incursionar contra la Casa de la Loma...... continuaremos..........
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

3 comentarios:

Anónimo dijo...

No entiendo,trata de ser mas breve con tus historias o comentario,son tantos correos que entran a la bandeja de entrada,que termino diciendo mas tarde lo leo,llega el momento de hacerlo pero me encuentro con otros correos,no es por ignorancia que no se lee sino por tiempo,mientra mas preciso y consiso seas, las cosas son mas facil para entenderlas.
DIOS TE BENDIGA

Anónimo dijo...

oooooooooooooooh, deja mucho que desear.

Anónimo dijo...

Me siento muy fascinado leer esta historia, hay hechos por cierto ficticios que nos lleva a recordar una época de nuestra historia republicana en donde efectivamente existieron bandoleros y muchos de ellos reinvidicaban las protestas de los campesinos explotados por los gamonales. Muy Buena tu historia amigo Guillermo