Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel, entre Iarma y Olzagon, y como informamos en el capítulo anterior; Mañuco, quien aún era el vendedor libre de la empresa Import & Export S.A., decide hacer un seguimiento a Olzagon y Zoraida Fuentes Plata; la envidia lo consumía, él contrató a un detective privado para que haga el trabajo, pero como ninguno conocía en persona a Olzagon, ellos van por diferentes caminos a la Oficina de Recepción de mercaderías, donde se encuentra Olzagon junto a los empleados recepcionando y chequeando mercaderías recién enviadas por la central de la empresa; Zoraida Fuentes Plata no conocía el plan de Mañuco, que inocentemente lo envió a esa oficina....
Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen las consistencias del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices. Fuente: Archivos del blog. Obra Literaria reconocida con Derechos de Autor, según Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI.
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
Mañuco y el agente de seguridad llegaron a la Oficina de Recepción de mercaderías de la empresa "Comercial Tapal", allí había mucha gente, entre ellos Olzagon, quien con guías de remisión en mano; chequeaba las mercaderías para estudiar su destino de almacenamiento en los grandes almacenes, recién construidos que justamente se iban a estrenar con estas mercaderías.
Entonces, el agente de seguridad que llevó a Mañuco a esa oficina, le dijo:
--- Señor Mañuco, ve usted aquel joven muy activo de camisa roja con botones negros, quien tiene documentos en las manos (guías de remisión) él es Olzagon, él está muy atareado; dígame desea usted que le presente o prefiere darle una sorpresa.
Pero, Mañuco no deseaba conocer en persona a Olzagon, sino pasar desapercibido para así poder seguirlo, sin que él lo reconozca y le contestó:
--- Gracias agente, usted puede regresar a su trabajo; yo me presentaré ante Olzagon, y como usted bien lo dijo, le daré una sorpresa a mi compañero de trabajo. (cinismo mayúsculo en la respuesta).....
El agente de seguridad, también muy inocente de los planes de Mañuco, consideró que ya cumplió con el trabajo encomendado y que tenía que regresar a los almacenes, y le dijo:
--- Señor Mañuco, le deseo buena suerte, dele mis saludos al joven Olzagon, hasta pronto...
El agente dio la vuelta y se fue dejando solo a Mañuco, quien tenía la vista fija en la puerta de ingreso, para ver si ya llegaba el detective privado, quien aún no se aparecía, y pasó por allí otro agente de seguridad, quien al ver sospechoso a Mañuco (estaba solo y nervioso) se acercó y le dijo:
--- Señor: ¿Qué hace sólo aquí?
Mañuco, muy asustado y temiendo se haga un escándalo, se apresuró a sacar de su maletín la credencial de vendedor libre de la empresa Import & Export S.A., y la entregó al agente, quien al chequear, le respondió:
--- Señor, usted está mintiendo, o yo no entiendo esta credencial; por que el único agente es el joven Olzagon, quien justamente está chequeando las mercaderías enviadas por su empresa, por favor me acompaña a la Oficina de Almacenes para cerciorarnos de la verdad.
Pero, Mañuco no quería publicidad y trató de defenderse así:
--- Señor agente, yo fui enviado aquí por la señorita Zoraida Fuentes Plata, me mantengo neutral en la recepción, me separé para resguardar, tal vez por allí haya un ratero y efectivamente aún no conozco a Olzagon, ya que soy un vendedor libre, quiero darle una sorpresa, déjeme solo y usted continúe con su trabajo.
Para el agente le pareció razonable la respuesta y se retiró, dejando solo a Mañuco; en aquellos momentos llegó el detective privado a la puerta de ingreso, Mañuco se fue hasta él, y cuando estuvieron juntos, le señaló quien era Olzagon; el agente especialistas en investigaciones, sacó su cámara fotográfica y desde la distancia enfocó a Olzagon y le captó varias tomas para su archivo y le dijo:
--- Mañuco, usted es más grande no debe temer a ese joven, aún así se le ve muy diligente...
A lo que Mañuco, casi interrumpiéndole al detective, el replicó:
--- Agente, no lo he contratado para que me describa de la persona de Olzagon, sino que siga sus movimientos, pues ya lo conoció, regresemos al automóvil que yo aquí ya no tengo nada que hacer.
Pero, el detective más minucioso, le contestó:
--- Señor Mañuco, ¿No se presenta usted al joven Olzagon? Ya que son compañeros de trabajo...
