Ahora, el arqueólogo Timothy Darvill, de la Universidad de Bournemouth, acaba de realizar un nuevo estudio sobre Stonehenge. Basándose en los más recientes hallazgos llevados a cabo en el círculo de piedra y en el análisis de otros antiguos sistemas calendáricos contemporáneos ha concluido que el emblemático yacimiento es, sin duda alguna, "un calendario solar basado en un año solar tropical de 362,25 días. La clara alineación solsticial de Stonehenge ha llevado a la gente a sugerir que el sitio incluía algún tipo de calendario, desde el anticuario William Stukeley (el primero en defender esta hipótesis)", afirma Darvill...... siga leyendo....................
Un estudio llevado a cabo por un arqueólogo británico sugiere que el círculo de piedras más famoso del mundo pudo actuar como un calendario solar, alineado con los solsticios de verano y de invierno, que marcaba un año de 365,25 días.
Actualizado a
El impresionante círculo de gigantescas piedras erguidas que es Stonehenge encuentra en las tierras bajas del sur de Inglaterra, a unos 120 kilómetros de Londres. Es uno de los yacimientos arqueológicos más fascinantes, pero menos comprendidos en el mundo.
Stonehenge es sólo uno más de los muchos círculos de piedras que se construyeron en la Gran Bretaña neolítica. No obstante, este círculo de megalitos (piedras grandes) en concreto lleva cientos de años fascinando a los especialistas. Habiendo sido objeto de muchos mitos y supersticiones. Todos los que visitan el monumento hoy día quedan impresionado por las gigantescas piedras erguidas, un efecto que debió de ser mucho más apabullante para las personas del Neolítico que lo construyeron, hace 4.000 años.
https://mihistoriauniversal.com/prehistoria/stonehenge
¿Por qué se construyó Stonehenge?
Nadie conoce con seguridad el propósito do Stonehenge, aunque está claro que era un lugar de gran importancia para los habitantes neolíticos y de comienzos de la Edad del Bronce de la zona de alrededor. No parece que sus habitantes vivieran en él, pues en la zanja y entre las piedras sólo se han encontrado unos pocos enterramientos. Sin embargo, algo hizo que a lo largo de varios siglos los agricultores y ganaderos de la región dedicaran su tiempo y sus energías a edificar esta gigantesca construcción......
https://mihistoriauniversal.com/prehistoria/stonehenge
En las décadas de 1950-1960, algunos historiadores sugirieron que Stonehenge pudo haber sido un observatorio o un medio primitivo para predecir acontecimientos astronómicos. De hecho, durante el solsticio de verano, el 21 ó 22 de junio, el sol amanece casi exactamente sobre primera Heel Stone.
Exceptuando este detalle, pocas pruebas más existen do que Stonehenge estuviera alineado con las estrellas y planetas; en la actualidad, la mayoría de los arqueólogos no aceptan la idea de que Stonehenge fuera un observatorio astronómico. En vez de ello consideran que era un lugar do reunión o zona ceremonial, destinada a proporcionar a los campesinos y ganaderos de la zona un poderoso sentido de comunidad. Servía como un visible y duradero recordatorio de los antepasados que habían reclamado el territorio donde vivían. Un poderoso jefe erigió las piedras más grandes. Que quería hacer de él el monumento más elaborado de la región, visible desde muy lejos en toda la llanura que lo rodea.
https://mihistoriauniversal.com/prehistoria/stonehenge
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) ha confirmado que Stonehenge podría ser despojado de su estatus como Patrimonio de la Humanidad ante las preocupaciones de que un túnel de carretera, respaldado por el Gobierno británico, dañe irreversiblemente un área de “valor universal excepcional”, reseña The Guardian.
El organismo de patrimonio de la ONU advirtió a las autoridades del Reino Unido que el famoso monumento megalítico en el condado Wiltshire se colocará en su lista de lugares “en peligro” si se lleva a cabo el planeado proyecto de infraestructura valorado en 2.340 millones de dólares. De tal modo que el sitio estaría a solo un paso de ser eliminado de la lista del Patrimonio Mundial, que incluye tesoros como las pirámides de Egipto y el Taj Mahal.
El organismo aseveró que el Gobierno no había “cumplido con sus obligaciones” de proteger el sitio, mientras que las autoridades de Liverpool calificaron la decisión de “incomprensible”, argumentando que el “sitio del Patrimonio Mundial nunca ha estado en mejores condiciones”.
