Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., continuando con la historia de La Casa de la Loma tiene un Fantasma y como informamos en el capítulo anterior; desde el Ecuador regresó Pascual y cuatro forajidos ecuatorianos con el propósito de exterminar a la familia Manchay, aprovechando de "El Día de las Velaciones"; ellos habían preparado un acto de provocación, pero todo les salió muy mal, por que no contaban con la astucia en la defensa de parte de Horacio Manchay, quien era el hijo mayor de Porfirio; este joven haciendo uso de su habilidad en el arte del ataque y defensa, venció a Pascual y sus hermanos Florencio y Teovaldo desarmaron a los cuatro ecuatorianos; los agresores no les quedó otro camino que huir, alguien comentó que fue un error dejarlos ir con vida, por que regresarán a atacar en plan de venganza
Aquí en la imagen observamos una típica casa en la Comunidad Campesina de Socchabamba, Ayabaca, Piura, Perú; es una construcción de adobe con techo de tejas rojas y a dos aguas, sobre el techo distinguimos un fantasma que viene a ser el "El Rey de las Tinieblas" : Satanás, seguido de vampiros y una siniestra sombra negra que rodea al misterioso personaje satánico, para comprender la narrativa de la obra literaria: "LA CASA DE LA LOMA TIENE UN FANTASMA" , esta imagen será nuestro símbolo de identificación y el logotipo en creación, impresión y distribución literaria. Con reconocimiento de derechos de autor, con Partida Registral Nº 00393-2010, Asiento 01, con fecha 27 de marzo de 2010 por INDICOPI.
Después que Pascual, huyó luego de haber superado su estado de inconsciencia, debido a un tremendo puñetazo que le dio Horacio a la altura de la nariz, que le afectó al tabique nasal produciéndole una hemorragia con mucho sangrado y el pérdida del conocimiento; los ecuatorianos aliados de Pascual en vergonzosa huida solo llegaron a la Quebrada Grande y estando allí estaban muy apesadumbrados por no haber hecho nada en defensa de Pascual y ellos mismos estuvieron en peligro al ser desarmados y doblegados por dos jóvenes campesinos(hermanos de Horacio).
Uno de los ecuatorianos dijo a los demás:
--- Somos unos cobardes, no encuentro explicación que dos "pollitas jóvenes" (diminutivo de gallina, como ellos llaman despectivamente a los peruanos) nos hayan dominado, ahora estamos sin armas y sin nuestro amigo Pascual.
Uno de ellos que escuchaba le interrumpió, replicando:
--- No ladres como "perro de agua", fuimos doblegados por que nos sorprendieron, pero si podemos retornar en la noche y recuperar nuestras armas, por que a esas horas las "gallinas" ya estarán en su gallinero, durmiendo la borrachera del aguardiente.
Los cuatro ecuatorianos se miraron entre ellos y aceptaron que era una buena idea retornar hasta la vivienda de los Manchay, pero ninguno de ellos conocía Jurupe, lugar de la residencia de Don Porfirio; además no tenían un plan de ataque que les sea favorable y dominar a los dueños de casa.
Al mismo tiempo ya en el anochecer, Don Porfirio y sus hijos llegaron a Jurupe, muy animados por todos los sucesos del día, que en todo momento les fue favorable, gracias al coraje de Horacio, secundado por sus hermanos; acontecimiento que hinchó de orgullo sano a su progenitor.
Pero, había que tomar precauciones por que una victoria legítima, origina reacciones tardías del perdedor que pretende lograr la revancha a cualquier costo y utilizando los recursos más traicionaros con la única intención de sorprender al rival en desventaja y así convertir una derrota en triunfo fulero.
Horacio Manchay, pensaba justamente así:
"Si hemos vencido a cinco individuos siendo nosotros tres, esta victoria los motivará para buscar la revancha en acciones de cobardía traicionera"
Y dirigiéndose a sus hermanos, les dijo:
--- Hermanos, hoy salimos victoriosos contra el ataque de cinco forajidos y aún no hemos cobrado la deuda pendiente contra la muerte del tío Melchor y estoy seguro que los cobardes no han huido al Ecuador, sólo salieron del tumulto y regresarán, aunque ustedes no lo crean, este regreso es justamente nuestro ajuste de cuentas.
