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domingo, 17 de diciembre de 2023

La Casa de la Loma tiene un Fantasma: Capítulo DCCXXIII.- Erasmo Huamán e Irenio Campos, fueron contratados por el hacendado como jinetes para arrear ganado vacuno; cuando llegaban a la hacienda encontraron a peones heridos por asaltantes que les robaron el ganado vacuno que ellos arreaban, Erasmo Huamán tomó la iniciativa para recuperar las reses....

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma, y como informamos en el capítulo anterior; los bandoleros Erasmo Huamán y su fiel compañero Irenio Campos, quienes pretendieron adelantarse en viajar a Socchabamba sin la compañía de los amigos con los que se comprometieron en la noche cuando bebían en la cantina; este desaire o traición, les originó que tuvieran un viaje completamente accidentado, por que fueron bloqueados por los huestes satánicos en la puerta de un cementerio; ellos trataban de cruzar y no lo pudieron hacer, hasta que fueron salvados por un hacendado quien viajaba con su familia en el mismo sentido, después se entabló rápida amistad, tanto así que el hacendado buscaba dos jinetes para arrear su ganadería y les ofreció el trabajo aún sin conocerlos, ya que ellos eran dos peligrosos asaltantes.. sigamos la historia...........


Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA", esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria. 
Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDECOPI


Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.

