Mi lista de blogs

domingo, 12 de noviembre de 2017

La Historia del Amor Cruel : Capítulo CCCXVIII .- Olzagon llega a la pensión de la señora Clariza y es recibido con simpatía; en respuesta él, ofrece sus servicios de ayuda, mientras siga recuperándose de su salud.....

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel, y como informamos en el capítulo anterior; Olzagon y Mónica Ronceros conversaron ampliamente, era propósito de ella, llevarlo a su casa para su posterior recuperación; pero ante la negativa del joven provinciano, ella tuvo que aceptar que ya no tenía ninguna relación con él; quedándole la única alternativa  de intentar iniciar una nueva relación con el médico Llanos, quien si la pretendía y asistirá a un almuerzo en el restaurante donde trabaja Mónica....


Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen la consistencia del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices. Fuente: Archivos del blog. Obra Literaria reconocida con Derecho de Autor, según Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI.

Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
 
Olzagon, rápidamente se recuperó y fue dado de alta, después de los dos días siguientes que conversó con Mónica Ronceros; fue a la pensión de la viuda Clariza, quien estaba fascinada con la personalidad del joven provinciano; quien al llegar lo recibió con un dulce y amoroso abrazo y le dijo:
--- Olzagon, estaba esperándote desde hace dos días, tu cuarto está listo, totalmente limpio para tu recuperación y por su puesto tendrás mi atención personal.
Olzagon, se quedó atónito de la cortesía, aprecio y cariño que le demostró la señora Clariza; ella seguramente le llevaría en edad unos 10 o más años, y bien podría ser la reemplazante de Laura, su anterior pensionista, quien le dio su "Pensión Soto" (casa, comida y poto).
Entonces, Olzagon correspondiendo a las atenciones recibidas por la señora Clariza, le respondió:
--- Señora Clariza, le estoy infinitamente agradecido por sus atenciones y le anticipo que me tendrá que soportar por mucho tiempo; su sobrino que fue a visitarme al Hospital, me hizo mención de su interés por mi salud, gracias una vez más, le prometo respeto y cumplimiento en el pago de la pensión.
Doña Clariz,a algo emocionada por que ya tenía a en su casa al joven muy deseado por ella, le respondió:
--- Olzagon, por favor pasa y sube e instálate en tu dormitorio, ya lo conoces; yo tengo que preparar el almuerzo para los pensionistas, ya tendremos mucho tiempo para conversar ampliamente; además, tengo que ir al medio día a sacar a mis hijos del colegio.
Olzagon, quien era muy acomedido, intuyó, que tendría que ayudarla sacándole los hijos del colegio, mientras ella prepara los alimentos y le dijo:
--- Señora Clariza, el médico me prohibió que me exponga al Sol para no afectar la sanación de la nariz; pero si puedo usar sombrero y por pocos minutos yo puedo recoger a sus hijos del colegio.
La señora Clariza, entendió que era una ayuda invalorable recoger a sus hijos, pero ellos no lo conocen, ni tampoco el guardián de la puerta del colegio, y como él, tenía tapada parte de la cara con las vendas de la nariz, su presencia era sospechosa y no le darían sus hijos a un desconocido, y tenía que decirle expresiones para no ofenderlo y le contestó:
--- Olzagon, creo que debes cuidar tu salud y no puedes estar saliendo a exhibir tu nariz al Sol y la contaminación del medio ambiente; creo que no es buena idea, pero te agradezco, mejor cuida la casa mientras yo salgo.
Pero, Olzagon no era un individuo que se rinde fácilmente y como era insistente y jamás estaría sentado sin hacer nada y adivinando los pensamientos de la señora Clariza y le contestó:
--- Señora Clariza, tal vez usted desconfía de mi persona, vamos juntos y allí me presenta al guardián o profesor, que yo puedo recoger a los niños y desde mañana le haré ese trabajo durante 20 días que me ordenó el médico como: "Descanso Médico", ¿Qué dice....?
La señora Clariza, necesitaba ese apoyo, lo mira con ternura, extendió su mano derecha y rozó la mejilla izquierda del joven provinciano en actitud de afecto y le contestó:
--- Olzagon, eres muy tenaz, que no me acusen en el Hospital por exponerte al aire libre, sabiendo que estás en recuperación de la operación a tu nariz; pues vamos al colegio.
Ambos personajes salieron de la casa y se fueron al colegio que estaba ubicado a unas 5 cuadras desde la casa, el joven provinciano se puso un gorro con visera amplia que cubría todo su rostro.
Llegaron al colegio y ya estaban saliendo los escolares con sus padres o tutores; doña Clariza saludó al guardián de la puerta que hacía las veces de jefe de seguridad y él;  le contestó el saludo, preciso instante que ella le dijo:
--- Don Sebastián, le presento al joven Olzagon, es mi nuevo pensionista y como está de descanso médico, en adelante él recogerá a los niños.
El guardián extendió su mano derecha en señal de saludo, diciéndole:
--- Mucho gusto en conocerlo joven..
Olzagon,  le dio la mano y le contestó:
--- Es un placer señor, espero verlo por varios días.
Después el guardián los hizo pasar; había un amplio patio lleno de colegiales, padres de familia y profesores, al frente y costados estaban las aulas en tres pisos.
La señora Clariza, esperó a sus hijos, pasaron unos instante, primero apareció el hijo mayor quien se llamaba Francisco, pero le decía Pancho, en poco rato apareció el segundo Alejandro, pero lo llamaba Jano; la señora Clariza presentó sus hijos a Olzagon y les indicó que a partir del día siguiente será él, quien los cogerá.
Luego, salieron los cuatro personajes y rápidamente caminaron hasta la casa; como todo niño estos escolares eran juguetones e inquietos era un símbolo de buena salud.
Al llegar, la señora Clariza pasó apresuradamente a la cocina, ya que había dejado ollas hirviendo y otras con la comida casi lista para bajar, felizmente nada se quemó y bajó todas las ollas y el aroma de los potajes que había preparado inundaba la casa; justo a tiempo por que llegaron cuatro pensionistas, quienes se sentaron en la mesa a esperar que le sirvan sus alimentos, pasaron unos dos minutos y llegaron dos más.
Doña Clariza, dio una nueva limpieza a la mesa del comedor y comenzó sirviendo las ensaladas como entradas del almuerzo, le indicó a Olzagon que tome asiento en la misma mesa y cuando estaban los siete pensionistas incluido Olzagon  y que ya había servido todos los platos les dijo:
--- Señores Pensionistas(comensales), tengo el honor de presentarles al joven Olzagon, quien es el nuevo pensionista y será el número siete, tuvo un accidente en su nariz y se encuentra en recuperación.
Los allí presentes levantaron la cabeza mirando al aludido recién llegado y sin dar la mano, casi al unísono dijeron:
--- "Bienvenido Olzagon "
Luego de las presentaciones, los pensionistas(comensales) que estaban con el tiempo medido comenzaron a comer aceleradamente, y uno más viejo que se sentó junto a Olzagon, quien no estaba apurado y comía lentamente entabló conversación con Olzagon y le dijo:
--- Bienvenido amigo Olzagon, aquí en esta pensión se come muy bien, tal como lo está viendo hay tres platillos y además un vaso de jugo, igual es en la cena, solo que el jugo se reemplaza con una taza de café, leche o té, le aseguro que aquí se sube de peso jajajajajaja
Olzagon, que no tenía ningún problema con las comidas, ya que él, tenía un lema: "Yo soy buen pobre y como de todo " y le contestó:
--- Gracias amigo por la bienvenida, y sobre la comida efectivamente tiene usted razón; la sazón sobre sale con el aroma que inunda este comedor, creo que efectivamente subiré de peso jajajajaja.
Después del almuerzo, los comensales que no vivían allí se retiraron a sus casas y los que tenían dormitorio allí se fueron a sus cuartos a descansar.
Olzagon, hizo lo mismo, se fue a su dormitorio y al entrar encontró un platillo con un sabroso pastel sobre la cama, que no estaba incluido en la comida de la pensión, el sorprendido joven un poco avergonzado no sabía si servirse o esperar a la señora Clariza, pero ella estaba muy atareada lavando platos y ollas en la cocina......
Continuaremos...................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

No hay comentarios: