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miércoles, 22 de agosto de 2018

LA LUNA: NASA .- AGUA .- Confirmada la Presencia de Hielo en la Superficie de la Luna

Hola amigos: A VUELO DE UN QUINDE EL BLOG., por fin se confirma lo que todos los aficionados lo creíamos;  que efectivamente en La Luna hay agua; NASA, confirma la presencia de hielo en la parte oscura y frías de la regiones polares.
NASA .- dice : "El equipo, liderado por Shuai Li, de la Universidad de Hawai y la Universidad de Brown, y que incluye a Richard Elphic del Centro de Investigación Ames de la NASA en Silicon Valley, en California, ha utilizado datos del instrumento Moon Mineralogy Mapper (M3) de la NASA para identificar tres firmas específicas que definitivamente prueban que hay hielo de agua en la superficie de la Luna..."
NASA .- agrega : "M3, a bordo de la nave espacial Chandrayaan-1, lanzada en 2008 por la Organización de Investigación Espacial de la India, estaba equipada de manera única para confirmar la presencia de hielo sólido en la Luna. Recolectó datos que no solo recogían las propiedades reflectivas que se esperaría del hielo, sino que también podía medir directamente la forma distintiva en que sus moléculas absorben la luz infrarroja, por lo que puede diferenciar entre agua líquida o vapor y hielo sólido.."
NASA .- añade : "La mayor parte del hielo recién descubierto se encuentra en las sombras de los cráteres cerca de los polos, donde las temperaturas más cálidas nunca superan los -250 grados Fahrenheit (-156 grados Centígrados). Debido a la muy pequeña inclinación del eje de rotación de la Luna, la luz del Sol nunca llega a estas regiones...."

Confirmada la Presencia de Hielo en la Superficie de la Luna

21.08.18.- En las partes más oscuras y frías de sus regiones polares, un equipo de científicos ha observado directamente la evidencia definitiva de hielo de agua en la superficie de la Luna. Estos depósitos de hielo están distribuidos irregularmente y podrían ser antiguos. En el polo sur, la mayor parte del hielo se concentra en los cráteres lunares, mientras que el hielo del polo norte es más extenso, pero disperso.
El equipo, liderado por Shuai Li, de la Universidad de Hawai y la Universidad de Brown, y que incluye a Richard Elphic del Centro de Investigación Ames de la NASA en Silicon Valley, en California, ha utilizado datos del instrumento Moon Mineralogy Mapper (M3) de la NASA para identificar tres firmas específicas que definitivamente prueban que hay hielo de agua en la superficie de la Luna.
M3, a bordo de la nave espacial Chandrayaan-1, lanzada en 2008 por la Organización de Investigación Espacial de la India, estaba equipada de manera única para confirmar la presencia de hielo sólido en la Luna. Recolectó datos que no solo recogían las propiedades reflectivas que se esperaría del hielo, sino que también podía medir directamente la forma distintiva en que sus moléculas absorben la luz infrarroja, por lo que puede diferenciar entre agua líquida o vapor y hielo sólido.
La mayor parte del hielo recién descubierto se encuentra en las sombras de los cráteres cerca de los polos, donde las temperaturas más cálidas nunca superan los -250 grados Fahrenheit (-156 grados Centígrados). Debido a la muy pequeña inclinación del eje de rotación de la Luna, la luz del Sol nunca llega a estas regiones.
Las observaciones previas encontraron indirectamente posibles signos de hielo en la superficie en el polo sur lunar, pero estos podrían haber sido explicados por otros fenómenos, como el suelo lunar inusualmente reflexivo.
Con suficiente hielo en la superficie, dentro de los primeros milímetros, el agua posiblemente sea accesible como un recurso para futuras expediciones para explorar e incluso permanecer en la Luna, y potencialmente más fácil de acceder que el agua detectada debajo de la superficie de la Luna.

