Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., cuantas veces se ha dicho que la mujer es "El Sexo Débil", pero que más equivocados estamos de la realidad, por que ellas son tan fuertes y tal vez más poderosas que muchos hombres enclenques que pretendemos ser los que mandamos.
Cierta vez en una lejana comarca llena de vida y con el mejor medio ambiente que generosamente le dotó la sabia naturaleza; trataban de salir adelante un matrimonio con Papá, Mamá y tres hijos, ellos no eran cualquier familia, eran los hacendados con cientos de hectáreas de cultivos y pastos para una floreciente ganadería de más de 2,000 reses entre ellas vacas lecheras y toros de engorde, y para el manejo de próspera hacienda llamada : "La Pampa de Oro" había un lote de caballos y mulos que eran montados por ágiles peones y diestros caporales, ellos eran los generadores de la riqueza que les permitían a los hacendados disfrutar de una riqueza a manos llenas.
Aquí en la imagen se aprecia este bosquejo de lo emprendió la Señora Cristina, como una emprendedora en tus talleres de confecciones de ropa, que logró triunfar, gracias a ese empuje de ser una mujer con coraje.
Imagen del Blog: A Vuelo de un Quinde.
Esta fotografía se tomó 8 días antes de celebrar el centenario de su nacimiento el 25 de noviembre de 2010 en casa de su hija Flor de María Vargas Rodríguez.
El contenido de esta historia no es el caso de ella, pero si el ejemplo de una mujer de empuje que hizo honor a la mujer emprendedora que triunfa en la vida gracias a su trabajo.
Pero, don Emiliano como se llamaba el dueño era mujeriego y le gustaba beber licor en jornadas seguidas de 15 días; en cambio Doña Cristina, era la madre y esposa abnegada y sufría muchos por las aventuras de su consorte; él, la consideraba una mujer inútil por que no sabía nada de manejo empresarial.
Don Emiliano, no sudaba la "gota gorda" por lo que gastaba y desperdiciaba tanto dinero que le llagaba muy fácil a sus manos, se le atribuían hasta 35 hijos naturales (engendrados fuera del matrimonio)nacidos en las hijas, hermanas, primas de los peones de la hacienda, incluso habían comentarios que muchos de los peones tenían los "cuernos bien puestos".
Entonces, como era posible tanta riqueza en aquella hacienda si el dueño tenía una vida disipada y sin control; pues, la abundancia llegaba gracias al trabajo de un eficiente Caporal, que era el hacía y deshacía a su libre albedrío; incluso tomaba una parte de la riqueza generada por su trabajo y la estaba guardando para comprarse una hacienda vecina que desde hacía mucho tiempo atrás estaba en venta.
Cierto día, que ya llegaba a la "Hora de la Oración" (6:00 p.m.) o sea las 18 horas del día, Don Emiliano ensilló su caballo y sin despedirse de su noble y cariñosa esposa, montó y aplicó las espuelas a su corcel y partió y como la noche estaba oscura, su figura desapareció en la penumbra; el apurado jinete se iba a un encuentro con : "Juana Cabellos largos", ella era una mujer de tez blanca, alta de estatura, ojos verdes, su cuerpo era algo delgado y dotado de unas preciosas piernas que al caminar mostraban a unos abultados glúteos adornados por un largo cabello de color castaño claro; ella era toda una belleza que era la esposa del Caporal, con cuya dirección la hacienda era más productiva de la zona.
Lamentablemente el Caporal tanto se había dedicado al trabajo que descuidaba a su esposa y por esa razón ella no tenía afectos y cariños de su marido y lo necesitaba con urgencia, pero cuando él llegaba a casa estaba tan cansado y exhausto que no tenía fuerzas para hacer el amor con su bella esposa.
Don Emiliano, un viejo y matrero enamorador, sabía la carencia de amor de "Juana Cabellos Largos" y ese día envió a la Ciudad a su emprendedor Caporal para hacer una entrevista con unos perneadores de ganado (comerciantes ganaderos) y como estaba muy lejos; el empleado pernoctaría hasta el día siguiente, dejando libre toda la noche para cortejar a "Juana Cabellos Largos".