Los bandoleros Erasmo Huamán y su compañero Irenio Campos, quienes ya estaban pesimistas en sus intenciones de asaltar a la Familia Sánchez Calderón y Mulatillo, que al escuchar, que el aún desconocido hacendado les ofreció trabajo en su hacienda, que siempre fue su objetivo para asalto, lo curioso era que el trabajo consistía para arrear vacas, que ellos eran especialistas por su vasta experiencia en sus andadas como bandoleros.
Tal vez, era la oportunidad que ellos estaban esperando para un cambio en el rumbo de sus vidas, ante el acoso de los huestes satánicos que les obstaculizaban sus acciones en dirección a Socchabamba; ellos se miraron nuevamente entre si y con una sonrisa a flor de labios, esta vez fue Erasmo Huamán, que les contestó:
--- Amigos, nos han sorprendido con la oferta del trabajo; pues, nos están ahorrando el viaje, por que estábamos en la misma dirección de ustedes y como nosotros también hemos trabajado en ganadería, sabemos los quites de las vacas (trucos para evadir y ser arreadas), y como aún somos desconocidos, nos gustaría saber. ¿Cuánto será el pago por nuestro trabajo?
El hacendado que estaba muy entusiasmado, con estos dos aún desconocidos jinetes, sonriendo les contestó:
--- Muchachos, nosotros somos generosos con nuestros peones, les propongo para arrancar y conocerlos como hacen las tareas, les ofrezco 200 monedas nacionales mensuales a cada uno, dos toretes a escoger cada seis meses y una vaca parida al año, que les permitirá formar su familia en la hacienda, seguro que aún son solteros y en ese estado son errantes que no es ningún delito ya que todos empezamos así; pues tienen esta oferta de cambiar completamente sus vidas.
Erasmo Huamán al escuchar con suma atención las palabras del hacendado, que para él parecía un sueño, ya que siempre pasaba por su mente asentar cabeza y vivir tranquilo sin el peligro de alguien que lo busque para arreglar cuentas por haber sido víctimas de sus asaltos, le pareció muy atractiva la oferta; pero, había que saber que pensaba su compañero Irenio Campos, por lo que nuevamente intercambiaron miradas que coincidieron en los mismos pensamientos. y esta vez fue Irenio Campos, quien le contestó:
--- Señor hacendado, aceptamos su oferta de trabajo y le prometemos hacer una jornada cada día que usted quedará satisfecho con nuestras tareas, como le mencioné tenemos amplia experiencia en arrear ganado, hemos colaborado en otras zonas y nos gustas hacer esas faenas.
Esto era toda una anécdota, de como no iban a tener vasta experiencia si ellos eran bandoleros y asaltantes de haciendas, que el hacendado desconocía quienes eran ellos en realidad; pues, así suceden las acciones del destino que ofrece un cambio en la ruta de la vida, y conduce a hechos en apariencia contradictorios que resisten contra la realidad oculta de unos y la bondad y generosidad de la otra parte.
Si había en la mente del hacendado, que existía un riesgo en contratar a desconocidos, que algún momento, él pensó que fuesen bandoleros por trotar en noches oscuras; pero, desterró de su mente esos malos pensamientos y con un semblante de felicidad, por haber encontrado a los peones que tanto necesitaba, les dijo:
--- Muchachos, no saben ustedes lo feliz que me siento al haberlos encontrado en el camino, enfrentando a seres diabólicos, que ya me estaba regresando sin haber encontrado a los jinetes que tanto necesitaba, me siento seguro que contraté a los mejores peones que me harán la mejor tarea, acepto sus palabras y si estaré pendiente observando su trabajo, tenemos mucho por hacer y ustedes y los demás peones que ya los conocerán mañana, quiero decir más tarde, que me entusiasma empezará un nuevo día...
El hacendado hizo una pausa y agregó:
--- Muchachos, vamos avanzar un poco más rápido para llegar a la hacienda con nuevos jinetes, es una bendición del Todo Poderoso(Dios) por haber encontrado a ustedes como hombres de trabajo, que fue por pura casualidad y lo celebraremos cuando estemos en la hacienda.
Para, Erasmo Huamán y su compañero Irenio Campos, también era el inicio de una nueva era en sus vidas errantes; pues, ahora ellos iban a realizar un trabajo decente y completamente seguro sin el peligro de ser atacados o estar enfrentado desafíos de contrarios (enemigos).
Sin embargo, en la práctica siempre existen imponderables que escapan al control y chocan con las buenas intenciones, ya que se desconoce quienes serán sus nuevos compañeros de trabajo, ojalá no haya un testigo que sabe quienes son ellos; pues, esperamos que nadie destruya esta nueva vida de estos bandoleros muy arrepentidos de sus anteriores acciones malvadas.
Después de trotar por unas cuatro horas, llegaron a los primeros límites de la hacienda, encontrando a dos peones heridos levemente que esperaban al patrón para informar de malas noticias, que al verlos uno de ellos le dijo:
--- Patrón, anoche fuimos asaltados por desconocidos, cuando habíamos arreado el ganado para conducirlo a la otra banda, y como se nos hizo de noche muy oscura, nos quedamos para esperar que aclare con la Luna; pero, sorpresivamente llegaron un grupo de jinetes con sus machetes desenvainados y nos atacaron sin piedad, nosotros no pudimos impedir que los asaltantes arreen el ganado a la raya (frontera con el Ecuador), dos de los peones que los enfrentaron murieron defendiendo a la ganadería, los demás nos salvamos por la oscuridad que impidió ser vistos por ellos.
Erasmo Huamán y su compañero Irenio Campos, quienes no conocían estos terrenos, ni la distancia para llegar a la frontera, ellos sólo escuchaban, y el hacendado muy acongojado por la mala noticia, les contestó:
--- Dime: ¿Dónde están los muertos?
El peón le contestó:
--- La señorita Irma dispuso que sean velados en la casa hacienda, ya mandó a cuatro propios (encargados de hacer cosas muy rápidas) que fueran a Huarapa para comprar las cajas para enterrar a los finados.
Entonces, Erasmo Huamán e Irenio Campos, intervinieron y fue Erasmo Huamán, quien preguntó:
--- Amigo: ¿a que hora más o menos te asaltaron y cuántos eran ellos?
El hacendado muy sorprendido por los reflejos del jinete y las peguntas que hizo su recién contratado jinete. siguió escuchando y el peón le contestó:
--- Bueno no sé quien es usted, la noche era muy oscura, nosotros estábamos descansando, si escuché al "pájaro  del tiempo" que cantó(un ave nocturna que existe en algunas zonas y suele soltar un trino cada cierto tiempo que con exactitud coincide con la hora), creo que era la tercer vez que lo escuché, pero, el tiempo no aclaraba, ellos eran un grupo numeroso no pude calcular cuantos eran, pero, si noté que nos habían estado siguiendo por la precisión en atacarnos y a la vez arreaban al ganado en la dirección a la raya (frontera).
Erasmo Huamán, quien era un bandolero con experiencia, sabía exactamente como actuaban los asaltantes y los detalles de todas sus acciones. él mentalmente comenzó a calcular que los asaltantes tomaron una ventaja de unas 8 horas, algo muy difícil de detener o por lo menos intentar recuperar el ganado robado; pero, no se desanimó y siguió preguntando:
--- Amigo, dígame: ¿Cuántas cabezas de ganado arreaban ustedes?
El pastor, le contestó:
--- Bueno, eran 30 vacas de la loma chica, y 40 del potrero chico.
El hacendado al escuchar que fueron 70 reses que le habían robado, se enfureció y gritó:
--- Pero, hombre como es posible que ustedes no pudieron hacer nada; si la oscuridad les favorecía, es mucho ganado que me hayan robado.
Erasmo Huamán entendió la incomodidad del dueño y pensó que era tiempo de tranquilizarlo y dirigiéndose a él, le dijo:
--- Patrón, déjeme ayudarlo, sólo necesito rastreadores y que conozcan el camino hacia la frontera, ya ellos nos llevan más o menos 8 horas de ventaja, pero, como el ganado es muy numeroso el viaje les será muy lento, creo que todavía no hacen la entrega, seguro lo han planeado para esta noche, ellos probablemente ya llegaron a la raya o lo están haciendo en estos momentos, tenemos tiempo a nuestro favor para intentar recuperar las reses, sólo usted ordene quienes nos acompañarán, le prometo que haré todo lo posible para recuperar sus reses, ya empezamos a trabajar que para eso nos contrató.
El hacendado seguía sorprendido por la actuación de firmeza de Erasmo Huamán, él ordenó a los peones que estando heridos que no era de gravedad que busquen a otros y de inmediato acompañen al nuevo jinete y su ayudante y tratar de recuperar las reses, que tomando las medidas de los rastros de los caballos de los asaltantes les llevaban el paso para poder seguirlos; todos, salieron en número de 15 hombres más los dos jinetes nuevos (Erasmo e Irenio).
Erasmo Huamán, tomó el mando del grupo y ordenó el piquete de seguimiento con dos peones adelante que conocían el camino, y en las zonas llanas, ellos tratarán de trotar más rápido, ya que el día se estaba yendo con rapidez y la raya (la frontera) estaba muy distante, pero no desanimaba a Erasmo Huamán, quería demostrar a su patrón que fue una buena contratación como su jinete........
Continuaremos................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

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