La imagen muestra la distribución del hielo de la superficie en el polo sur de la Luna (izquierda) y el polo norte (derecha), detectado por el instrumento Moon Mineralogy Mapper de la NASA. El azul representa las ubicaciones de hielo, trazadas sobre una imagen de la superficie lunar, donde la escala de grises corresponde a la temperatura de la superficie (el más oscuro representa las áreas más frías y las sombras más claras indican las zonas más cálidas). El hielo se concentra en las ubicaciones más oscuras y más frías, en las sombras de los cráteres. Esta es la primera vez que los científicos observan directamente la evidencia definitiva de hielo de agua en la superficie de la Luna. Image Credit: NASA

El Agua en la Luna Podría Estar Ampliamente Distribuida

 
25.02.18.- Un nuevo análisis de los datos de dos misiones lunares ha encontrado evidencias de que el agua de la Luna está ampliamente distribuida y no está confinada a una región o tipo de terreno en particular. El agua parece estar presente día y noche, aunque no es fácilmente accesible.
Los hallazgos podrían ayudar a los investigadores a comprender el origen del agua de la Luna y lo fácil que sería usarla como recurso. Si la Luna tiene suficiente agua, y si es razonablemente accesible, los futuros exploradores podrían usarla como agua potable o convertirla en hidrógeno y oxígeno para el combustible de los cohetes o el oxígeno para respirar.
"Encontramos que no importa a qué hora del día ni a qué latitud nos fijemos, la señal que indica el agua siempre parece estar presente", dijo Joshua Bandfield, investigador principal del Instituto Espacial de Ciencias en Boulder, Colorado, y autor principal del nuevo estudio publicado en Nature Geoscience.
Los resultados contradicen algunos estudios anteriores, que sugirieron que se detectó más agua en las latitudes polares de la Luna y que la fuerza de la señal del agua aumenta y disminuye según el día lunar (29,5 días terrestres). Tomando esto en conjunto, algunos investigadores propusieron que las moléculas de agua pueden "saltar" a través de la superficie lunar hasta que entren en trampas frías en los rincones oscuros de los cráteres cerca de los polos norte y sur. En ciencia planetaria, una trampa fría es una región que es tan fría, que el vapor de agua y otros volátiles que entran en contacto con la superficie permanecerán estables durante un período de tiempo prolongado, tal vez hasta varios miles de millones de años.
Los debates continúan debido a las sutilezas de cómo se ha logrado la detección hasta el momento. La evidencia principal proviene de instrumentos de detección remota que midieron la fuerza de la luz solar reflejada en la superficie lunar. Cuando hay agua presente, instrumentos como estos recogen una huella dactilar espectral a longitudes de onda cercanas a los 3 micrómetros, que se encuentra más allá de la luz visible y en el ámbito de la radiación infrarroja.
Pero la superficie de la Luna también puede calentarse lo suficiente como para "brillar" o emitir su propia luz en la región infrarroja del espectro. El desafío es desenredar esta mezcla de luz reflejada y emitida. Para desentrañar los dos, los investigadores deben tener información de temperatura muy precisa.
Bandfield y sus colegas presentaron una nueva forma de incorporar información de temperatura, creando un modelo detallado a partir de las mediciones realizadas por el instrumento Diviner de la sonda espacial LRO de la NASA. El equipo aplicó este modelo de temperatura a los datos recopilados anteriormente por Moon Mineralogy Mapper, un espectrómetro visible e infrarrojo que el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California, proporcionó para el orbitador Chandrayaan-1 de la India.
El nuevo hallazgo de agua generalizada y relativamente inmóvil sugiere que puede estar presente principalmente como OH, una relación más reactiva del H2O que está compuesta de un átomo de oxígeno y un átomo de hidrógeno. OH, también llamado hidroxilo, no se mantiene por sí solo por mucho tiempo, prefiriendo atacar moléculas o adherirse químicamente a ellas. Por lo tanto, debe extraerse de los minerales para poder ser utilizado.
La investigación también sugiere que cualquier H2O presente en la Luna no está ligeramente adherido a la superficie.
"Al establecer algunos límites sobre lo móvil que es el agua o el OH en la superficie, podemos ayudar a limitar la cantidad de agua que podría alcanzar las trampas de frío en las regiones polares", dijo Michael Poston del Instituto de Investigación del Suroeste en San Antonio, Texas.
Clasificar lo que sucede en la Luna también podría ayudar a los investigadores a comprender las fuentes de agua y su almacenamiento a largo plazo en otros cuerpos rocosos en todo el sistema solar.