Pero el destino de los acontecimientos, había señalado un sendero diferente, por que como el Caporal llegó a la Ciudad se encontró con los comerciantes y estos aceptaron las condiciones para el comercio del ganado(reses) y ofrecieron al Caporal ir en tres días adelante a la hacienda para realizar la transacción comercial.
Por lo tanto, como todavía había Sol (seguramente eran las 17 horas del día), faltaba hora y media para oscurecer y como no tenía más que hacer, el Caporal, optó por regresar a la hacienda y así estar presente a las 6:00 a.m. de la mañana en el reparto de tareas a los peones que harían durante la jornada de ese día, el recorrido era de más o menos entre 4 a 6 horas de viaje.
Mientras tanto, Don Emiliano llegó a la casa del Caporal y como la esposa sabía que su esposo no iba a llegar esa noche, había decidido "hacerle caso al Patrón", era más bien la curiosidad por conocer una aventura que ella deseaba saborear por falta de afectos amorosos; ella sintió las pisadas del caballo y por su puesto del jinete que lo montaba, pero se hizo la "difícil", al llegar el jinete se apeó, tocó la puerta de la vivienda y nadie contestaba; entonces, insistió tocando con más fuerza, y esta vez si hubo reacción de la inquilina, quien desde adentro preguntó:
--- Quién toca la puerta tan fuerte que me está asustando?
Don Emiliano, que estaba casi cegado por la pasión de los deseos por fornicar con tan escultural mujer, contestó:
--- Soy Emiliano, he venido a visitarte y ofrecerte mi compañía, ya que te encuentras sola.
Era la razón que esperaba "Juana Cabellos Largos", ella se apresuró a abrir la puerta y ofreció sus brazos al patrón, quien le correspondió con un abrazo más fuerte y la levantó en vilo, cargándola hasta una cama que había en esa habitación, fue un amoroso encuentro prohibido y sin diálogos (las palabras sobraban) todo eran besos, caricias, abrazos y sexo, lo hicieron una vez luego otra, ella era un volcán en erupción y él, había destapado el cráter para que ella desfogue; luego de tanta pasión amorosa, ellos estaban agotados y se quedaron dormidos profundamente.
En el otro extremo, el Caporal aceleraba la marcha, aplicando las espuelas a su caballo, tenía un presentimiento que lo afligía que algo no estaba bien, no lo podía determinar en donde, pero deseaba llegar lo más rápido a su casa, y como el aire fresco de la noche favorecía la cabalgata, el jinete demoró 2 horas y media y siendo aproximadamente las 19 horas y media, ya estaba muy cerca de su casa, cuando se acercaba más vio un caballo ensillado y amarrado a una picota en el patio de su casa, todo su cuerpo sintió un terrible temor, por que pensaba que alguien había asaltado la casa; pero rápidamente recobró la calma, por que reconoció que el caballo era de su Patrón, pero a esas horas de la noche y hubo una interrogante: el qué hace aquí en mi casa a estas horas de la noche?
Para no hacer ruido, se apeó de su caballo, lo amarró en una estaca y caminó casi en puntillas en dirección a la puerta de su casa y esta estaba cerrada, la empujó y cedió sin resistencia, al abrirla escuchó un "concierto de dos ronquidos"; él, se dijo asimismo: "hay dos personas que se han quedado a dormir en la casa" y sin querer sacó una caja de fósforos (cerillos) y prendió uno, al hacerlo vio a su esposa completamente desnuda encima del cuerpo de su Patrón Emiliano también desnudo, apagó el fósforo y cegado por los celos sin control, desenvainó su chaveta que siempre la llevaba en la cintura y los atacó no hubo contemplaciones ni para la mujer, ni para el Patrón traidor..
Después de los crímenes y cuando recobró la calma y con más serenidad, pensó por un buen rato que iba hacer con los cadáveres y recordó que había ahorrado una fuerte suma de dinero y con esa ventaja, decidió enterrar los cuerpos, abriendo un hoyo de 5 metros de profundidad en uno de los cuartos de su casa, luego tiró los cuerpos al hoyo y los tapó con toda la tierra movida,como dice la gente: "los enterró bajo cinco estados" por ser gente malvada.