Stonehenge
El propósito sigue siendo un misterio. construyeron la estructura hace 5,000 años y siguieron añadiéndole rocas durante un período de 700 años despues,., solo un círculo de piedras en huelga cerca de lo que ahora es Salisbury, Inglaterra.Esta fabricación fue fechado oficialmente a fines del Neolítico (siglo XX aC), ubicado cerca de Amesbury, en el condado de Wiltshire, Inglaterra, a unos quince kilómetros al norte de Salisbury.
https://steemit.com/spanish/@ordosjc/el-misterioso-monumento-stonehenge
- El monumento neolítico está hecho de piedras de origen local y distante.
- La 'Piedra del altar' ha estado vinculada durante mucho tiempo a Milford Haven, en Pembrokeshire
- Esto condujo a la teoría de que las piedras viajaban por mar y hasta el Canal de Bristol
- Un nuevo análisis encontró que la Piedra del Altar no coincide con las rocas de Milford Haven
- Por lo tanto, ahora no hay 'evidencia científica' para apoyar la teoría de la balsa, dijeron los expertos
- En cambio, parece más probable que las piedras recorrieran una ruta similar a la A40
Los bloques de piedra azul de Stonehenge llegaron por tierra, concluyen los arqueólogos, desmintiendo la teoría de que las losas gigantes fueron transportadas en balsa desde Gales a la llanura de Salisbury.
Desde hace tiempo se sabe que el famoso monumento neolítico está formado por piedras locales y algunas de fuentes más lejanas, en las colinas Preseli de Gales. El debate sobre qué camino tomaron estas rocas hacia Stonehenge ha estado anclado durante mucho tiempo debido a un bloque único llamado 'Piedra del Altar', que se cree que se recolectó en el camino.
https://terraeantiqvae.com/m/blogpost?id=2043782%3ABlogPost%3A475318
El círculo de piedra de Stonehenge, en la inglesa llanura de Salisbury, es, sin duda alguna, uno de los monumentos megalíticos más famosos del mundo. Muchas teorías se han escrito respecto a su función, por ejemplo se ha supuesto que en el lugar se llevaban a cabo algún tipo de ceremonias, aunque la hipótesis más aceptada es la que postula que este antiguo henge se utilizó como un gigantesco calendario dada su alineación con los solsticios.
Mapa de situación de Stonehenge en el sur de Inglaterra.
SEMANAS DE DIEZ DÍAS
Ahora, el arqueólogo Timothy Darvill, de la Universidad de Bournemouth, acaba de realizar un nuevo estudio sobre Stonehenge. Basándose en los más recientes hallazgos llevados a cabo en el círculo de piedra y en el análisis de otros antiguos sistemas calendáricos contemporáneos ha concluido que el emblemático yacimiento es, sin duda alguna, "un calendario solar basado en un año solar tropical de 362,25 días. La clara alineación solsticial de Stonehenge ha llevado a la gente a sugerir que el sitio incluía algún tipo de calendario, desde el anticuario William Stukeley (el primero en defender esta hipótesis)", afirma Darvill.
Stonehenge, visto desde el noreste.
En un reciente estudio publicado por Timothy Darvill, el investigador concluye que Stonehege fue un calendario solar basado en un año solar tropical de 362,25 días.
Darvill examinó las piedras sarsen (un conjunto de grandes bloques de arenisca utilizados para conformar uno de los círculos concéntricos internos de Stonehenge) y llegó a la conclusión de que fueron colocadas durante la misma fase constructiva, hacia 2500 a.C. Además, todas procedían de la misma cantera y permanecieron siempre en la misma formación. Según Darvill esto indicaría que las piedras "actuaron" todas como una unidad. Darvill también examinó su numerología y las comparó con otros elementos calendáricos de la misma época. Así, con todos los datos en la mano, el investigador lanzó la teoría de que las piedras eran una representación física del año y servían para ayudar a los antiguos habitantes de la región a calcular los días, las semanas y los meses. "El calendario propuesto funciona de una manera muy sencilla. Cada una de las 30 piedras en el círculo de piedras sarsen (que estaban cubiertas con dinteles y de las que hoy quedan 17) representa un día dentro de un mes, dividido en tres semanas, cada una de ellas de 10 días", explica el autor del estudio, quien añade que las piedras distintivas en el círculo marcan el inicio de cada semana. Este tipo de semanas de 10 días nos puede parecer inusual, pero en la antigüedad hubo muchas culturas, como la egipcia o algunas del Mediterráneo oriental, que también lo adoptaron.