Un nuevo análisis de los datos de dos misiones lunares ha encontrado evidencias de que el agua de la Luna está ampliamente distribuida y no está confinada a una región o tipo de terreno en particular. El agua parece estar presente día y noche, aunque no es fácilmente accesible. Image Credit: NASA/GSFC

El Polo Sur Lunar Salpicado de Cráteres

28.05.14.- El eje de rotación de nuestro satélite natural se ha inclinado 1.5º, lo que significa que en sus polos hay puntos que nunca ven la luz del sol. El fondo de algunos cráteres, por ejemplo, siempre está en sombra. 
Esta imagen mosaico, obtenida con el instrumento Advanced Moon Imaging Experiment de la nave de la ESA SMART-1, muestra una región salpicada de cráteres en el polo Sur lunar. Obtenida durante el verano del hemisferio sur lunar entre diciembre de 2005 y marzo de 2006, la imagen está compuesta por unas 40 fotos individuales que cubren un área de 500 x 150 km.
Los cráteres en la imagen son (de derecha a izquierda y a partir de la mayor forma circular): Amundsen, Faustini, Shoemaker, Shackleton y de Gerlache.
Imagen de los cráteres del polo sur lunar
Imagen de los cráteres del polo sur lunar. Image Credit: ESA
Amundsen, de 105 Km de diámetro, es el mayor del grupo, seguido de Shoemaker (50 km), Faustini (39 km), de Gerlache (32 km) y Shackleton (19 km). Todos los cráteres tienen características interesantes, y reciben cantidades distintas de luz solar.
El polo Sur lunar está en el borde del cráter Shackleton, el pequeño círculo visible a la izquierda del centro de la imagen. Los investigadores han demostrado que este cráter es más antiguo que la región donde aterrizó el módulo Apolo 15 (3.300 millones de años), pero más reciente que la escogida para el Apolo 14 (3.850 millones de años). 
El cráter Shoemaker, visible a la izquierda de la parte central, arriba, es donde se produjo en 1999 el impacto deliberado de la misión Lunar Prospector. El objetivo entonces era determinar la posible presencia de agua , que el calor generado en el choque habría transformado en una columna detectable de vapor de agua. Finalmente no se detectó vapor de agua, pero la posibilidad de que haya agua en la Luna no se ha descartado en absoluto: aún es posible que las regiones que llevan millones de años en permanente sombra alberguen hielo de agua procedente de cometas o asteroides.
El estudio de las oscuras profundidades de estos cráteres podría darnos mucha información no solo sobre la historia de la Luna, sino también sobre la Tierra; nos ayudarían a entender cuánta agua y materia orgánica han pasado de la Luna a la Tierra, y de qué manera.

LCROSS Impact Data Indicates Water on Moon

        Datos de impacto de LCROSS indican agua en la luna
Plume on lunar surface from impact
The visible camera image showing the ejecta plume at about 20 seconds after impact.
Credits: NASA
Data from LCROSS spectrometer
Data from the down-looking near-infrared spectrometer. The red curve shows how the spectra would look with water vapor and ice added in appropriate amounts to match the dips in the observations. The yellow areas indicate the water absorption bands.
Credits: NASA
Graph of data from LCROSS spectrometer
Data from the ultraviolet/visible spectrometer taken shortly after impact showing emission lines (indicated by arrows). These emission lines are diagnostic of compounds in the vapor/debris cloud.
Credits: NASA
 
Click here for more images of the results.

The argument that the moon is a dry, desolate place no longer holds water.

Secrets the moon has been holding, for perhaps billions of years, are now being revealed to the delight of scientists and space enthusiasts alike.

NASA today opened a new chapter in our understanding of the moon. Preliminary data from the Lunar CRater Observation and Sensing Satellite, or LCROSS, indicates that the mission successfully uncovered water during the Oct. 9, 2009 impacts into the permanently shadowed region of Cabeus crater near the moon's south pole.

The impact created by the LCROSS Centaur upper stage rocket created a two-part plume of material from the bottom of the crater. The first part was a high angle plume of vapor and fine dust and the second a lower angle ejecta curtain of heavier material. This material has not seen sunlight in billions of years.

