Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE ., continuando con La Historia del Amor Cruel, entre Iarma y Olzagon, y como informamos en el capítulo anterior; Olzagon y Josefa López Pascal quien era la enfermera del tópico de la empresa Import & Export S.A., donde ambos trabajaban, ella lo llevó a su casa, compartieron una exquisita cena preparada por ella; después de la cena, hubo un baile romántico y llegaron al dormitorio y cuando se inició el encuentro amoroso ya con los cuerpos desnudos, el joven trepado encima de ella y ella ofreciéndole su vagina; alguien tocó la puerta de la calle, fue el ex novio de Josefa quien pretendió reiniciar la relación; ella pidió auxilio a la policía, todo indica que el intruso huyó..... ...sigamos la historia.......
Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen las consistencias del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices.
Este es el símbolo de la novela: La Historia del Amor Cruel.
Fuente: Archivos del blog: A vuelo de un Quinde.
Obra Literaria reconocida con Derechos de Autor, según: Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI.
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
Todo lo que parecía iba ser; un encuentro amoroso erótico con todos los ingredientes de la pasión para una entrega total entre Josefa López Pascal y el joven Olzagon, fue frenado por la intervención de un tercero, el ex novio, quien casi a la media noche tocó la puerta de la casa con la intención de reiniciar una relación sentimental; ella lo rechazó; como el individuo no se iba, ella llamó a la policía y recién desapareció; pero el daño al encuentro ya estaba hecho, se decapitó el plan de ella.
Josefa, con la ayuda del teniente de la policía, quien le envió dos efectivos, ellos llegaron y también tocaron la puerta haciéndose presentes, ella les contestó desde adentro que el intruso huyó al escuchar que ella había pedido apoyo a la policía; ellos permanecieron por los alrededores por dos horas y como nadie llegó se retiraron a su cuartel.
Entonces, Josefa y Olzagon, se habían sentado sobre los muebles de la sala conversando de todo, menos del frustrado encuentro y ella trató de rehacer, reproduciendo música romántica en su aparato musical, pero, el joven Olzagon ya no quería nada con ella, sabiendo que tenía dificultades con su ex novio, quien se atribuyó derechos de fastidiarla a cualquier hora sea día o noche.
Josefa, en pose audaz se retiró la bata y así desnuda se acercó al asiento de Olzagon para provocarlo y retornar al dormitorio; pero, el joven ya perdió la ilusión y haciendo caso al "Código de Ética", le dijo:
--- Josefa, la llegada de tu ex novio, fue providencial, nosotros somos trabajadores de la misma empresa y tenemos un "Código de Ética", por lo que tenemos que respetar esa norma con o sin nuestra voluntad.
Para, Josefa escuchar esas palabras del joven que tanto se había ilusionado para hacerlo suyo, fue como un baldazo de agua fría y tuvo que retroceder vistiendo de nuevo su bata y le respondió:
--- Olzagon, ese "Código de Ética", no es tan cierto, por que la misma hija de los dueños de la empresa, lo infringió al acostarse con un trabajador de la empresa, por esa razón no estamos obligados a cumplirlo.
Olzagon, se sintió afectado por las palabras directas de Josefa, que el agarró carne y se sorprendió que ella haya conocido que el joven se encamó con Clorinda Manzanares; que en vez de ayudar fue peor, ausentado a los amantes, él le pidió a la anfitriona abrir la puerta de la calle, por que se retiraba a su casa.
Pero, ella no quería perder esta oportunidad, que no se presentaría otra vez y agregó:
---Olzagon, nosotros si podemos ser amantes, manteniendo en secreto nuestra relación que nadie más puede saberlo.
Olzagon, nunca aceptada imposiciones, ya había perdido el interés y le respondió:
--- Josefa, todo lo que se hace ocultando la verdad no funciona; parece que se enojaron los dioses del amor y lo echaron todo a perder; dejemos las cosas para más adelante, tal vez se presente otra ocasión y terminamos encamándonos, pero hoy se acabó y por favor abre la puerta de la calle que me retiro a mi casa.
Ante la negativa rotunda de Olzagon, la anfitriona dio un largo suspiro y con la llave en mano fue hasta la puerta y la abrió, el joven le dio el último abrazo carente de pasión, era sólo un cumplido de la despedida, salió esperó un taxi y que pasó y se fue a su casa: La Pensión, allí encontró a Clariza en la sala terminando de hacer la limpieza, ella era muy rigurosa con la higiene; ellos se abrazaron con disimulo, ya que dormían otros pensionistas en la casa, y en voz baja ella le dijo:
--- Más tarde te visito.
El joven Olzagon, si quería la visita de Clariza, ya que venía de un encuentro que se frustró a último minuto y en sus pensamientos se dijo: "Por algo será...", él se retiró a su dormitorio, ya que estaba cansado y tenía sueño.