Florencio, algo sorprendido por lo que estaba escuchando, preguntó:
--- No entiendo su plan hermano, si cuando lo tumbastes, podías haber dado el golpe final, atravesándole el hígado tal como lo hizo él, contra nuestro tío Melchor... ¿Por qué no lo hiciste?
Horacio, que actuaba como un gran estratega en el arte de la lucha, sonriendo asi respondió:
--- Florencio, hay que ser inteligente al atacar al enemigo, atacándolo con pequeños golpes sin matarlo, y cuando tienes mucho público presionando el hecho; si lo hubieses matado allí, es probable que la mitad de la gente que estaba allí, se volverán mis enemigos y hasta me atacarían, argumentando que soy un abusivo matando a un indefenso e inocente hombre...
Horacio, hizo una pausa y agregó:
--- Entonces, dándole un puñetazo lo saqué fuera de combate.y este individuo humillado bajo el amparo de las sombras nos atacará por la espalda....por que no puede luchar en juego limpio.
Horacio, nuevamente se tomó un descanso y finalizó:
--- Ahora, tenemos que hacer guardia, tornándonos toda la noche, ya que tendremos "visita no deseada" los cuatro perros los amarraremos uno por cada esquina. que nos darán la alerta; además, encenderemos las lámparas con mechones, para advertir al adversario que lo estamos esperando y en todo momento nos mantendremos seremos sin mostrar ningún signo de debilidad.
Don Porfirio que estaba cansado y con mucho sueño al escuchar el plan de defensa de su hijo Horacio, le seguía sorprendiendo con ese talento de creatividad para defenderse de los contrarios(rivales) que nunca escuchó antes.
Pero no dijo nada, se fue a su cama, se acostó y rápidamente se quedó profundamente dormido con ronquidos que movían los cimientos de la casa.
Este ruido paternal, produjo una sonrisa a los tres hijos y fue Teovaldo el humorista, quien dijo:
--- Nuestro padre ronca como un toro moledor, de dos medias de guarapo para convertirle en dulce (chancaca).
Florencio, interviene riéndose a carcajadas, diciendo:
--- Oye hermano, desde cuando has escuchado que los toros roncan..jajajajaja ja ja
Los tres hermanos soltaron sus carcajadas celebrando la original ocurrencia.. que "los toros roncan"... lo cierto fue que Don Porfirio se sentía seguro bajo la protección de sus hijos, ya que el mismo lo vio defenderse y dejar fuera de combate a cinco forajidos; pero lamentablemente "las cosas buenas duran poco", por que los muchachos como única fuente de riqueza rápida es laactividad del bandolerismo que linda contra el delito.
En un lugar de la Quebrada Grande, descansaban los cuatro ecuatorianos, haciendo planes para regresar y recuperar sus armas que les fueron arrebatadas por los hermanos Manchay, pero ellos no conocían donde viven, cuando escucharon que bajaba un jinete al mismo lugar donde ellos estaban, como natural reacción se escondieron detrás de unos chopes...
¡¡¡ Cuál sorpresa para ellos era lo mismo Pascual sano y salvo montado que apuraba a su caballo!!!
¡¡¡ Cuál sorpresa para ellos era lo mismo Pascual sano y salvo montado que apuraba a su caballo!!!
Entonces, salieron a dar el encuentro y pedir disculpas por que no hayan pedido defenderlo y uno de ellos, le saludó:
--- Que bueno verlo sano y salvo amigo Pascual, nunca nos imaginamos que nos estaban siguiendo, desgraciadamente en el Panteón (Cementerio) nos sorprendieron dos jóvenes campesinos y como nos pusieron la chaveta en el cuello, no opusimos ninguna resistencia y entregamos nuestras armas...... continuaremos.....
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui
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