Piedra sarsen S10, a la izquierda, junto a la más pequeña S11, a la derecha.
MESES DE CINCO DÍAS Y AÑOS BISIESTOS
Con el objetivo de que todo cuadrase a la perfección, Darvill afirma que los antiguos constructores de Stonehenge también tuvieron que intercalar en el círculo de piedras un mes de cinco días y añadir un día más cada cuatro años para que coincidiera con el año solar. Según Darvill, "el mes intercalado, probablemente dedicado a las deidades del sitio, está representado por los cinco trilitos (compuestos por tres grandes piedras, dos horizontales y una vertical) que hay en el centro del círculo, y las cuatro piedras situadas fuera del henge proporcionan marcadores para señalar hasta un día adicional". Por otra parte, los solsticios de inverno y de verano estarían enmarcados por los mismos pares de piedras cada año.
Trilitos S53 y S54 unidos con un dintel.
Según Darvill, el mes intercalado, probablemente dedicado a las deidades del sitio, está representado por los cinco trilitos (bloques de piedras con dinteles) que hay en el centro del círculo.
Sin embargo, el estudio, publicado en la revista Antiquity, no ha logrado convencer a todos los investigadores, y aunque muchos están de acuerdo con las conclusiones a las que ha llegado Darvill, otros afirman que los números utilizados para describir el calendario se emplean de forma selectiva y poco convincente. Aun así Darvill está convencido de la veracidad de su teoría y de las implicaciones que esta podría tener. "Encontrar un calendario solar representado en la arquitectura de Stonehenge abre una forma completamente nueva de ver el monumento como un lugar para la vida, un lugar donde el ritmo de las ceremonias y las fiestas estaba conectado con el tejido mismo de la universo y los movimientos celestiales en los cielos", concluye el investigador.
- ¿Te gusta la historia? ¿Eres un amante de la fotografía? ¿Quieres estar al día de los últimos avances científicos? ¿Te encanta viajar? ¡Apúntate gratis a nuestras newsletter National Geographic!
La construcción de este imponente conjunto empezó hace cinco mil años y fue abandonado mil quinientos años después; todavía no sabemos por qué se edificó ni las razones que llevaron a su olvido
Actualizado a
Cuando oímos la palabra «Stonehenge», acude a nuestra mente la imagen de un círculo pétreo que se alza, solitario, sobre la verde hierba de una llanura en Gran Bretaña. Este venerable monumento es la estructura megalítica más famosa del mundo, pero lo cierto es que sabemos poco sobre quiénes lo levantaron y la función que cumplió. Situado en la planicie de Salisbury, en el condado de Wiltshire (a unos 130 km al oeste de Londres), se estima que su construcción se desarrolló a lo largo de unas ochenta generaciones, durante unos 1.600 años.
El conjunto que hoy vemos en pie está compuesto por un círculo interior con seis grandes bloques de piedra rematados por tres colosales dinteles y por un círculo exterior de diecisiete monolitos con dinteles. Esto es todo lo que queda de un monumento megalítico que en su día incluyó unos 162 elementos pétreos, y cuya construcción se ha atribuido a romanos, sajones, daneses, el mago Merlín, los druidas y las primeras comunidades agrícolas de Gran Bretaña. La imagen actual no tiene más de medio siglo de antigüedad: se remonta a 1964, cuando las estructuras líticas fueron trasladadas por última vez. Sólo siete de los 25 soportes (y dos dinteles) que se mantienen en pie permanecen inalterados. Los otros han sido levantados y reparados al menos en una ocasión, y en el siglo XX varios megalitos fueron asentados en hormigón.
¿CUANDO SE CONSTRUYÓ STONEHENGE?
Hoy sabemos que Stonehenge surgió a finales del Neolítico, hacia el año 3100 a.C. Durante este período de la historia se produjo el paso de las bandas de nómadas cazadores-recolectores a las sociedades agrícolas, sedentarias y que dependían de cultivos y animales domésticos. Esa época se asocia con el nacimiento de nuevas prácticas religiosas centradas en monumentos de carácter permanente, hecho relacionado con el asentamiento de las comunidades humanas en un territorio concreto. De estos rituales son testimonio los monumentos megalíticos presentes en Gran Bretaña, Irlanda y la costa atlántica de la Europa continental.
