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domingo, 9 de octubre de 2022

La Casa de la Loma tiene un Fantasma: Capítulo DCLXXX.- Melania Valverde Torres, y Jacinto Pérez Maza compartieron un almuerzo y lo asentaron con tragos, que bebiendo cada brindis se iban declarando su amor, que sentían; el caporal como un guitarrista empezó una canción declarando su amor....

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior; Melania Valverde Torres, hija del hacendado Miguel Valverde Torres, ella aún soltera y frisaba unos 30 años de edad; razonó que ya era tiempo: ¿qué hacer en su futuro como mujer?, ya que estaba superando la etapa de tener familia, por que su padre ya sobrepasaba los 60 años de vida y con la salud muy resquebrajada con dolencias crónicas como el reumatismo, que empeoró y tuvo que viajar a Amaluza, Ecuador; para someterse a un tratamiento curativo, ella sola en su dormitorio, pensó que le tenía admiración por el excelente trabajo que cumplía el caporal Jacinto Pérez Maza, y como tenía sentimientos encontrados, decidió invitar almorzar al caporal, para sacarse la duda si estaba enamorada de él, o tan sólo era simpatía y aprecio.... ..sigamos la historia.....

Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria. 
Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI.

Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.

Jacinto Pérez Maza, sentía exactamente lo mismo por Melania Valverde Torres, el creía que era simpatía y aprecio, por que ella fue quien lo contrató para el trabajo y lo apoyó en todas sus acciones que él necesitaba hacer para el desarrollo de las labores, que a veces chocaban con la oposición del hacendado Miguel Valverde Torres, que Melania lo defendió convenciéndolo a su padre que era correcto apoyar al caporal en el desarrollo de sus actividades.
Entonces, Melania Valverde Torres, decidida a conocer los sentimientos de su corazón, que lo hizo saber a la cocinera Juana, que invitaba a compartir el almuerzo como un caballero y un excelente trabajador tal como lo era Jacinto Pérez Maza.
Juana, al escuchar que su patrona estaba interesada por Jacinto, y que ella también había pensado lo mismo, dio por terminada su ilusión por el caporal y entendió perfectamente, que tal vez la patrona estaba enamorada del caporal; ella sólo sonrió por su desilusión y regresó a la cocina; por su puesto Melania, era inocente por que no conocía los sentimientos del corazón de Juana; cosas del amor donde competían por el mismo hombre la patrona y la cocinera.
Mientras tanto, Jacinto Pérez Maza, curó a la vaca que estaba herida y la entregó a un pastor para que la cuide; él se retiró y se metió en la hoyada, se salió del vado donde cruzaban los transeúntes(viajeros), caminó cuesta abajo buscando un chorro, que al encontrarlo, se desnudó y allí se bañó, sobándose la mugre que le atormentaba su cuerpo, tuvo que usar jabón de lavar ropa, sin aroma, que le sirvió perfectamente, secó su cuerpo con la ropa sucia (en aquellos tiempos en los campos no se usaban toallas), se cambió de ropa, la sucia la lavó con el mismo jabón que jabonó su cuerpo y la tendió al Sol para su secado.
En cambio, Melania que si se bañaba diariamente, tuvo la idea de sacarse el pantalón y se cambió por un vestido largo con botones delanteros, y su combinación se seda; ella no usaba sostén ni calzón, ya que nadie de las mujeres lo usaban en aquellos tiempos.
Llegó la hora del almuerzo, la cocinera Juana sirvió la mesa con platos de estofado de pechuga de gallina con yucas sancochadas, la entrada eran trozos de carne asada con cancha tostada de maíz blanco y dos jarros y una botella de licor macerado.
Jacinto Pérez Maza, llegó puntual oliendo a limpieza, ya estaba Melania esperándolo en el corredor; él al verla con ropa femenina quedó impactado y ella también quien al oler su cuerpo no apestoso a mugre por que se había cambiado de ropa limpia; eran las impresiones iniciales de las dos personas desiguales en cuanto a posición económica, pero unidos en el mismo trabajo y tal con vez con mucha probabilidad en los sentimientos del corazón.
Melania, muy femenina en sus modales, lo hizo pasar a la sala, la mesa estaba servida, si le llamó la atención a Jacinto ver una botella del trago macerado, que él calculó que si se la bebían terminarían borrachos (ebrios).
Melania, lo invitó a sentarse, así:
--- Jacinto, siéntate por favor.
Ambos sentados, ella junto sus manos con los dedos estirados bajó la cabeza y rezó una oración de agradecimiento a Dios, por el sustento, luego empezaron a comer con el uso de los cubiertos; pero, Jacinto nunca usó cubiertos de la mesa; astuto como siempre, observó a Melania como los usaba, él hizo lo mismo.
A medida que comían, se inició la conversación, ella le dijo:
--- Jacinto, cuéntame algo de tu vida con las mujeres, a ¿Cuántas les has destrozado el corazón?, seguro por allí dejaste hijos.
Jacinto, sintió incomodidad por la pregunta, por que él, nunca tuvo un compromiso serio, con ninguna mujer, tampoco tenía hijos, al menos él nunca lo supo que algunas de sus mozas (amantes al paso) haya quedado embarazada; él también entendió que Melania quería saber algo más de su vida, por que ella estaba interesada por él.
Jacinto Pérez Maza, manteniendo el respeto, le contestó:
--- Señorita Melania, tal como le informé en la mañana, nunca tuve una mujer a mi cargo, por ser un transeúnte(viajero) que no tenía una casa propia; siempre he sido un jinete que viajaba en compañía de amigos, pero mi vida tiene que cambiar, ya es tiempo de asentar cabeza.
Melania, sintió un remezón en todo su cuerpo, por lo que lo había observado hablar con toda atención, que ella iba descubriendo que su corazón también sentía ese "algo" por el caporal, por lo que ella sirvió el trago en los dos jarros y fue generosa ya que lo vertió arriba de la mitad y levantando su jarro, Brindó:
--- ¡¡¡ Salud Jacinto por nuestra vida !!!
Jacinto con el jarro levantado, lo llevó a la boca, observando a Melania, pues fue una sorpresa por que ella se bebió todo el contenido de una sola vez, él tuvo que hacer lo mismo y continuaron comiendo y conversando de las tareas del campo; pero, el trago hizo sus efectos y ella algo mamada (ebria), le preguntó:
--- Jacinto, si tuvieses la oportunidad, que una mujer se enamore de ti, la aceptarías como tu moza (amante) o como tu esposa.
Jacinto, también algo ebrio, pero muy sobrio en sus pensamientos y completamente desinhibido, sabiendo que se acercaba la posibilidad de algo más con Melania, tragó la comida que tenía en la boca y le respondió:
--- Si, señorita Melania, yo honraría a esa dama casándome con ella y la haría mi esposa para toda la vida.
Melania, entusiasmada por la respuesta de Jacinto, volvió a servir los jarros con el resto del trago que sobraba en la botella, y levantando su jarro, brindó:
--- ¡¡¡¡ Salud Jacinto, para que nos llegue el amor en nuestras vidas !!!!
Ambos bebieron sus tragos, igual que la anterior con todo el contenido de una sola vez; era costumbre beber en los campos, todo lo que se servía en los pocillos, y ellos estaban muy eufóricos esperando que florezca el amor....
Estaba finalizando el almuerzo, al menos en los platos sólo habían residuos de comida, también la botella del trago estaba vacía, por lo que Melania llamó a la cocinera y le dijo:
--- Juana, por favor trae otra botella de los tragos, que los traje desde Amaluza, el almuerzo estuvo tan bueno que debemos asentarlo con más tragos.
Juana, fue al almacén y buscó la botella del trago más antiguo, que no era de los que recién llegaron de Amaluza, y al encontrarlo se dio cuenta, que llevaba allí como añejo de más de cinco años, sacó la botella ya sin corcho y la entregó, los comensales ni se dieron cuenta, solamente sirvieron, que esta vez fue Jacinto, que lo sirvió controlando, lo hizo con un poco más abajo de la mitad, le entregó a Melania y brindó:
--- ¡¡¡¡Salud señorita Melania por nuestro amor !!!!
Melania, aún emocionada y bastante ebria, pero si escuchó perfectamente las palabras de declaración de amor que hizo el caporal al momento del brindis y lo repitió:
--- ¡¡¡¡Salud por el amor de nosotros !!!!
Ambos, bebieron sus tragos, ya estaban ebrios, pero aún no pasaba nada con intentos de abrazos o caricias; pero, si había colgada una guitarra vieja, que estaba empolvada, por que nadie la tocaba; pero, Jacinto si aprendió a tocar guitarra y lo hizo en el Ecuador, en casa de su secuaz con quien disfrutaba en largas parrandas después de los asaltos festejando el éxito o el fracaso cuando no lo lograban.
Jacinto, se levantó del asiento y fue a la pared, descolgó la guitarra, la limpió del polvo y empezó a tocar probando las cuerdas, si estaban templadas, se acercó a la mesa de pie con la guitarra sobre el pecho y le dijo:
--- Señorita Melania, le voy a ofrecer un pasillo (canción clásica del Ecuador), que tanto me gustó entonarlo en mis parrandas.
Melania, ya muy eufórica por el trago ingerido y por que iba escuchar música, le contestó:
--- ¡¡¡ Toca mi amor la mejor canción para mi corazón !!!
Juana la cocinera, quien sentía que perdió definitivamente su ilusión platónica por el caporal, ella salió a la sala y desde la puerta observaba que ambos completamente borrachos (ebrios) se estaban divirtiendo, que jamás lo hubiese permitido con don Miguel, ella sólo apreciaba sonriendo.
Entonces, Jacinto, comenzó a tocar las cuerdas, que lo hizo tan bien, que las notas musicales salían de la guitarra como si fuese la voz de la canción que desgarraba sentimientos del corazón, y empezó a entonar la canción, que también cantaba muy bien, por que era entonado y la primera nota decía: " Melania yo estoy enamorado de ti.............."
Continuaremos..................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

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