Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con La Historia del Amor Cruel, entre Iarma y Olzagon, y como informamos en el capítulo anterior; Elsa Martinez Linares y Olzagon, disfrutaban de una juerga en el lujoso Bar Toscano y después de beber y bailar y a iniciativa de Elsa, fue quien invitó a Olzagon a su departamento de soltera, que lo guardaba celosamente y que hoy al finalizar los tragos, se irán a este aposento; pero, que si advirtió Elsa a Olzagon que ella tenía aversión al sexo, por que muy traumático su primera vez, por esa razón rechazaba el sexo; pero esta vez habían las condiciones amorosas propicias para darse una nueva oportunidad de disfrutar una unión carnal diferente....
Aquí en la imagen observamos una típica representación de la terrible situación que muchos hogares atraviesan en el transcurso de existencia por que siempre hay la existencia de un tercer elemento (amante tanto para él como para ella) que como una tentación tenebrosa carcomen las consistencias del matrimonio, y más si los esposos viven solamente la apariencia y no la triste realidad de que no son felices. Fuente: Archivos del blog. Obra Literaria reconocida con Derechos de Autor, según Partida Registral No. 00855-2012, Asiento: 01; con fecha: 10 de Agosto de 2012, por : INDECOPI.
Este es el símbolo de Marca Perú, que distingue para todos los productos elaborados por peruanos.
Elsa Martinez Linares, quien lideraba esta juerga con su propio bolsillo y que la compartía con el joven Olzagon, a quien apenas conocía desde 06 horas atrás, en su compañía se disponía a invadir la privacidad de su departamento de soltera, y es más que eso, era su lugar de descanso y relajamiento que le permitía desinhibirse y abandonar la rutina del trabajo.
Cuando ella estaba sola en su dormitorio se desnudaba completamente y con la ayuda de un enorme espejo de piso a techo, ella miraba y admiraba su cuerpo, que por cierto era muy bien formado y libre del vestido; se apreciaba: unos abultados senos naturales, una cintura espigada y avanzando hacia abajo a la pelvis que estaba poblada de una exuberante cantidad de vellos; el llamado: "Monte de Venus" era muy copioso en el cuerpo de ella; luego seguían unas caderas anchas y glúteos homogéneos, que terminaban en muslos y piernas anatómicamente bien proporcionadas; realmente el cuerpo de Elsa era como de una reina de belleza.
Elsa, después de pagar la cuenta en el bar, que fue muy costosa por la cantidad de billetes que sacó de su cartera y dándole una propina al mesero, le dijo:
--- Necesito un taxi de confianza...
El mesero agradeciendo la propina, se apresuró a contestar y dijo:
--- Señora, no se preocupe, el recepcionista y yo; elegimos a don Nemesio, él conduce un Buick Sedán, con asientos elegantes y maneja con cuidado y estará a sus ordenes por el tiempo que lo necesite.
Elsa, muy agradecida por la atención le dijo:
--- Muchas gracias, ahora nos vamos..
El mesero salió y dejó a la pareja solos, Elsa mirando apasionadamente a Olzagon, le dijo:
--- Amor , nos vamos
Ella intentó pararse, pero no pudo se quedó sentada; instante que los reflejos de Olzagon funcionaban a la perfección, quien se levantó como una flecha y fue hacia la silla de ella, la abrazó con dulzura y la ayudó a levantarse, parece que la ingesta de los tragos, ya habían hecho sus efectos y ella estaba ebria, al menos así lo hizo notar.
Pero, sólo era una treta para probar la reacción de su juvenil pareja y vaya que la pasó con nota sobresaliente, ella se sintió segura que estaba bien acompañada y que valía la pena llevarlo a su departamento de soltera, no digo este pensamiento, se lo guardó para ella sola; y ahora con la "ayuda" de Olzagon se levantó colgada de los hombros besándolo con ternura y salieron abrazados; el gran salón estaba abarrotado de clientes y bebedores, tal vez algunos de ellos conocían a Elsa, pero nadie comentó, sólo la observaban en silencio, que era notorio la desigual pareja por edades, pero era divertido ver a la amorosa pareja iniciar un nuevo romance.
Ellos llegaron a la puerta, allí estaba el siempre amable recepcionista, quien quedó muy sorprendido ver por primera vez a Elsa emparejada con un joven que más parecía su hijo que un amante; pero que importa lo que la gente piense, lo que interesa es el nacimiento de un romance que marcará resonancia en el ambiente casi exclusivo del sector pudiente.
Entonces, el recepcionista dejando atrás sus pensamientos de juzgamiento y con su natural sonrisa, le dijo:
--- Señorita Elsa, el automóvil de don Nemesio estará a sus ordenes, ya está afuera aguardándolos..
Elsa metió la mano a la cartera y sacó unos billetes que desimuladamente los llevó a la mano derecha del recepcionista y le agradeció así:
--- Muchas gracias por sus servicios...
El recepcionista guardando la propina, le contestó:
--- Fue un honor para el Bar Toscano contar con su preferencia, les deseo que disfruten una noche placentera.
La pareja siempre abrazados y desinhibidos, salieron del lujoso antro y a pocos pasos había estacionado un lujoso taxi Buick Sedán de color negro y que brillaba con la luz del bar, Elsa al llegar le preguntó:
--- Buenas noches: ¿Es usted el señor Nemesio?
El amable taxista de inmediato se bajó y le contestó:
--- A sus ordenes Señora, soy Nemesio...
Elsa, quien seguía abrazada a Olzagon, le dijo:
--- Muy bien, quiero que nos lleve al barrio" Los Pinos Silvestres", allí estaremos por espacio de 03 horas, luego saldremos y nos llevará a nuestro domicilio con direcciones diferentes; probablemente ocuparemos sus servicios por espacio de 05 horas, quisiera conocer el costo, que será cancelado por mi persona, que seré la última en bajar.....
Don Nemesio, muy sorprendido, por que nunca antes tuvo un servicio de taxi como este, él le contestó y dijo:
Señorita, es un largo recorrido llegar a la Residencial "Los Pinos Silvestres", yo haré con el mayor gusto y aguardaré el tiempo que usted disponga, al final creo que será una tarifa razonable de 800 monedas.
Elsa, se apresuró a contestar, así:
--- Trato hecho vamos.
El chofer abrió la puerta posterior derecha de su automóvil y subieron los pasajeros, luego él subió a su volante y partieron, por su puesto la pareja se abrazaron y compartieron besos en silencio, no había palabras, no era necesario el amor en silencio se disfruta a plenitud....
Después de casi 30 minutos de recorrido, llegaron a la zona Residencial "Los Pinos Silvestres", era un barrio exclusivo, aún en la noche se notaba grandes mansiones, con bien cuidados jardines, en completo silencio, no habían transeúntes, tampoco negocios, pero si vigilantes uniformados en las esquinas en silencio ni siquiera conversaban entre ellos.
Hasta que atravesaron una boca calle y siguiendo unos 40 metros de la calle, había un lujoso edificio de unos cuatro pisos con estacionamiento en el primer piso y Elsa indicó al chofer:
--- Por favor allí estacione, nos quedaremos por espacio de tres a cuatro horas, usted puede ingresar y estacionarse, no está permitido automóviles estacionados en la calle, o si prefiere puede trabajar por ese lapso de tiempo.
El respetuoso chofer le contestó:
--- Señorita, estoy a su servicio, ingresaré y estacionaré el automóvil en el interior y allí los aguardaré.
Un conserje les abrió la puerta de acceso, ingresó el automóvil, se estacionó se bajaron sus pasajeros y se dirigieron al ascensor, al accionar el botón de subida, se abrió la puerta, allí estaba un ascensorista uniformado, quien saludó a la señorita Elsa y le dijo:
--- Señorita Elsa, su Nana, estuvo en el departamento, pero salió y dijo que si usted llegara, que ella regresa mañana temprano.
Elsa, dio un suspiro de alivio y le agradeció, ella le dijo en el oído a Olzagon:
--- Estamos solos como dos tortolitos..................
Continuaremos..................
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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