Ya eran las 6:00 a.m. de la mañana y como siempre estuvo el Caporal en el Gran Corral para distribuir las tareas a los peones, nada se sospechaba, todo era normal, enseguida fue hasta la Casa Hacienda y se encaró directamente con la flamante viuda, con estas expresiones:
--- Señora venga a hablar con usted para tomar decisiones drásticas en esta hacienda, ya no contamos con el Patrón, por que anoche los maté junto a mi esposa, los encontré trenzados uno sobre el otro; estaban tan dormidos que no sintieron mi presencia en ese estado los sorprendí y los asesiné......
El Caporal se tomó una pausa y agregó:
--- Como usted nunca participó en la dirección de la hacienda, no puede manejarla y le propongo comprar la propiedad, tengo el dinero suficiente para que usted viaje a la Ciudad a vivir feliz y si no quiere, igual tomaré a mi cargo toda la propiedad y como ya soy criminal, y si hay alguien que intente cruzarse en mi camino, no lo pensaré dos veces para defenderme.
El Caporal, nuevamente descansó y finalizó:
--- Usted señora es una dama y que nunca debió vivir en esta hacienda, solo fue la esposa sufrida del patrón, y como no tiene nada que hacer aquí, le entrego 200,000 pesetas de oro por el valor total de la hacienda y váyase mañana mismo, antes que me desanime.
La viuda ante el temor de ser asesinada por el Caporal, al día siguiente cargó con sus cosas más importantes y llevó a cuestas a sus hijos, llevaba tanto dinero y no sabía que hacer con ello, y recordó que siempre tenía un deseo de tener un taller de confecciones de ropa de marca, llegó a la Ciudad y se conectó con fabricantes de maquinaria y tejedores de telas finas y contrató los servicios de un técnico textil y juntos compraron un viejo local con techo y con instalaciones elementales, solo había que remozarlo para la instalación de los nuevos equipos.
Todo el proceso demoró 45 días y justamente el 8 de marzo de 1,970, la Señora Cristina (ese era el nombre de la viuda) inauguraba el Taller de Confecciones de Ropa de Alta Costura y la producción de los primeros meses ya estaba colocada en las mejores tiendas y boutiques de la Ciudad.
La señora Cristina, hizo honor a la mujer emprendedora que cuando tiene la libertad y la oportunidad de tomar decisiones triunfa en la vida y lo es así, por tiene las cualidades y habilidades para ser exitosa y por su puesto nunca más fastidiada con la compañía de un varón pusilánime.
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
ayabaca@gmail.com
ayabaca@hotmail.com
ayabaca@yahoo.com
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Mientras tanto, Don Emiliano llegó a la casa del Caporal y como la esposa sabía que su esposo no iba a llegar esa noche, había decidido "hacerle caso al Patrón", era más bien la curiosidad por conocer una aventura que ella deseaba saborear por falta de afectos amorosos; ella sintió las pisadas del caballo y por su puesto del jinete que lo montaba, pero se hizo la "difícil", al llegar el jinete se apeó, tocó la puerta de la vivienda y nadie contestaba; entonces, insistió tocando con más fuerza, y esta vez si hubo reacción de la inquilina, quien desde adentro preguntó:
--- Quién toca la puerta tan fuerte que me está asustando?
Don Emiliano, que estaba casi cegado por la pasión de los deseos por fornicar con tan escultural mujer, contestó:
--- Soy Emiliano, he venido a visitarte y ofrecerte mi compañía, ya que te encuentras sola.
Era la razón que esperaba "Juana Cabellos Largos", ella se apresuró a abrir la puerta y ofreció sus brazos al patrón, quien le correspondió con un abrazo más fuerte y la levantó en vilo, cargándola hasta una cama que había en esa habitación, fue un amoroso encuentro prohibido y sin diálogos (las palabras sobraban) todo eran besos, caricias, abrazos y sexo, lo hicieron una vez luego otra, ella era un volcán en erupción y él, había destapado el cráter para que ella desfogue; luego de tanta pasión amorosa, ellos estaban agotados y se quedaron dormidos profundamente.