Recientes investigaciones arqueológicas (The Hidden Landscapes Project, de la Universidad de Birmingham, y The Stonehenge Riverside Project, de la Universidad de Sheffield, financiado por National Geographic Society) testimonian que unos mil años antes de la construcción de Stonehenge, la planicie de Salisbury albergaba grandes túmulos con enterramientos colectivos, conocidos como long barrows, «túmulos largos». En este paisaje ceremonial, los agricultores de finales del Neolítico construyeron un terraplén y un foso circular de unos 110 metros de diámetro.
Ésa fue la primera fase de lo que luego se convertiría en Stonehenge. Le siguió, unos cien años más tarde, una segunda fase con la construcción de estructuras de madera en el interior del terraplén. El monumento que hoy contemplamos corresponde a la tercera fase constructiva, entre 2600 y 1600 a.C., cuando se levantaron los grandes bloques de piedra que le confieren su aspecto singular.
GIGANTES DE PIEDRA
El nuevo monumento, erigido en el área central del terraplén, era un círculo pétreo con un diámetro de unos 30 metros. Sus constructores emplearon probablemente cuerda y postes de madera para marcar un punto central y la posición de cada megalito alrededor de aquél. Cuando los grandes bloques de piedra arenisca (sarsen) llegaban a Stonehenge, los canteros les daban el tamaño adecuado y pulían su superficie. Después se levantaba cada monolito en el lugar asignado.
UN MONUMENTO EMBLEMÁTICO
Cuando las grandes jambas estaban firmemente asentadas, se colocaban los dinteles. Posiblemente eran trasladados hasta su emplazamiento mediante rodillos, y luego eran izados sobre los bloques de arenisca usando una rampa de tierra o un andamiaje de madera. Pero los dinteles no descansan en las jambas sin más. Para dar estabilidad a su obra,los constructores de Stonehenge emplearon un sistema de caja y espiga que conectaba los soportes y los dinteles. Además, los extremos de los dinteles poseían alternativamente lengüetas y muescas, de manera que la lengüeta del extremo de un dintel encajaba en la muesca tallada en el extremo del siguiente. Estas técnicas de ensamblaje habrían sido perfeccionadas durante la construcción de anteriores monumentos de madera.
Una vez erigidos los soportes de arenisca se disponían los bloques de basalto azulado (bluestones), proceso que culminaba con la colocación de la«Piedra del Altar» como punto focal del monumento. Finalmente, para identificar el eje principal del solsticio de verano, se debieron de añadir la «Piedra Talón» y la «Piedra del Sacrificio».
El resultado de esta actividad fue un monumento emblemático, formado por cinco partes. En primer lugar, el círculo exterior de 30 metros de diámetro con 30 bloques de piedra arenisca (sarsen) de 4,30 metros de altura hábilmente labrados, coronados por dinteles. En segundo lugar, las bluestones, dispuestas en un círculo formado por 57 piedras. En tercer lugar, y en medio del círculo, una estructura en forma de herradura compuesta por cinco trilitos de sarsen, que estaba abierta hacia el noreste y contenía en su interior otro óvalo de bluestones. En cuarto lugar, la Piedra del Altar, en el centro del monumento. Por último, la Piedra del Sacrificio y la Piedra Talón, al este del conjunto.
Hacia 1600 a.C. se dieron unos toques finales, cuando se cavó un doble anillo de hoyos (conocidos como hoyos Y y Z) en torno al círculo principal de piedras sarsen. El propósito de estos agujeros era sostener piedras o postes de madera que nunca llegaron a instalarse, y la estructura fue abandonada. De hecho, parece que el conjunto cayó en el olvido, puesto que no hay evidencia de que después de 1500 a.C. se depositaran otros artefactos en Stonehenge, o de que el monumento estuviera en uso.
¿CUÁL ERA SU FUNCIÓN?
La extraordinaria inversión de tiempo y esfuerzo humano que requirió la edificación de Stonehenge sugiere que estaba diseñado con un propósito especial, y la interpretación más aceptada actualmente es la de que fue un centro ritual prehistórico alineado con el movimiento del Sol. Pero para comprender por qué sucesivas generaciones dedicaron buena parte de sus energías a construir este colosal monumento debemos situarnos en el contexto de la Europa neolítica.