"We're unlocking the mysteries of our nearest neighbor and by extension the solar system. It turns out the moon harbors many secrets, and LCROSS has added a new layer to our understanding," said Michael Wargo, chief lunar scientist at NASA Headquarters in Washington.

Scientists have long speculated about the source of vast quantities of hydrogen that have been observed at the lunar poles. The LCROSS findings are shedding new light on the question of water, which could be more widespread and in greater quantity than previously suspected.

Permanently shadowed regions could hold a key to the history and evolution of the solar system, much as an ice core sample taken on Earth reveals ancient data. In addition, water, and other compounds represent potential resources that could sustain future lunar exploration.

Since the impacts, the LCROSS science team has been working almost nonstop analyzing the huge amount of data the spacecraft collected. The team concentrated on data from the satellite's spectrometers, which provide the most definitive information about the presence of water. A spectrometer examines light emitted or absorbed by materials that helps identify their composition.

"We are ecstatic," said Anthony Colaprete, LCROSS project scientist and principal investigator at NASA's Ames Research Center in Moffett Field, Calif. "Multiple lines of evidence show water was present in both the high angle vapor plume and the ejecta curtain created by the LCROSS Centaur impact. The concentration and distribution of water and other substances requires further analysis, but it is safe to say Cabeus holds water."

The team took the known near infrared spectral signatures of water and other materials and compared them to the spectra collected by the LCROSS near infrared spectrometer of the impact.

"We were only able to match the spectra from LCROSS data when we inserted the spectra for water," said Colaprete. "No other reasonable combination of other compounds that we tried matched the observations. The possibility of contamination from the Centaur also was ruled out."

Additional confirmation came from an emission in the ultraviolet spectrum that was attributed to hydroxyl, one product from the break-up of water by sunlight. When atoms and molecules are excited, they release energy at specific wavelengths that are detected by the spectrometers. A similar process is used in neon signs. When electrified, a specific gas will produce a distinct color. The ultraviolet visible spectrometer detected hydroxyl signatures just after impact that are consistent with a water vapor cloud in sunlight.

Data from the other LCROSS instruments are being analyzed for additional clues about the state and distribution of the material at the impact site. The LCROSS science team along with colleagues are poring over the data to understand the entire impact event, from flash to crater, with the final goal being the understanding of the distribution of materials, and in particular volatiles, within the soil at the impact site.

"The full understanding of the LCROSS data may take some time. The data is that rich," said Colaprete. "Along with the water in Cabeus, there are hints of other intriguing substances. The permanently shadowed regions of the moon are truly cold traps, collecting and preserving material over billions of years."

LCROSS was launched June 18, 2009 as a companion mission to the Lunar Reconnaissance Orbiter, or LRO, from NASA's Kennedy Space Center in Florida. After separating from LRO, the LCROSS spacecraft held onto the spent Centaur upper stage rocket of the launch vehicle, executed a lunar swingby and entered into a series of long looping orbits around the Earth.

After traveling approximately 113 days and nearly 5.6 million miles (9 million km), the Centaur and LCROSS separated on final approach to the moon. Traveling as fast as a speeding bullet, the Centaur impacted the lunar surface shortly after 4:31 a.m. PDT Oct. 9 with LCROSS watching with its onboard instruments. Approximately four minutes of data was collected before the LCROSS itself impacted the lunar surface.

Working closely with scientists from LRO and other observatories that viewed the impact, the LCROSS team is working to understand the full scope of the LCROSS data. LRO continues to make passes over the impact site to give the LCROSS team additional insight into the mechanics of the impact and its resulting craters.
What other secrets will the moon reveal? The analysis continues!
  Last Updated: Aug. 7, 2017
Editor: NASA Content Administrator
 
 
El argumento de que la Luna es un lugar seco y desolado ya no contiene agua.

 
Los secretos que la Luna ha estado reteniendo, tal vez miles de millones de años, ahora se están revelando para el deleite de los científicos y entusiastas del espacio por igual.