En el otro extremo, el Caporal aceleraba la marcha, aplicando las espuelas a su caballo, tenía un presentimiento que lo afligía que algo no estaba bien, no lo podía determinar en donde, pero deseaba llegar lo más rápido a su casa, y como el aire fresco de la noche favorecía la cabalgata, el jinete demoró 2 horas y media y siendo aproximadamente las 19 horas y media, ya estaba muy cerca de su casa, cuando se acercaba más vio un caballo ensillado y amarrado a una picota en el patio de su casa, todo su cuerpo sintió un terrible temor, por que pensaba que alguien había asaltado la casa; pero rápidamente recobró la calma, por que reconoció que el caballo era de su Patrón, pero a esas horas de la noche y hubo una interrogante: el qué hace aquí en mi casa a estas horas de la noche?
Para no hacer ruido, se apeó de su caballo, lo amarró en una estaca y caminó casi en puntillas en dirección a la puerta de su casa y esta estaba cerrada, la empujó y cedió sin resistencia, al abrirla escuchó un "concierto de dos ronquidos"; él, se dijo asimismo: "hay dos personas que se han quedado a dormir en la casa" y sin querer sacó una caja de fósforos (cerillos) y prendió uno, al hacerlo vio a su esposa completamente desnuda encima del cuerpo de su Patrón Emiliano también desnudo, apagó el fósforo y cegado por los celos sin control, desenvainó su chaveta que siempre la llevaba en la cintura y los atacó no hubo contemplaciones ni para la mujer, ni para el Patrón traidor..
Después de los crímenes y cuando recobró la calma y con más serenidad, pensó por un buen rato que iba hacer con los cadáveres y recordó que había ahorrado una fuerte suma de dinero y con esa ventaja, decidió enterrar los cuerpos, abriendo un hoyo de 5 metros de profundidad en uno de los cuartos de su casa, luego tiró los cuerpos al hoyo y los tapó con toda la tierra movida,como dice la gente: "los enterró bajo cinco estados" por ser gente malvada.
Ya eran las 6:00 a.m. de la mañana y como siempre estuvo el Caporal en el Gran Corral para distribuir las tareas a los peones, nada se sospechaba, todo era normal, enseguida fue hasta la Casa Hacienda y se encaró directamente con la flamante viuda, con estas expresiones:
--- Señora venga a hablar con usted para tomar decisiones drásticas en esta hacienda, ya no contamos con el Patrón, por que anoche los maté junto a mi esposa, los encontré trenzados uno sobre el otro; estaban tan dormidos que no sintieron mi presencia en ese estado los sorprendí y los asesiné......
El Caporal se tomó una pausa y agregó:
--- Como usted nunca participó en la dirección de la hacienda, no puede manejarla y le propongo comprar la propiedad, tengo el dinero suficiente para que usted viaje a la Ciudad a vivir feliz y si no quiere, igual tomaré a mi cargo toda la propiedad y como ya soy criminal, y si hay alguien que intente cruzarse en mi camino, no lo pensaré dos veces para defenderme.
El Caporal, nuevamente descansó y finalizó:
--- Usted señora es una dama y que nunca debió vivir en esta hacienda, solo fue la esposa sufrida del patrón, y como no tiene nada que hacer aquí, le entrego 200,000 pesetas de oro por el valor total de la hacienda y váyase mañana mismo, antes que me desanime.
La viuda ante el temor de ser asesinada por el Caporal, al día siguiente cargó con sus cosas más importantes y llevó a cuestas a sus hijos, llevaba tanto dinero y no sabía que hacer con ello, y recordó que siempre tenía un deseo de tener un taller de confecciones de ropa de marca, llegó a la Ciudad y se conectó con fabricantes de maquinaria y tejedores de telas finas y contrató los servicios de un técnico textil y juntos compraron un viejo local con techo y con instalaciones elementales, solo había que remozarlo para la instalación de los nuevos equipos.
Todo el proceso demoró 45 días y justamente el 8 de marzo de 1,970, la Señora Cristina (ese era el nombre de la viuda) inauguraba el Taller de Confecciones de Ropa de Alta Costura y la producción de los primeros meses ya estaba colocada en las mejores tiendas y boutiques de la Ciudad.
La señora Cristina, hizo honor a la mujer emprendedora que cuando tiene la libertad y la oportunidad de tomar decisiones triunfa en la vida y lo es así, por tiene las cualidades y habilidades para ser exitosa y por su puesto nunca más fastidiada con la compañía de un varón pusilánime.
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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