Mañuco con los ánimos caldeados por la intromisión del detective, le contestó:
--- Por favor detective, usted no está aquí para darme ordenes, le repito vamos a mi automóvil, por que tengo que ir al centro de la ciudad, allí se quedará usted, o prefiere quedarse para conocer mejor a Olzagon.
Era justo la respuesta del detective, quien le contestó:
--- Si señor, tengo mucho trabajo por hacer aquí; aún no conozco a la dueña del negocio, para eso me está pagando usted, para investigar a los involucrados...
Con la respuesta del detective, Mañuco se retiró y fue a la parte delantera de la empresa hasta su automóvil, él subió, encendió el motor y partió rumbo al centro de la Ciudad, sin haber conocido en persona al joven Olzagon.(su soberbia era más poderosa, que el sentido común)...
Mientras tanto, Olzagon, (sin saber que lo estaban vigilando) seguía muy firme chequeando las guías de remisión que él mismo había entregado a la empresa de transportes en la Capital; a medida que los empleados controlaban los bultos con los números asignados, le entregaban a Olzagon, para que él, estudie la ubicación de las mercaderías.
Después de casi 03 horas, se terminó de chequear la mercadería que llegó en 03 camiones completamente fletados; y el tiempo sigue su curso en un poco más del medio día, eran aproximadamente las 13:00 horas, se apareció Zoraida acompañada de los agentes de seguridad, ella habló con los empleados que recepcionaron las mercaderías, que todos los bultos y cajones habían sido colocados en los almacenes antiguos, a lo que Zoraida ordenó al jefe de seguridad contar y enumerar todos los cajones y bultos de la mercadería llegada que coincidan con el número de las guías de remisión.
Luego, ella fue hasta donde estaba Olzagon y le dijo:
--- Joven Olzagon, ya chequeó su mercadería, si todo llegó conforme, por que en la tarde tendremos mucho trabajo que hacer.
Olzagon, muy respetuoso, le contestó:
--- Si, señorita Zoraida, todo coincide de acuerdo a las guías de remisión, estoy estudiando la ubicación en los almacenes, pero necesitaré apoyo para saber el movimiento y según ese dato se ubicará la mercadería en los nuevos almacenes.
Zoraida, que aún sentía los efectos de la noche que empezó apasionada, rota abruptamente por el desgarro anal, ella deseaba una nueva oportunidad y con una mirada dulce, le contestó:
--- Me parece que trabajará con los encargados de los registros de movimientos, si todo está conforme, yo regreso a mi oficina hasta las 14:00 horas que se cerrarán las puertas para el almuerzo, regresaré a esa hora aquí y le invito almorzar al restaurante que no pudimos ir ayer.
El detective privado, sigilosamente captaba imágenes de Olzagon hablando con la empresaria Zoraida, él no perdía ningún detalle, pero no se dio cuenta que ya no había mucha gente; se había quedado solo por lo que un agente de seguridad lo había detectado y se comunicó con su jefe y le dijo:
--- Jefe, junto a la puerta de entrada de la calle, hay un individuo de gorra, captando imágenes del interior de los almacenes, pero dirige la cámara hasta donde se encuentra el joven Olzagon.
El jefe de seguridad puso en alerta a todos los agentes, pero en completo silencio, sin ninguna señal (ellos tenían ese protocolo, era con movimientos de rostros) para evitar sean descubiertos por el criminal, y destacó al joven más rápido para que atrape al intruso, sin darle opción de escape; por el comunicador interno dispuso que dos agentes salgan a la calle por las puertas de la tienda y se acerquen a la oficina de recepción desde afuera por que hay un sospechoso.
El agente asignado se fue acercando hasta la ubicación del detective, (este individuo demostró ser poco profesional) quien seguía capturando imágenes, y cuando se retiró la empresaria, bajó la cámara para retirarse; pero, era demasiado tarde, le cayó el agente que lo tiró al piso y la cámara fotográfica salió por los aires, pero gracias a la agilidad del joven agente que la atrapó, evitando la caída que se hubiesen estropeado las imágenes captadas.
El detective, quien también era ágil, no salía de su asombro haber sido sorprendido y descubierto, él logró desprenderse del agente de seguridad y se puso de pie, pero no logró recuperar su cámara ni escapar, por que rápidamente llegaron otros agentes que lo atraparon y enmarrocaron y despejaron a los curiosos y por el interior lo llevaron a la Oficina de Seguridad.......
Continuaremos.............
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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