 
La NASA hoy abrió un nuevo capítulo en nuestra comprensión de la Luna. Los datos preliminares del Satélite de Observación y Detección Lunar CRater, o LCROSS, indican que la misión descubrió con éxito agua durante los impactos del 9 de octubre de 2009 en la región del cráter Cabeus permanentemente en sombra cerca del polo sur de la luna.

 
El impacto creado por el cohete LCROSS Centaur en la etapa superior creó una columna de material en dos partes desde el fondo del cráter. La primera parte era una pluma de alto ángulo de vapor y polvo fino y la segunda una cortina de eyección de ángulo inferior de material más pesado. Este material no ha visto la luz del sol en miles de millones de años.

 
"Estamos desbloqueando los misterios de nuestro vecino más cercano y, por extensión, el sistema solar. Resulta que la luna alberga muchos secretos, y LCROSS ha agregado una nueva capa para nuestro entendimiento", dijo Michael Wargo, científico lunar jefe en la sede de la NASA en Washington.

 
Los científicos han especulado durante mucho tiempo sobre la fuente de grandes cantidades de hidrógeno que se han observado en los polos lunares. Los hallazgos de LCROSS arrojan nueva luz sobre la cuestión del agua, que podría estar más extendida y en mayor cantidad de lo que se sospechaba anteriormente.

 
Las regiones permanentemente sombreadas podrían ser la clave de la historia y la evolución del sistema solar, del mismo modo que una muestra del núcleo de hielo tomada en la Tierra revela datos antiguos. Además, el agua y otros compuestos representan recursos potenciales que podrían sustentar la exploración lunar en el futuro.

 
Desde los impactos, el equipo científico de LCROSS ha estado trabajando casi sin parar en el análisis de la gran cantidad de datos que la nave espacial recolectó. El equipo se concentró en los datos de los espectrómetros del satélite, que proporcionan la información más definitiva sobre la presencia de agua. Un espectrómetro examina la luz emitida o absorbida por los materiales que ayuda a identificar su composición.

 
"Estamos encantados", dijo Anthony Colaprete, científico del proyecto LCROSS e investigador principal en el Centro de Investigación Ames de la NASA en Moffe.
NASA

El Antiguo Hielo Polar Revela La Inclinación de la Luna Terrestre


24.03.16.- Una nueva investigación financiada por la NASA proporciona la evidencia de que el eje de rotación de la Luna de la Tierra se movió unos cinco grados hace aproximadamente tres mil millones de años. La evidencia de este movimiento se registra a través de la distribución del antiguo hielo lunar. Los depósitos de hidrógeno localizados en los polos de la Luna demuestran que el satélite tuvo en el pasado un eje de rotación diferente al actual.
"No siempre la misma cara de la Luna ha apuntado hacia la Tierra," dijo Matthew Siegler del Instituto de Ciencia Planetaria en Tucson, Arizona, autor principal de un artículo de la revista Nature . "A medida que el eje se trasladó, también lo hizo la cara que el hombre observa de la Luna."
 
Una nueva investigación financiada por la NASA proporciona la evidencia de que el eje de rotación de la Luna de la Tierra se movió unos cinco grados hace
aproximadamente tres mil millones de años. Image Credit: James Keane, University of Arizona; Richard Miller, University of Alabama at Huntsville

Siegler se dio cuenta de que la distribución del hielo observado en cada uno de los polos de la Luna parecía estar más relacionado entre sí de lo que se pensaba anteriormente. Tras realizar investigaciones adicionales, Siegler - y su co-autor Richard Miller, de la Universidad de Alabama en Huntsville descubrieron que las concentraciones de hielo fueron desplazadas de cada polo a una distancia similar, pero en direcciones exactamente opuestas, lo que sugiere que el eje de giro en el pasado estaba en una posición más oblicua de lo que vemos hoy en día.
Un cambio en la inclinación significa que parte del hielo depositado se evaporó hace mucho tiempo al estar expuesto a la luz solar, pero las áreas que permanecen en la sombra entre la vieja y la nueva orientación conservan su hielo y todavía pueden indicar qué sucedió.
Según Siegler, "Estos hallazgos podrían abrir la puerta a nuevos descubrimientos sobre la evolución interior de la luna, así como el origen del agua en la Luna y la Tierra."
NASA
Guillermo Gonzalo Sánchez Achutegui

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