Stonehenge estaba diseñado con un propósito especial
Las primeras comunidades agrícolas dependían por completo del ciclo de las estaciones, cuyo transcurso implicaba períodos de abundancia de alimento, como la primavera y el verano, y otros de carencia, como el otoño y el invierno. Así pues, no es de extrañar que el eje de Stonehenge se alinee con el sol naciente en el solsticio de verano y con la puesta de sol en el solsticio de invierno. El solsticio de verano, que varía entre los días 21 y 24 de junio, es el momento del año en que el Sol está en su cénit, y es, por tanto, el día más largo del año, mientras que el solsticio de invierno marca el día más corto del año, alrededor del 21 de diciembre, cuando el Sol está más bajo en el firmamento.
La alineación de Stonehenge con el solsticio de verano permite concluir que se debió levantar para acoger una actividad ritual o festivales estacionales relacionados con la observación del Sol y posiblemente de la Luna. Es probable que estas ceremonias representasen ideas sobre la fecundidad, la vida, la muerte y el Más Allá. Sin embargo, puesto que su construcción comprendió más de 1.500 años, su significado pudo cambiar con el paso del tiempo.
La presencia de enterramientos asociados con Stonehenge añade una nueva dimensión al aspecto ritual del monumento. El descubrimiento en 2008 de más de sesenta restos de cremaciones datados entre 3000 y 2500 a.C. respalda la imagen de Stonehenge como lugar de culto ancestral. Otros enterramientos asociados con este monumento han cambiado nuestra perspectiva de la gente que levantó, habitó y visitó este lugar. Así sucedió con el hallazgo, en el año 2002, de la tumba de un hombre de la Edad del Bronce: el llamado Arquero de Amesbury, enterrado hacia 2400 a.C.
Una de sus dagas de cobre procedía de la península Ibérica, y el análisis del esmalte dental indicaba que había crecido en la región de los Alpes. Por otra parte, el descubrimiento, en 2005, del esqueleto de un joven que fue enterrado con un collar de unas 90 cuentas de ámbar en Boscombe Down confirma la idea de Stonehenge como monumento de gran trascendencia, cuya esfera de influencia superaba las islas Británicas. En efecto, el análisis de las cuentas mostró que procedían del mar Báltico, mientras que el estudio del esmalte dental reveló que el esqueleto, datado hacia 1550 a.C., se correspondía con el de una persona procedente de la Europa mediterránea.
¿QUÉ SABEMOS SOBRE STONEHENGE?
Los enterramientos citados evidencian una conexión directa entre Stonehenge y otras partes de Europa que se remonta al menos a 2300-2200 a.C. Por tanto, en respuesta a la pregunta de quién construyó Stonehenge, podemos sugerir que fueron personas tanto del Neolítico como de la Edad del Bronce, con vínculos comerciales y posiblemente religiosos con la Europa continental. Y lo edificaron en varias fases, en un reflejo de las transformaciones sociales y religiosas ocurridas a lo largo de 1.600 años.
Desconocemos quién asistía a las ceremonias en Stonehenge, si allí se congregaba toda una comunidad o sólo albergaba una reunión de las élites. En todo caso, podemos deducir que este monumento era el centro ritual de un sistema religioso asociado con los antepasados y con el movimiento del Sol y de la Luna. Y el análisis de los enterramientos nos sugiere que Stonehenge fue uno de los lugares más sagrados y reverenciados en Europa entre el Neolítico y la Edad del Bronce, desde sus orígenes en 3100 a.C. hasta su cénit en 2100 a.C. Pero siempre estaremos a la espera de que un nuevo estudio, otra excavación arqueológica o un hallazgo fortuito ofrezcan una nueva interpretación de este conjunto singular.
PARA SABER MÁS
Sociedades europeas de la Edad del Bronce. Anthony F. Harding. Ariel, Barcelona, 2003.
Stonehenge. Exploring the Greatest Stone Age Mystery. Mike Parker Pearson. Simon&Schuster, 2013.
Stonehenge. Bernard Cornwell. Edhasa, Barcelona, 2009.
The Hidden Landscapes Project
No hay comentarios:
Publicar un comentario