Olzagon en su dormitorio, se cambió de ropa, se lavó y se acostó, rápidamente concilió con el sueño, que estando profundamente dormido se le reveló el hermoso cuerpo de Josefa, que la estaba haciendo suya y ella se le entregaba con toda su hermosura; pero, aún así razonaba que esto era un sueño, por que la abandonó a media noche, en esas inquietudes oníricas, ya en la madrugada llegó Clariza, quien ingresó en silencio, por que la puerta no estaba atrancada desde el interior, ella llegó vestida con una bata transparente igual como estuvo Josefa, el joven seguía plácidamente dormido, pero luchando si era verdad lo que soñaba.
Clariza, desconocía por completo lo que pasó antes, ella llegó a la cama, subió y se acostó encima de las frazadas que tapaban el cuerpo de Olzagon, apegó su boca a los labios que roncaban y le dio un beso, parece que el sensible cuerpo de Olzagon sintió la oportuna visita de la hembra que se despertó y sobresaltado se sentó, por la oscuridad no vio el cuerpo de Clariza que estaba a su costado.
Entonces, ella estiró su mano derecha y rozó la cabeza del joven y en voz baja y dulce, le dijo:
--- Olzagon, soy Clariza.
El joven se despertó del todo, y correspondió a la romántica visita abrazándola y se imaginó a Josefa porque estaba igual en el vestido y le dijo:
--- Bienvenida a mis aposentos.
Estando abrazados se revolcaron sobre la cama, besándose con ternura, él le desabonó los broches de la bata, ella igual le desabotonó la camisa del pijama y con la otra mano fue a la cintura y haló hacia abajo el pantalón, dejando libre a un pene erecto; ambos se acomodaron y desnudaron, ella se posesionó abajo, abriendo las piernas ofreciéndole su vagina, el joven subió encima y estando allí dirigió sus labios a los pezones que seguían siendo deliciosos a pesar que ella fue madre de dos hijos.
Ambos abrazados, el joven bajó sus brazos hacia los glúteos de la hembra los atrajo hacia él y la penetró, ella sintió ese empuje juvenil y ofreció su vagina que empezó a generar los líquidos lubricantes para disfrutar el apasionado encuentro sexual que siempre lo gozaban por las madrugadas, para evitar la curiosidad de algún otro pensionista y sobretodo para ella aprovechando que sus hijos dormían.
Ambos se revolcaron con movimientos eróticos, que lo disfrutaron con la eyaculación del joven y el orgasmo de ella; después del goce, ella regresaba a su dormitorio a dar la última pestañada, que siempre su cuerpo estaba agotado por el trabajo de la cocina.
El siguiente lunes, Olzagon llegó como siempre temprano a su trabajo, pasó cerca de la gerencia, que aún estaba cerrada la puerta y se dirigió a su oficina, allí encontró algunos problemas con los vendedores, él trató de buscar solución; pero, si había uno en especial con una cliente, que había sido su amante, era la dueña de la empresa "Comercial ELMALI", que era las dos primeras letras de Elsa Martinez Linares, quien era la más grande y exitosa empresaria del Mercado Mayorista, que Olzagon dejó de visitar para viajar a Tapal y nunca más hubo alguna relación por razones de trabajo.
El vendedor que la atendía, siempre tuvo problemas con ella, por que simplemente nunca hubo empatía entre ellos, ya que ella también lo tuvo con otro vendedor; entonces Olzagon armonizó la relación comercial acostándose con ella y disfrutaron de apasionados encuentros amorosos; esta vez ella pedía conversar con el Supervisor para renovar pedidos y se negó a pagar una fuerte deuda a la empresa.
Olzagon, que la conocía muy bien, le dijo al vendedor:
--- Señor, déjeme este asunto para resolverlo, vaya usted a visitar otros clientes y por el momento olvide que fue su vendedor, hay que limar asperezas con esta cliente que es importante para los intereses de nuestra empresa en el Mercado Mayorista.
Pero, el vendedor no quería perder a la cliente y replicó así:
--- Señor Olzagon, si yo me olvido de esa cliente, pierdo considerable suma de mis comisiones........
Olzagon, le interrumpió así:
--- Señor, usted ya perdió las comisiones al no lograr que la cliente pague sus deudas; le aconsejo que deje a la Supervisión, solucionar este grave asunto comercial, si le aseguro que si logro cobrar la deuda se le abonará sus comisiones.
En esos momentos, llegó el gerente Homero a la Supervisión, todos se pararon en señal de respeto, él los saludó y dirigiéndose a Olzagon, le dijo:
--- Olzagon, te necesito en la gerencia, ha sucedido una desgracia, la enfermera Josefa, fue atropellada antes de llegar a su trabajo.
Olzagon, se alarmó al escuchar la grave noticia y dirigiéndose a los vendedores, les dijo:
--- Señores, damos por terminada la reunión, ya ustedes saben lo que tienen que hacer, yo voy a la gerencia....
Continuaremos.................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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